Comentario de Hebreos 11:11 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Por la fe, a pesar de que Sara misma era estéril, él recibió fuerzas para engendrar un hijo cuando había pasado de la edad; porque consideró que el que lo había prometido era fiel.
11:11 — «Por la fe también la misma Sara». Ella que antes no había creído (Gén 18:11-15), ahora sí creyó y como consecuencia pudo concebir. Tenía como 90 años de edad (Gén 17:17), y ya no podía concebir según las leyes naturales (Gén 18:11; Rom 4:19). Solamente la fe le pudo guiar a aceptar la promesa de Dios respecto a un hijo. — «porque creyó que era fiel quien lo había prometido». La fidelidad de Dios fue la única base de la fe de Sara. Según lo que se veía, era imposible. Pero la fe es la convicción de lo que no se ve (versículo 1).Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
Sara, siendo estéril. Gén 17:17-19; Gén 18:11-14; Gén 21:1, Gén 21:2; Luc 1:36; 1Pe 3:5, 1Pe 3:6.
porque creyó que era fiel. Heb 10:23; Rom 4:20, Rom 4:21.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Aún cuando el libro de Génesis no lo dice explícitamente, Sara evidentemente creía que nada era demasiado difícil para el Señor (Gén 18:1-33. Gén 15:1-21). Como resultado, Dios la bendijo con el hijo prometido, aunque estaba fuera del tiempo de la edad para concebir. Las estrellas … la arena: Esta comparación puede considerarse ridícula. Pero ahora los astrofísicos reconocen la legitimidad de la comparación de las «estrellas del cielo» y «la arena del mar».
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
fuera del tiempo de la edad. A los noventa años de edad (Gén 17:17), ella había pasado mucho tiempo atrás por la edad máxima para tener hijos y nunca había podido concebir. A pesar de esto, Dios la capacitó para ser madre debido a la fe de ella en su promesa (Gén 21:1-3).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Sara. Vea Gén 11:27-32; Gén 12:1-20; Gén 13:1-18; Gén 14:1-24; Gén 15:1-21; Gén 16:1-16; Gén 17:1-27; Gén 18:1-33; Gén 19:1-38; Gén 20:1-18; Gén 21:1-34; Gén 22:1-24; Gén 23:1-2; 1Pe 3:5-6.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
11:11 — «Por la fe también la misma Sara». Ella que antes no había creído (Gén 18:11-15), ahora sí creyó y como consecuencia pudo concebir. Tenía como 90 años de edad (Gén 17:17), y ya no podía concebir según las leyes naturales (Gén 18:11; Rom 4:19). Solamente la fe le pudo guiar a aceptar la promesa de Dios respecto a un hijo.
–«porque creyó que era fiel quien lo había prometido». La fidelidad de Dios fue la única base de la fe de Sara. Según lo que se veía, era imposible. Pero la fe es la convicción de lo que no se ve (versículo 1).
Fuente: Notas Reeves-Partain
CREER LO INCREÍBLE
Hebreos 11:11-12
Fue por su fe por lo que Sara también recibió poder para quedarse embarazada y dar a luz aunque ya se le había pasado el tiempo con mucho; porque creyó que se podía confiar plenamente en el Que lo había prometido. Y así, de un solo hombre, y un hombre cuyo cuerpo había perdido ya toda la vitalidad, nació una descendencia tan numerosa como las estrellas del cielo y tan incontable como la arena de las playas.
La historia de la promesa que Dios les hizo a Abraham y Sara de que tendrían un hijo se cuenta en Ge 17:15-22 ; Ge 18:9-15 ; Ge 21:1-8 . Lo maravilloso es que Abraham y Sara eran muy ancianos, y hacía mucho que se les había pasado la edad de engendrar y concebir hijos; pero, según la antigua historia, Dios les hizo la promesa, y la cumplió.
La reacción de Abraham y Sara tuvo tres etapas.
(i) Empezó por la más completa incredulidad. Cuando Abraham oyó la promesa se llevó las manos a la cabeza y se echó a reír (Ge 17:17 ). Cuando la oyó Sara se rió para sus adentros (Ge 18:12 ). Al escuchar por primera vez las promesas de Dios, la reacción humana esa menudo pensar que son demasiado buenas para ser verdad.
No hay misterio en toda la creación que se pueda comparar con el amor de Dios. Que ame a la humanidad y sufra y muera por ella es algo que nos mueve a la más absoluta incredulidad. Por eso el Mensaje de Cristo es Evangelio, Buena Noticia; tan buena que nos parece increíble.
(ii) De ahí pasó al amanecer del darse cuenta. Después de la incredulidad vino el amanecer de que era Dios el Que les había hablado, y Dios no puede mentir. Los judíos solían establecer como ley primaria para un maestro que no debe prometerles nunca a sus alumnos lo que no tiene intención o posibilidad de cumplir; el hacerlo sería enseñarles a faltar a su palabra. Cuando recordamos que el que hace la promesa es Dios, nos damos cuenta de que tiene que ser cierta.
(iii) Y culminó en la capacidad de creer lo imposible. El que Abraham y Sara tuvieran un hijo, humanamente hablando era imposible. Como dijo Sara: » ¿Quién iba a decir que Sara iba a dar de mamar a hijos?» (Ge 21:7 ). Pero, por la gracia y el poder de Dios, lo imposible se hizo realidad. Hay algo aquí que eleva y ablanda cualquier corazón. Cavour dijo que lo más esencial de un estadista es » el sentido de lo imposible.» Cuando oímos a los hombres planificar y discutir y pensar en voz alta, nos da la impresión de que un gran número de cosas de este mundo que son deseables tienen que descartarse como imposibles. La gente se pasa la mayor parte de la vida poniéndole trabas al poder de Dios. La fe es la capacidad de echar mano de esa Gracia que es suficiente para todas nuestras necesidades, de tal manera que lo que era humanamente imposible se vuelve divinamente posible. Todo es posible para Dios y, por tanto, la palabra imposible no figura en el diccionario del cristiano ni de la Iglesia Cristiana.
Fuente: Comentario al Nuevo Testamento
Gén 18:11-14; Gén 21:2.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
— fundar un linaje: El texto griego es muy fluctuante en este pasaje. En primer lugar, son bastantes los mss. en que no aparece la palabra estéril. En segundo lugar, el sujeto de la frase puede ser Abrahán (así parece pedirlo el contexto y así se refleja en la presente traducción), o Sara, como opinan no pocos que, en consecuencia, traducen: Por la fe, incluso la misma Sara, (estéril ya) y a pesar de haber rebasado la edad apropiada, recibió fuerza para fundar un linaje.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
f 525 Gén 17:15
g 526 Gén 17:17
h 527 Gén 21:2
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Sara. Es claro que el nacimiento de Isaac fue por un acto milagroso de Dios, tanto por la avanzada edad de Abraham como por la esterilidad de Sara. La descendencia del pueblo de Dios se establece por la soberana voluntad de Dios y no por esfuerzos humanos.
Fuente: La Biblia de las Américas
Sara. Cp. Gén 21:1-5.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
para engendrar… → Gén 18:11-14; Gén 21:2; §130.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
R616 La preposición παρά tiene la idea de más allá de (pasada la edad).
R686 El pronombre αὐτή tiene un sentido intensivo: la misma Sara.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
Lit., para depositar la simiente
Fuente: La Biblia de las Américas
engendrar g §130.
11:11 g Gén_18:11-14; Gén_21:2.
Fuente: La Biblia Textual III Edición
* Algunas versiones dicen Abrahán.