Comentario de Hebreos 12:26 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Su voz estremeció la tierra en aquel entonces, y ahora ha prometido diciendo: Todavía una vez más estremeceré no sólo la tierra, sino también el cielo.

12:26

— «La voz del cual conmovió la tierra». Véanse Éxo 19:18; Sal 68:8.

— «pero ahora ha prometido, diciendo: Aún una vez, y conmoveré no solamente la tierra, sino también el cielo». Véase Hag 2:6-7. Esta profecía se refirió primariamente a la gloria del segundo templo, y luego a los cambios efectuados por la venida y reinado del Mesías (el Deseado de todas las naciones). El ser conmovida alguna cosa indica la naturaleza temporaria de ella. Los hermanos hebreos «se habían acercado» a lo que tiene permanencia y perfección y finalidad. ¿Por qué apostatarían de ello?

La presentación de la Ley de Moisés en Sinaí ocasionó una conmoción local, pero la introducción del evangelio «agitó» el universo. La voz de Dios hizo temblar a Sinaí, pero la introducción y consumación de lo de los versículos 22 al 24 hace que se conmueva todo el universo, pues no puede permanecer nada de lo temporario o de lo falso.

Esto enfatiza el hecho de que es mucho más sublime y admirable la introducción del evangelio que la de la Ley de Moisés, y por eso más peligrosa cosa sería apostatar del evangelio.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

la voz del cual conmovió. Éxo 19:18; Sal 114:6, Sal 114:7; Hab 3:10.

aún una vez. Heb 12:27; Isa 2:19; Isa 13:13; Joe 3:16; Hag 2:6, Hag 2:7, Hag 2:22.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

la tierra se conmovió en el monte Sinaí.

la tierra y el cielo serán sacudidos en días postreros (Mat 24:29). Pero el Reino de Dios no será conmovido, porque perdurará por toda la eternidad (Luc 18:29).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

CONMOVIÓ ENTONCES LA TIERRA. Algún día Dios destruirá el sistema del mundo actual y estremecerá con violencia todo el universo material (véanse Hag 2:6-9; Hag 2:21, notas). La forma actual del mundo no es eterna; será destruida por el fuego y reemplazada con un cielo nuevo y una tierra nueva (Apo 20:11; Apo 21:1; 2Pe 3:10-13). Lo único que conservará la forma que ahora tiene será el reino de Dios y quienes lo integran (v. Heb 12:28).

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

Cita de Hag 2:6.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

conmovió entonces la tierra. En el Monte Sinaí, Dios sacudió la tierra, mientras que desde Sión Él conmoverá los cielos y el universo entero (cp. Isa 13:13; Isa 34:4; Isa 65:17; Isa 65:22; 2Pe 3:10-13; Apo 6:12-14; Apo 20:11; Apo 21:1).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

12:26 — «La voz del cual conmovió la tierra». Véanse Éxo 19:18; Sal 68:8.
–«pero ahora ha prometido, diciendo: Aún una vez, y conmoveré no solamente la tierra, sino también el cielo». Véase Hag 2:6-7. Esta profecía se refirió primariamente a la gloria del segundo templo, y luego a los cambios efectuados por la venida y reinado del Mesías (el Deseado de todas las naciones). El ser conmovida alguna cosa indica la naturaleza temporaria de ella. Los hermanos hebreos «se habían acercado» a lo que tiene permanencia y perfección y finalidad. ¿Por qué apostatarían de ello?
La presentación de la Ley de Moisés en Sinaí ocasionó una conmoción local, pero la introducción del evangelio «agitó» el universo. La voz de Dios hizo temblar a Sinaí, pero la introducción y consumación de lo de los versículos 22 al 24 hace que se conmueva todo el universo, pues no puede permanecer nada de lo temporario o de lo falso.
Esto enfatiza el hecho de que es mucho más sublime y admirable la introducción del evangelio que la de la Ley de Moisés, y por eso más peligrosa cosa sería apostatar del evangelio.

Fuente: Notas Reeves-Partain

Hag 2:6.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

ñ 672 Éxo 19:18

o 673 Hag 2:6

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

una vez más haré temblar…tierra…cielo. El contexto de Hag 2:6 describe la venida de Cristo (Ap 19:15; 8:7– 12).

Fuente: La Biblia de las Américas

el cielo…Hag 2:6.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

g Hag 2:6.

Fuente: La Biblia Textual III Edición