Biblia

Comentario de Hebreos 4:16 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Hebreos 4:16 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia para que alcancemos misericordia y hallemos gracia para el oportuno socorro.

4:16 — «Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia». En vista de lo que tenemos (v. 14), nos acerquemos al trono de Dios (8:1), llamado el de la gracia, para hacerle a Dios por Jesucristo nuestras peticiones. (Véase 1Jn 5:14).

— «para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro». Nuestras pruebas de la vida requieren la ayuda constante y apropiada para la ocasión. No hay que pensar en judaizar, volviendo atrás a un sacerdocio inferior para hallar el socorro necesitado. Tenemos un gran sumo sacerdote en los cielos a la diestra de Dios, él mismo Dios, y si oramos en fe, según se nos manda, recibiremos todo lo necesario. (Véanse Efe 6:18; Flp 4:6; 1Ts 5:17).

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

acerquémonos, pues. Heb 10:19-23; Heb 13:6; Rom 8:15-17; Efe 2:18; Efe 3:12.

al trono de la gracia. Heb 9:5; Éxo 25:17-22; Lev 16:2; 1Cr 28:11.

para alcanzar misericordia. Isa 27:11; Isa 55:6, Isa 55:7; Mat 7:7-11; 2Co 12:8-10; Flp 4:6, Flp 4:7; 1Pe 2:10.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Acerquémonos es la misma palabra que se usa en Heb 10:22. ¡Qué contraste con el «aléjate para que no mueras» del AT. con que crecieron estas personas y sus antepasados! ¡Qué hermosa es la diferencia que resume Juan el Bautista al presentar a Jesús! «He aquí, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo». No habrá más sacrificios de animales. Nunca más sólo el sumo sacerdote tendrá acceso al lugar santísimo.

confiadamente es la misma palabra que se traduce como confianza en Heb 3:10 y que significa «osadía al hablar», «intrepidez» o «coraje». Los creyentes deben acercarse a Dios con valentía puesto que Él está en un trono de gracia, y nuestro Sumo Sacerdote se sienta a su derecha para interceder por nosotros.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

ACERQUÉMONOS. PUES. CONFIADAMENTE AL TRONO DE LA GRACIA. Puesto que Cristo se compadece de las debilidades de los creyentes (v. Heb 4:5), ellos pueden acercarse confiadamente al trono celestial, sabiendo que el Padre celestial recibe y anhela las oraciones y peticiones que. eleven (cf. Heb 10:19-20). Se llama el «trono de la gracia» porque de él fluyen, de parte de Dios, el amor, la ayuda, la misericordia, el perdón, el poder espiritual, el derramamiento del Espíritu Santo, los dones espirituales, el fruto del Espíritu, y todo lo que necesitan en cualquier circunstancia. Una de las más grandes bendiciones de la salvación es que ahora Cristo, en calidad de sumo sacerdote, les abre un camino a su presencia mediante el cual siempre podrán buscar la ayuda que necesiten.

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

Acerquémonos … confiadamente al trono de la gracia. La mayoría de los mandatarios antiguos no eran accesibles para alguien que no formara parte de su nómina exclusiva de consejeros (cp. Est 4:11). A diferencia de esto, el Espíritu Santo invita a todos los creyentes para que se acerquen con confianza al trono de Dios a recibir misericordia y gracia por medio de Jesucristo (cp. Heb 7:25; Heb 10:22; Mat 27:51; vea la Introducción: Temas históricos y teológicos). El arca del pacto era vista como el lugar en la tierra donde Dios se sentaba sobre su trono entre los querubines (cp. 2Re 19:15; Jer 3:16-17). Los tronos orientales incluían un estrado para los pies que también era otra metáfora para el arca del pacto (cp. Sal 132:7). Fue en el trono de Dios que Cristo hizo expiación por los pecados, es de allí mismo que la gracia es dispensada a los creyentes para todas las cuestiones de la vida (cp. 2Co 4:15; 2Co 9:8; 2Co 12:9; Efe 1:7; Efe 2:7). «Gracia a vosotros» se convirtió en un saludo acostumbrado entre los creyentes para celebrar esta provisión divina siempre disponible (Rom 1:7; Rom 16:20; Rom 16:24; 1Co 1:3; 1Co 16:23; 2Co 1:2; 2Co 13:14; Gál 1:3; Gál 6:18; Efe 1:2; Efe 6:24; Flp 1:2; Flp 4:18; Col 1:2; Col 4:18; 1Ts 1:1; 1Ts 5:28; 2Ts 1:2; 2Ts 3:18; 1Ti 1:2; 1Ti 6:21; 2Ti 1:2; 2Ti 4:22; Tit 1:4; Tit 3:15; Flm 1:3; Flm 1:25). gracia para el oportuno socorro. Vea las notas sobre Heb 2:16 ; Heb 2:18.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

4:16 — «Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia». En vista de lo que tenemos (v. 14), nos acerquemos al trono de Dios (8:1), llamado el de la gracia, para hacerle a Dios por Jesucristo nuestras peticiones. (Véase 1Jn 5:14).
–«para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro». Nuestras pruebas de la vida requieren la ayuda constante y apropiada para la ocasión. No hay que pensar en judaizar, volviendo atrás a un sacerdocio inferior para hallar el socorro necesitado. Tenemos un gran sumo sacerdote en los cielos a la diestra de Dios, él mismo Dios, y si oramos en fe, según se nos manda, recibiremos todo lo necesario. (Véanse Efe 6:18; Flp 4:6; 1Ts 5:17).

Fuente: Notas Reeves-Partain

REFERENCIAS CRUZADAS

m 163 Efe 2:18; Heb 10:19

n 164 Efe 3:12

ñ 165 Heb 13:6

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

16 (1) Sin lugar a dudas, el tronó mencionado aquí es el trono de Dios, el cual está en el cielo ( Rev_4:2) . El trono de Dios es el trono de autoridad para todo el universo ( Dan_7:9 ; Rev_5:1) . Sin embargo, para nosotros los creyentes llega a ser el trono de gracia, representado por el lugar de la propiciación (el propiciatorio) que estaba en el Lugar Santísimo (Éxo_25:17 , Éxo_25:21). Este trono es el trono de Dios y del Cordero ( Rev_22:1). ¿Cómo podemos nosotros acercarnos al trono de Dios y del Cordero, de Cristo, que está en los cielos, mientras todavía estamos en la tierra? La clave está en nuestro espíritu, al cual se refiere el v.12. El mismo Cristo que está sentado en el trono en los cielos ( Rom_8:34) ahora también está en nosotros ( Rom_8:10), es decir, en nuestro espíritu ( 2Ti_4:22), donde está la habitación de Dios ( Efe_2:22). En Bet-el, la casa de Dios, la habitación de Dios, la cual es la puerta del cielo, Cristo es la escalera que une la tierra con el cielo, y trae el cielo a la tierra ( Gén_28:12-17 ; Jua_1:51).

Puesto que hoy en día nuestro espíritu es el lugar donde Dios habita, ahora este espíritu es la puerta al cielo, donde Cristo es la escalera que nos une a nosotros, los moradores de la tierra, con el cielo, y nos trae el cielo. Por lo tanto, cada vez que nos volvemos a nuestro espíritu, pasamos por la puerta del cielo y tocamos el trono de gracia que está en el cielo, por medio de Cristo como la escalera celestial.

16 (2) La misericordia y la gracia de Dios son la expresión de Su amor. Cuando estamos en una condición miserable, primero la misericordia de Dios llega hasta nosotros y nos lleva a una situación en la cual El puede favorecernos con Su gracia. Luc_15:20-24 nos dice que cuando el padre vio regresar al hijo pródigo, tuvo compasión de él. Eso fue la misericordia, la cual expresó el amor del padre. Luego el padre lo vistió con la mejor túnica y lo alimentó con el becerro engordado. Eso fue la gracia, la cual también manifestó el amor del padre. La misericordia de Dios va más allá y llena el espacio que existe entre nosotros y la gracia de Dios.

La misericordia y la gracia de Dios siempre están disponibles para nosotros. Sin embargo, necesitamos recibirlas y hallarlas ejercitando nuestro espíritu para acercarnos al trono de la gracia y tener contacto con nuestro Sumo Sacerdote, quien es conmovido por el sentir de nuestra debilidad. Con esto el escritor de este libro animó a los agotados creyentes hebreos a recibir misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro, a fin de que pudieran ser levantados (12:12).

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro