Comentario de Hebreos 4:9 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Por tanto, queda todavía un reposo sabático para el pueblo de Dios.
4:9 — ¡La gran conclusión del argumento! Hay un reposo que nos queda. No es el del séptimo día, observado bajo la ley de Moisés. Este lo guardaron quince siglos los judíos. No es la posesión de la tierra de Canaán. Quinientos años después de ese evento histórico, David todavía exhortaba al pueblo de Dios entrar en el reposo de Dios. Es el reposo celestial para el «pueblo de Dios» (los de la fe). El sábado judaico era figura de él (Col 2:17), como también lo era la posesión de Canaán (Sal 95:11, donde dice «reposo», en lugar de «tierra», según Núm 14:30). La palabra reposo en este versículo es distinta, en el texto griego, a la usada en 3:11,18; 4:1,3,5,10,11. Aquí es sabbatismos, y en los demás textos es katapausis. «Katápausis» significa sencillamente cesación de labor, o reposo en el sentido común. «Sabbatismós» es una palabra, con su sufijo griego agregado a una palabra hebrea. Indica literalmente la guarda u observancia de reposo. Se refiere al reposo eterno en Cristo, que el fiel gozará en el cielo, como el «sábado» (día de reposo) judaico de la ley de Moisés significaba un día en siete para descanso, y como Dios reposó en el séptimo día después de la formación del cosmos (versículo 3,4). Hablando el autor de la carta a los hebreos, a gente bien acostumbrado a guardar el «sábado» mosaico, crea una palabra, diciendo que ahora a los cristianos fieles nos queda un «sabbatismós» para nosotros. Dice la versión Hispanoamericana, «un reposo sagrado».Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
queda un reposo. Heb 4:1, Heb 4:3; Heb 3:11; Isa 11:10; Isa 57:2; Isa 60:19, Isa 60:20; Apo 7:14-17; Apo 21:4.
para el pueblo de Dios. Heb 11:25; Sal 47:9; Mat 1:21; Tit 2:14; 1Pe 2:10.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
La palabra griega que se traduce reposo en este versículo es diferente de la que se utilizó en los (vv. Heb 4:1, Heb 4:3, Heb 4:5, Heb 4:10, Heb 4:11; Heb 3:11, Heb 3:18). Esta palabra significa «reposo del sábado» y sólo se encuentra en esta parte del NT. Comúnmente los judíos enseñan que el día de reposo presagia el mundo que va a venir, y ellos hablan de «un día en el cual todo será reposo».
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
QUEDA UN REPOSO PARA EL PUEBLO DE DIOS. El reposo prometido de Dios no sólo es terrenal, sino también celestial (vv. Heb 4:7-8; cf. Heb 13:14). Para los creyentes, permanece un reposo eterno en el cielo (Jua 14:1-3; cf. Heb 11:10; Heb 11:16). La entrada en ese reposo final significa el fin de las dificultades, los sufrimientos y las persecuciones comunes de la vida en esta tierra (cf. Apo 14:13), y la participación en el reposo de Dios, la alegría, el deleite, el amor y la comunión interminables con Dios y con los otros santos redimidos. Será un día de reposo sin fin (Apo 21:1-27 y Apo 22:1-21).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
reposo. Aquí se introduce una palabra griega diferente para «reposo» que significa «descanso del día de reposo» o «reposo sabático», y solo ocurre aquí en el NT. El escritor eligió la palabra para llamar la atención de los lectores al «séptimo día» mencionado en el v. Heb 4:4 y para preparar la explicación en el v. Heb 4:10 («ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas»).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
4:9 — ¡La gran conclusión del argumento! Hay un reposo que nos queda. No es el del séptimo día, observado bajo la ley de Moisés. Este lo guardaron quince siglos los judíos. No es la posesión de la tierra de Canaán. Quinientos años después de ese evento histórico, David todavía exhortaba al pueblo de Dios entrar en el reposo de Dios. Es el reposo celestial para el «pueblo de Dios» (los de la fe). El sábado judaico era figura de él (Col 2:17), como también lo era la posesión de Canaán (Sal 95:11, donde dice «reposo», en lugar de «tierra», según Núm 14:30).
La palabra reposo en este versículo es distinta, en el texto griego, a la usada en 3:11,18; 4:1,3,5,10,11. Aquí es sabbatismos, y en los demás textos es katapausis. «Katápausis» significa sencillamente cesación de labor, o reposo en el sentido común. «Sabbatismós» es una palabra, con su sufijo griego agregado a una palabra hebrea. Indica literalmente la guarda u observancia de reposo. Se refiere al reposo eterno en Cristo, que el fiel gozará en el cielo, como el «sábado» (día de reposo) judaico de la ley de Moisés significaba un día en siete para descanso, y como Dios reposó en el séptimo día después de la formación del cosmos (versículo 3,4). Hablando el autor de la carta a los hebreos, a gente bien acostumbrado a guardar el «sábado» mosaico, crea una palabra, diciendo que ahora a los cristianos fieles nos queda un «sabbatismós» para nosotros. Dice la versión Hispanoamericana, «un reposo sagrado».
Los sabatistas modernos citan este versículo para afirmar que «queda un reposo» en el sentido de que debe el cristiano todavía guardar el séptimo día de la semana. Ignoran por completo la argumentación del autor en esta sección de su epístola y hacen que este versículo diga que todavía tenemos (nos queda) el sábado judaico y que debemos guardarlo. Pero el contexto desmiente tal posición y el versículo 11 la destruye por completo, pues dice que nosotros los cristianos procuremos entrar en aquel reposo. Es algo en qué entrar todavía. ¡Es el cielo! El verbo «queda» (apoleipo) no quiere decir, «está en vigor todavía», sino que «está reservado». No dice el autor que «queda el día de reposo». Para decir esto habría usado la palabra común, sabbaton. Pero dijo sabbatismos (explicada arriba). El cielo será para el redimido como un sábado, o reposo.
Fuente: Notas Reeves-Partain
REFERENCIAS CRUZADAS
u 145 Isa 66:23; Zac 14:16; Mar 2:28
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Queda…un reposo. La entrada de los israelitas a la tierra prometida no cumplió la promesa de reposo; para el que cree hoy, esa promesa está disponible.
Fuente: La Biblia de las Américas
9 (1) Este reposo sabático es Cristo como nuestro reposo, tipificado por la buena tierra de Canaán ( Deu_12:9 ; Heb_4:8). Cristo es el reposo para los santos en tres etapas: (1) en la era de la iglesia, como el Cristo celestial, Aquel que reposa de Su obra y está sentado a la diestra de Dios en los cielos, El es el reposo para nosotros en nuestro espíritu ( Mat_11:28-29); (2) en el reino milenario, después de que Satanás sea quitado de esta tierra ( Rev_20:1-3), Cristo con el reino será el reposo de una manera más plena para los santos vencedores, quienes serán Sus correyes ( Rev_20:4 , Rev_20:6), y quienes participarán de Su reposo y lo disfrutarán; (3) en el cielo nuevo y la tierra nueva, después de que todos los enemigos, incluyendo la muerte, el último enemigo, hayan sido sujetos a El ( 1Co_15:24-27), Cristo, como Aquel que tiene la victoria sobre todas las cosas, será el reposo en plenitud para todos los redimidos de Dios por la eternidad. Sin embargó, el reposo sabático mencionado aquí y tipificado por el reposo de la buena tierra de Canaán abarca sólo las primeras dos etapas de Cristo como nuestro reposo; no incluye la tercera etapa. El reposo en las primeras dos etapas es un premio para los que le buscan diligentemente, quienes no sólo han sido redimidos, sino que también le han disfrutado en una manera plena, llegando a ser así los vencedores; en cambio, el reposo en la tercera etapa no es un premio, sino la porción completa asignada a todos los redimidos.
Por lo tanto, en las primeras dos etapas, y especialmente en la segunda, Cristo como nuestro reposo es el reposo sabático mencionado aquí, el reposo que queda para que nosotros diligentemente lo busquemos y entremos en él. En la segunda etapa Cristo tomará posesión de toda la tierra como Su herencia ( Sal_2:8 ; Heb_2:5-6) , haciéndola Su reino por mil años ( Rev_11:15). Todos los vencedores que le hayan seguido y disfrutado como su reposo en la primera etapa, tendrán parte en Su reino en el milenio ( Rev_20:4 , Rev_20:6 ; 2Ti_2:12). Además, ellos heredarán la tierra ( Mat_5:5 ; Sal_37:11); donde algunos tendrán autoridad sobre diez ciudades y otros sobre cinco ( Luc_19:17 , Luc_19:19), y participarán del gozo de su Señor ( Mat_25:21 , Mat_25:23). Este será el reposo del reino, tipificado por el reposo que consiste en entrar en la buena tierra de Canaán. El reposo de la buena tierra era la meta de todos los hijos de Israel, quienes habían sido redimidos y liberados de Egipto; de igual manera, el reposo del reino venidero es la meta de los creyentes neotestamentarios, quienes han sido redimidos y salvos del mundo. Ahora todos vamos en camino a esa meta.
La plena salvación de Dios, la cual El quería que los hijos de Israel recibieran, incluía la redención mediante el cordero de la Pascua, el éxodo de Egipto, el alimentarse del maná celestial, el saciar la sed con el agua viva que salió de la roca herida, y la participación de la buena tierra de Canaán. Todos los hijos de Israel participaron del cordero de la Pascua, del maná celestial y del agua viva, pero de todos los que fueron parte del éxodo de Egipto, sólo Josué y Caleb entraron en la buena tierra y participaron de ella; todos los demás cayeron en el desierto ( Núm_14:30 ; 1Co_10:1-11). Aunque todos fueron redimidos, sólo los dos vencedores, Josué y Caleb, recibieron el premio de la buena tierra.
El cordero de la Pascua, el maná celestial, el agua viva y la buena tierra de Canaán tipifican diferentes aspectos de Cristo. Según lo que se describe con las experiencias de los hijos de Israel, no todos los creyentes que hayan sido redimidos por medio de Cristo participarán de Cristo como premio, como su reposo y satisfacción, en la era de la iglesia y en el reino venidero; sólo aquellos que, después de ser redimidos, busquen a Cristo diligentemente, participarán de El en tal manera. Esta es la razón por la cual el apóstol Pablo, aunque había sido completamente redimido, proseguía a la meta para poder ganar a Cristo como premio ( Flp_3:10-14). En Fil 3 Pablo nos dijo que él había estado en el judaísmo, pero que lo había dejado por causa de Cristo ( Flp_3:4-9). En este libro el escritor mantuvo el mismo concepto, animando a los creyentes hebreos a abandonar el judaísmo ya extenderse hacia Cristo, de tal manera que no perdieran el premio.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
R541 Τῷ λαῷ tal vez es un dativo de ventaja: para el pueblo.