Biblia

Comentario de Hebreos 6:18 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Hebreos 6:18 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

para que, por dos cosas inmutables en las cuales es imposible que Dios mienta, tengamos un fortísimo consuelo los que hemos acudido para asirnos de la esperanza puesta por delante.

6:18

— «dos cosas» = la promesa y el juramento.

— «es imposible que Dios mienta». Véanse Tit 1:2; 2Ti 2:13).

— «tengamos un fortísimo consuelo». La promesa y el juramento de Dios proporcionan este consuelo tan fuerte para combatir la duda y el desánimo. Este consuelo no se basa en la fuerza o justicia del hombre mismo, sino en la palabra verdadera e inmutable de Dios. ¡Dios ha prometido la vida eterna y no puede mentir!

— «los que hemos acudido para asirnos de la esperanza puesta delante de nosotros». El verbo aquí empleado (hemos acudido para asirnos) alude a la práctica bajo la ley de Moisés de huir a las ciudades de refugio para escapar de la venganza. Véanse Núm 35:1-34; Deu 4:41-43; capítulo 19; Jos 20:1-9. La aplicación espiritual es del pecador que huye de la condenación de la muerte para alcanzar la salvación en Cristo Jesús. Nos asimos, pues, de la esperanza de la vida eterna por medio del sacrificio de Cristo. El evangelio revela la ira de Dios contra el pecador y el rescate en Cristo Jesús. Huimos para asirnos de la esperanza (de perdón y vida eterna en Cristo) que el evangelio nos ofrece.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

por dos cosas inmutables. Heb 3:11; Heb 7:21; Sal 110:4; Mat 24:35.

es imposible que Dios. Núm 23:19; 1Sa 15:29; Rom 3:4; 2Ti 2:13; Tit 1:2; 1Jn 1:10; 1Jn 5:10.

tengamos un fortísimo consuelo. Isa 51:12; Isa 66:10-13; Luc 2:25; Rom 15:5; 2Co 1:5-7; Flp 2:1; 2Ts 2:16, 2Ts 2:17.

los que hemos acudido, o los que hemos huido. Heb 11:7; Gén 19:22; Núm 35:11-15; Jos 20:3; Sal 46:1; Sal 62:8; Isa 32:1, Isa 32:2; Zac 9:12; Mat 3:7; 2Co 5:18-21; 1Ts 1:10.

para asirnos, o hechando mano. 1Re 2:28; Pro 3:18; Pro 4:13; Isa 27:5; Isa 56:4; Isa 64:7; 1Ti 6:12.

de la esperanza. Col 1:5, Col 1:23, Col 1:27; 1Ti 1:1.

propuesta, o puesta delante de nosotros. Heb 12:1, Heb 12:2; Rom 3:25.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Jehová confirmó su juramento con Abraham al jurar por sí mismo (v. Heb 6:13) porque sólo Él es sin engaño.

dos cosas inmutables son la Palabra y el juramento de Dios. Puesto que Dios no miente y es todopoderoso, cumple todas sus promesas. Esta naturaleza inmutable de Dios es el consuelo y el aliento del creyente.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

ES IMPOSIBLE QUE DIOS MIENTA. Como Dios no puede mentir, sus promesas a Abraham son verdaderas (v. Heb 6:14). La veracidad de Dios no sólo se aplica a su palabra que le dio a Abraham, sino también a su Palabra en todas las Escrituras. Es decir, debido a que la Biblia es la Palabra inspirada de Dios, es absolutamente veraz y digna de confianza. La verdad de la Palabra de Dios es inherente a las mismísimas palabras y frases de las Escrituras. A sus autores los dirigió el Espíritu Santo para escribir los manuscritos originales de manera que la trasmisión del mensaje de Dios a la humanidad se hiciera sin error alguno (véanse los ARTÍCULOs LA PALABRA DE DIOS, P. 970. [Isa 55:10-11], y LA INSPIRACIÓN Y LA AUTORIDAD DE LA BIBLIA, P. 1756. [2Ti 3:16-17]).

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

dos cosas inmutables. Se trata de la promesa de Dios y su juramento. El término griego que se traduce «inmutables» se aplicaba a la última voluntad de una persona que era un documento legal inalterable el cual nadie fuera de su autor podía modificar. acudido para asirnos. En la Septuaginta se usa esta palabra griega para aludir a las ciudades de refugio que Dios proveyó para los que buscaran protección de los vengadores de una homicidio accidental (Núm 35:9-34; Deu 19:1-13; Jos 20:1-9; cp. Hch 14:5-6). esperanza. Vea la nota sobre Heb 3:6. La esperanza es uno de los temas de Hebreos. También es el producto de estudiar el AT (Rom 15:4). La esperanza en el cumplimiento de las promesas de salvación de Dios es el «ancla del alma» (v. Heb 6:19) que mantiene firme y seguro al creyente durante tiempos de tribulación y angustia.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

6:18 — «dos cosas» = la promesa y el juramento.
–«es imposible que Dios mienta». Véanse Tit 1:2; 2Ti 2:13).
–«tengamos un fortísimo consuelo». La promesa y el juramento de Dios proporcionan este consuelo tan fuerte para combatir la duda y el desánimo. Este consuelo no se basa en la fuerza o justicia del hombre mismo, sino en la palabra verdadera e inmutable de Dios. ¡Dios ha prometido la vida eterna y no puede mentir!
–«los que hemos acudido para asirnos de la esperanza puesta delante de nosotros». El verbo aquí empleado (hemos acudido para asirnos) alude a la práctica bajo la ley de Moisés de huir a las ciudades de refugio para escapar de la venganza. Véanse Núm 35:1-34; Deu 4:41-43; capítulo 19; Jos 20:1-9. La aplicación espiritual es del pecador que huye de la condenación de la muerte para alcanzar la salvación en Cristo Jesús. Nos asimos, pues, de la esperanza de la vida eterna por medio del sacrificio de Cristo. El evangelio revela la ira de Dios contra el pecador y el rescate en Cristo Jesús. Huimos para asirnos de la esperanza (de perdón y vida eterna en Cristo) que el evangelio nos ofrece.

Fuente: Notas Reeves-Partain

— dos garantías: A saber: la promesa y el juramento.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Núm 23:19; 1Sa 15:29.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

l 232 Núm 23:19; 1Sa 15:29; Tit 1:2

m 233 Rom 5:4; Col 1:5

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

dos cosas inmutables en las cuales es imposible que Dios mienta. Las dos cosas inmutables son: 1) La promesa (« la inmutabilidad de su propósito» , vers. 17; Gn 12:1– 3; 15:5; 17:4– 8), y 2) el « juramento» (vers. 17; Gn 22:17), estableciendo la seguridad de su Palabra.

Fuente: La Biblia de las Américas

18 (1) Estas dos cosas son la promesa y el juramento de Dios (v.17).

18 (2) Lit., huido intensamente; denota huir a un lugar seguro. Cfr. Hch_14:6 .

18 (3) El Señor Jesús entró en los cielos, en el Lugar Santísimo detrás del velo, como lo menciona el v.20, y por medio de El tenemos el albergue celestial donde nos podemos refugiar, adonde podemos entrar ahora en nuestro espíritu (10:19).

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

dos cosas inmutables. i.e., la promesa hecha a Abraham, y el juramento que descansa en el ser mismo de Dios.

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie

R827 En οἱ καταφυγόντες, el sentido perfectivo de κατά coincide con el aoristo de efecto: que hemos acudido en busca de refugio.

T72 Κρατῆσαι se usa como un aoristo de ingreso: comenzar a asirnos (comp. aferrarse a -T232).

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego

Lit., podamos tener un fortísimo consuelo

Fuente: La Biblia de las Américas

* Es decir, la promesa y el juramento.

Fuente: Versión Biblia Libre del NuevoTestamento