Biblia

Comentario de Hechos 10:25 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Hechos 10:25 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Cuando Pedro iba a entrar, Cornelio salió para recibirle, se postró a sus pies y le adoró.

10:25 — Cuando Pedro entró, salió Cornelio a recibirle, y postrándose a sus pies, adoró. — Esto nos extraña porque Cornelio era hombre «temeroso de Dios», pero aunque era un hombre ejemplar, todavía le faltaba entendimiento. Sin embargo, aun el apóstol Juan se postró a los pies de un ángel para adorarle (Apo 19:10); a él también le faltó entendimiento, porque el ángel le dijo, «Mira, no lo hagas; yo soy consiervo tuyo, y de tus hermanos… Adora a Dios». Seguramente en la mente de Cornelio Pedro tenía que ser un hombre muy importante porque un ángel de Dios le dijo que lo trajera. Este militar romano mostró mucha humildad al postrarse a los pies de un judío pescador .

Este texto demuestra claramente que el adorar es un acto. No es un sentimiento o emoción, sino algo que se hace. La palabra adorar traduce proskuneo, un verbo transitivo que significa hincarse hacia y se usa de adorar a Dios (Mat 4:10; Jua 4:21-24; 1Co 14:25; Apo 4:10); de adorar a Cristo (Mat 2:2; Mat 2:8; Mat 2:11; Mat 8:2; Mat 9:18; Mat 28:8; Mat 28:17; Jua 9:38; Heb 1:6); de adorar al dragón (Apo 13:4); de adorar demonios (Apo 9:20); y de adorar ídolos (Hch 7:43). Así, pues, este verbo siempre se asocia con el hacer y no con el sentir. El culto prescrito por el Nuevo Testamento son actos: cantar, orar, predicar, participar de la cena del Señor y ofrendar. (Coffman).

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

y postrándose a sus pies. Hch 14:11-13; Dan 2:30, Dan 2:46; Mat 8:2; Mat 14:33; Apo 19:10; Apo 22:8, Apo 22:9.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

10:25 — Cuando Pedro entró, salió Cornelio a recibirle, y postrándose a sus pies, adoró. — Esto nos extraña porque Cornelio era hombre «temeroso de Dios», pero aunque era un hombre ejemplar, todavía le faltaba entendimiento. Sin embargo, aun el apóstol Juan se postró a los pies de un ángel para adorarle (Apo 19:10); a él también le faltó entendimiento, porque el ángel le dijo, «Mira, no lo hagas; yo soy consiervo tuyo, y de tus hermanos… Adora a Dios». Seguramente en la mente de Cornelio Pedro tenía que ser un hombre muy importante porque un ángel de Dios le dijo que lo trajera. Este militar romano mostró mucha humildad al postrarse a los pies de un judío pescador .
Este texto demuestra claramente que el adorar es un acto. No es un sentimiento o emoción, sino algo que se hace. La palabra adorar traduce proskuneo, un verbo transitivo que significa hincarse hacia y se usa de adorar a Dios (Mat 4:10; Jua 4:21-24; 1Co 14:25; Apo 4:10); de adorar a Cristo (Mat 2:2; Mat 2:8; Mat 2:11; Mat 8:2; Mat 9:18; Mat 28:8; Mat 28:17; Jua 9:38; Heb 1:6); de adorar al dragón (Apo 13:4); de adorar demonios (Apo 9:20); y de adorar ídolos (Hch 7:43). Así, pues, este verbo siempre se asocia con el hacer y no con el sentir. El culto prescrito por el Nuevo Testamento son actos: cantar, orar, predicar, participar de la cena del Señor y ofrendar. (Coffman).

Fuente: Notas Reeves-Partain

Hch 14:13-15; Apo 19:10; (ver Sab 7:1).

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

postrándose… Lit. habiendo caído.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

R98 Τοῦ εἰσελθεῖν con ἐγένετο es una torpe imitación de la construcción infinitiva hebrea (el infinitivo se usa como el sujeto de ἐγένετο: cuando ocurrió la entrada de Pedro -B404).

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego

Lit. habiendo caído.

Fuente: La Biblia Textual III Edición