Comentario de Hechos 22:12 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Entonces un tal Ananías, hombre piadoso conforme a la ley, que tenía buen testimonio de todos los judíos que moraban allí,

22:12

— Entonces uno llamado Ananías — Lucas le llama «un discípulo» (9:10) que no quería tener nada que ver con Saulo porque «he oído de muchos acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén» (9:13). Es posible que Saulo de Tarso hubiera llegado a esta misma casa para prender a Ananías.

Según Pablo, Ananías era varón piadoso según la ley, que tenía buen testimonio de todos los judíos que allí moraban — es decir, él es uno de ustedes («varón piadoso según la ley») y él es testigo de lo que digo. Por eso, el primero que me habló acerca de El Camino no era un oponente del judaísmo, sino un «varón piadoso según la ley».

Jesús dijo a Ananías, «Vé, porque instrumento (vaso) escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel» (Hch 9:15). Saulo iba a llevar un tesoro precioso («mi nombre», el evangelio). Después Pablo usó esta misma figura para indicar que él se sentía como un «vaso de barro» (2Co 4:7) porque no se sentía digno de llevar un mensaje tan importante al mundo. «A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me fue dada esta gracia de anunciar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo» (Efe 3:8). «¡O profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables su caminos!» (Rom 11:33).

También le dijo que «le mostraré cuanto le es necesario padecer por mi nombre» (9:16). ¿Por qué Pablo tuvo que sufrir tanto? Porque solamente como prisionero podía él llevar el nombre de Jesús delante de tantos hombres y mujeres eminentes (los gobernadores Festo y Félix y sus mujeres, el Rey Agripa y Berenice, y aun a los de la casa de César, 27:24; Flp 4:22; 2Ti 4:16). Como hombre libre hubiera sido imposible que Pablo les predicara.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

uno llamado Ananías. Hch 9:10-18.

varón piadoso según la ley. Hch 8:2; Hch 17:4; Luc 2:25.

tenía buen testimonio. Hch 6:3; Hch 10:22; 2Co 6:8; 1Ti 3:7; Heb 11:2; 3Jn 1:12.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Invocando su nombre seremos salvos. El bautismo es la declaración de ese llamado (Rom 10:9-13).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Ananías. Vea la nota sobre Hch 9:10. Su testimonio como un miembro respetado de la comunidad judía de Damasco tendría validez para la audiencia hostil de Pablo.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

22:12 — Entonces uno llamado Ananías — Lucas le llama «un discípulo» (9:10) que no quería tener nada que ver con Saulo porque «he oído de muchos acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén» (9:13). Es posible que Saulo de Tarso hubiera llegado a esta misma casa para prender a Ananías.
Según Pablo, Ananías era varón piadoso según la ley, que tenía buen testimonio de todos los judíos que allí moraban — es decir, él es uno de ustedes («varón piadoso según la ley») y él es testigo de lo que digo. Por eso, el primero que me habló acerca de El Camino no era un oponente del judaísmo, sino un «varón piadoso según la ley».
Jesús dijo a Ananías, «Vé, porque instrumento (vaso) escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel» (Hch 9:15). Saulo iba a llevar un tesoro precioso («mi nombre», el evangelio). Después Pablo usó esta misma figura para indicar que él se sentía como un «vaso de barro» (2Co 4:7) porque no se sentía digno de llevar un mensaje tan importante al mundo. «A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me fue dada esta gracia de anunciar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo» (Efe 3:8). «¡O profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables su caminos!» (Rom 11:33).
También le dijo que «le mostraré cuanto le es necesario padecer por mi nombre» (9:16). ¿Por qué Pablo tuvo que sufrir tanto? Porque solamente como prisionero podía él llevar el nombre de Jesús delante de tantos hombres y mujeres eminentes (los gobernadores Festo y Félix y sus mujeres, el Rey Agripa y Berenice, y aun a los de la casa de César, 27:24; Flp 4:22; 2Ti 4:16). Como hombre libre hubiera sido imposible que Pablo les predicara.

Fuente: Notas Reeves-Partain

REFERENCIAS CRUZADAS

t 1175 Hch 10:22; 1Ti 3:7

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

hombre piadoso según…la ley. Descripción importante para los oyentes de Pablo.

Fuente: La Biblia de las Américas

12 super (1) Véase la nota 11 super (1) del cap.9.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

recibía… vivían… Lit. recibe… viven.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

Lit. recibe.

Fuente: La Biblia Textual III Edición