Biblia

Comentario de Hechos 2:4 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Hechos 2:4 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en distintas lenguas, como el Espíritu les daba que hablasen.

2:4

— Y fueron todos llenos del Espíritu Santo — esto fue el cumplimiento de 1:4, 8.

— comenzaron a hablar en otras lenguas, — Mar 16:17, Jesús dijo, «hablarán nuevas lenguas», es decir, serían nuevas para ellos, idiomas que nunca habían hablado antes de ese día. Estas lenguas no eran «sonidos extáticos» (según algunas versiones modernas de las Escrituras), porque los judíos de varias naciones (ver. 5) les oían hablar «en nuestra lengua en la que hemos nacido» (vers. 6, 8, 11). La palabra «lengua» significa «idioma». Los judíos no «estaban confusos» por no poder entender lo que decían los apóstoles, sino porque les extrañó que aquellos galileos pudieran hablar idiomas que no habían aprendido, es decir, no entendían el significado de tal fenómeno. (Compárense Hch 4:13; Jua 1:46; Mat 26:73). Algunos dicen que hay una diferencia entre las lenguas (glossais) de este versículo y las lenguas (dialekto) de los vers. 6 y 8, pero el uso de la palabra glossais en el del ver. 11 refuta esa idea e indica que los dos términos se usan indistintamente.

El propósito de las lenguas se explica en 1Co 14:22, «las lenguas son por señal, no a los creyentes, sino a los incrédulos». Así fue su propósito en el día de Pentecostés; muchos judíos incrédulos se convencieron. No hay texto que diga o implique que las lenguas fueron usadas por los apóstoles y otros para predicar el evangelio a las varias naciones. En primer lugar, eso no fue el propósito de ellas (como hemos visto en 1Co 14:22), y en segundo lugar, tal cosa no fue necesaria porque el griego era el idioma universal de aquel tiempo.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

llenos del Espíritu Santo. Hch 1:5; Hch 4:8, Hch 4:31; Hch 6:3, Hch 6:5, Hch 6:8; Hch 7:55; Hch 9:17; Hch 11:24; Hch 13:9, Hch 13:52; Luc 1:15, Luc 1:41, Luc 1:67; Luc 4:1; Jua 14:26; Jua 20:22; Rom 15:13; Efe 3:19; Efe 5:18.

comenzaron a hablar. Hch 2:11; Hch 10:46; Hch 19:6; Isa 28:11; Mar 16:17; 1Co 12:10, 1Co 12:28-30; 1Co 13:1, 1Co 13:8; 1Co 14:5; 1Co 14:18, 1Co 14:21-23, 1Co 14:29.

según el Espíritu. Éxo 4:11, Éxo 4:12; Núm 11:25-29; 1Sa 10:10; 2Sa 23:2; Isa 59:21; Jer 1:7-9; Jer 6:11; Eze 3:11; Miq 3:8; Mat 10:19; Luc 12:12; Luc 21:15; 1Co 14:26-32; Efe 6:18; 1Pe 1:12; 2Pe 1:21.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

La palabra que se traduce lenguas, corresponde a la palabra normal griega para idiomas. El hablar en «lenguas» destaca el alcance universal de la Iglesia. Estos testigos hablaban en idiomas extranjeros a las personas que se reunieron en Pentecostés y que provenían de otras regiones. El día de Pentecostés provocaba gran peregrinación por ser una de las tres principales celebraciones judías. Personas que vivían fuera de Israel viajaban hasta Jerusalén para celebrar esta festividad. Ellos provenían de Arabia, Creta, Asia, e incluso, de la lejana Roma. Muchas de estas personas permanecían en Jerusalén durante los cincuenta días.

según el Espíritu les daba que hablasen: Fíjese que el texto no señala que el Espíritu hablaba por medio de ellos, sino les daba la facultad para hablar en idiomas que no conocían con anterioridad.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

LLENOS DEL ESPÍRITU SANTO… Cual es la importancia de que «fueron todos llenos del Espíritu Santo» el día de Pentecostés

(1) Significo el principio del cumplimiento de la promesa de Dios en Joe 2:28-29 de derramar su Espíritu sobre todo su pueblo al final de esta época (cf. Hch 1:4-5; Mat 3:11; Luc 24:49; Jua 1:33; véanse Joe 2:28-29, notas).

(2) Como los últimos días de esta época ya habían comenzado (v. Hch 2:17; cf. Heb 1:2; 1Pe 1:20), ahora a todos se les confrontaba con la decisión de arrepentirse y creer en Cristo (Hch 3:19; Mat 3:2; Luc 13:3; véase Hch 2:17, nota),

(3) Los discípulos fueron «revestidos de poder de lo alto» (Luc 24:49; cf. Hch 1:8), capacitándolos para testificar acerca de Cristo, para producir en los perdidos gran convencimiento de pecado con relación al pecado, a la justicia y al juicio de Dios, y para volverlos de su pecado a la salvación en Cristo (cf. Hch 1:8, nota; Hch 4:13; Hch 4:33; Hch 6:8; Rom 15:19; véase Jua 16:8, nota).

(4) El Espíritu Santo reveló que por naturaleza anhela y se esfuerza por la salvación de las personas de cada nación. Los que recibieron el bautismo en el Espíritu Santo estaban llenos del mismo anhelo por la salvación de la raza humana (vv. Hch 2:38-40; Hch 40:12,33 *; Rom 9:1-3; Rom 10:1). Así que el día de Pentecostés señala el inicio de las misiones a nivel mundial (vv. Hch 2:6-11; Hch 2:39; Hch 1:8).

(5) Los discípulos se convirtieron en ministros del Espíritu. No sólo predicaron a Cristo crucificado y resucitado, llevando a otros al arrepentimiento y a la fe en El, sino que también influyeron en los convertidos para que recibieran «el don del Espíritu Santo» (vv. Hch 2:38-39), lo que ellos mismos habían recibido el día de Pentecostés. Ese conducir a otros al bautismo en el Espíritu Santo es la clave de la obra apostólica en el NT (véanse Hch 8:17; Hch 9:17-18; Hch 10:44-46; Hch 19:6).

(6) Mediante ese bautismo en el Espíritu, los seguidores de Cristo llegaron a ser sucesores de su ministerio terrenal. Ellos continuaron haciendo y ensenando, en el poder del Espíritu Santo, las mismas cosas «que Jesús comenzó a hacer y a enseñar» (Hch 1:1; véanse Jua 14:12, nota, y el ARTÍCULO SEÑALES DE LOS CREYENTES, P. 1380. [Mar 16:17-18]).

COMENZARON A HABLAR EN OTRAS LENGUAS. Véase el ARTÍCULO EL HABLAR EN LENGUAS, P. 1511. [Hch 2:4], para un comentario sobre el significado del hablar en lenguas del día de Pentecostés y en otras partes en la iglesia del NT, y sobre la posibilidad de falsas lenguas.

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

ARTÍCULO

El hablar en lenguas

Hch 2:4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.

Los creyentes de la época del NT consideraban el hablar en lenguas, o glosolalia (gr. Glossaislalo), una señal que da Dios con la cual acompaña el bautismo en el Espíritu Santo (véanse Hch 2:4; Hch 10:45-47; Hch 19:6). Ese patrón bíblico para la vida llena del Espíritu todavía tiene vigencia para los creyentes de la actualidad.

EL GENUINO HABLAR EN LENGUAS.

(1) Las lenguas como señal inicial visible del bautismo en el Espíritu Santo. Hablar en lenguas es una manifestación sobrenatural del Espíritu Santo, es decir, el habla inspirada por el Espíritu en una lengua (gr. glossa) que nunca se ha aprendido (Hch 2:4; 1Co 14:14-15). Puede ser en lenguas humanas habladas y vivas (Hch 2:6) o en lenguas desconocidas en la tierra (cf. 1Co 13:1).

(2) Las lenguas como señal. El hablar en lenguas es una manifestación inspirada mediante la cual el espíritu del creyente y el Espíritu Santo se unen en alabanza y profecía verbal. Dios relaciono el hablar en lenguas con el bautismo en el Espíritu desde el principio (Hch 2:4), de modo que los ciento veinte creyentes el día de Pentecostés, y los creyentes después, tuvieran una confirmación por experiencia de que habían recibido, en efecto, el bautismo en el Espíritu Santo (cf. Hch 10:45-46). Así la experiencia se podría confirmar en cuanto al lugar y momento de recepción. En el transcurso de la historia de la iglesia, siempre que se han rechazado o perdido de vista las lenguas como señal de confirmación, la verdad y la experiencia del día de Pentecostés se han tergiversado o pasado por alto del todo.

(3) Las lenguas como don. También se describe el hablar en lenguas como un don del Espíritu Santo para el creyente (1Co 12:4-10). Ese don tiene dos propósitos principales:

(a) El hablar en lenguas acompañado de interpretación se emplea en los cultos de adoración para trasmitir el contenido del mensaje a la congregación, de modo que todos puedan participar en la adoración, la alabanza o la profecía dirigida por el Espíritu (1Co 14:5-6; 1Co 14:13-17).

(b) El creyente usa las lenguas para dirigirse a Dios en su tiempo devocional personal y edifica así su vida espiritual (1Co 14:4). Significa hablar en el espíritu (Hch 4:2; Hch 4:14) con el fin de orar (Hch 14:2; Hch 14:14-15; Hch 14:18), dar gracias (Hch 14:16-17) o cantar (Hch 14:15; véanse 1Co 14:1-40, notas, y el ARTÍCULO DONES ESPIRITUALES PARA LOS CREYENTES, P. 1632. [1Co 12:7]).

EL FALSO HABLAR EN LENGUAS. El simple hecho de hablar en «otras lenguas», o cualquier otra manifestación sobrenatural, no es prueba indiscutible de la obra y presencia del Espíritu. El hablar en lenguas puede ser falsificado por la iniciativa humana o la actividad demoniaca. La Biblia advierte que no se crea a todo espíritu, sino que se examinen las experiencias espirituales para ver si de veras vienen de Dios (véase 1Jn 4:1, nota).

(1) Para tener validez, el hablar en lenguas debía ser «según el Espíritu les daba que hablasen» (Hch 2:4). Para seguir la norma del libro de Hechos, el hablar en lenguas tiene que ser el resultado espontaneo del ser lleno del Espíritu Santo por primera vez. No es un fenómeno aprendido, ni puede enseñarse diciendo a los creyentes que hablen o repitan ciertas silabas incoherentes.

(2) El Espíritu Santo advierte que en los últimos días dentro de la iglesia habrá hipocresía (1Ti 4:1-2), señales y prodigios de parte de los poderes satánicos (Mat 7:22-23; cf. 2Ts 2:9), y obreros engañadores que se disfrazan de siervos de Dios (2Co 11:13-15). Se debe prestar atención a esas advertencias sobre las manifestaciones y señales espirituales falsificadas (Mat 7:22-23; 2Ts 2:8-10).

(3) Para discernir si el hablar en lenguas es genuino, es decir, verdaderamente del Espíritu Santo, se buscan los resultados, según definición bíblica, del bautismo en el Espíritu (véase el ARTÍCULO PRUEBA DEL GENUINO BAUTISMO EN EL ESPIRITU, P. 1534. [Hch 10:44-45]). Si alguien que dice hablar en lenguas no está consagrado a Jesucristo y a la autoridad de las Escrituras, y no procura obedecer la Palabra de Dios, cualesquiera manifestaciones que tenga no son del Espíritu (1Jn 3:6-10; 1Jn 4:1-3; cf. Mat 24:11; Mat 24:24; Jua 8:31; Gál 1:9, nota).

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

todos. Los apóstoles y los ciento veinte. Cp. Joe 2:28-32. llenos del Espíritu Santo. A diferencia del bautismo del Espíritu que es una experiencia única mediante la cual Dios añade al creyente a su Cuerpo (vea las notas sobre 1Co 12:13), la llenura es la experiencia continua de una vida controlada por el Espíritu, que cada creyente está llamado a guardar (vea las notas sobre Efe 5:18). Pedro, y muchos otros en Hch 2:1-47, fueron llenos del Espíritu Santo otra vez (p. ej. Hch 4:8; Hch 4:31; Hch 6:5; Hch 7:55) para hablar con denuedo la Palabra de Dios. La llenura del Espíritu Santo se refleja en todas las áreas de la vida, no solo en el denuedo para hablar (cp. Efe 5:19-33). en otras lenguas. Lenguas conocidas (vea las notas sobre el v.Hch 2:6; 1Co 14:1-25), no expresiones extáticas. Estas lenguas que dio el Espíritu fueron una señal de juicio para Israel en su incredulidad (vea las notas sobre 1Co 14:21-22). También demuestra que a partir de ese momento, el pueblo de Dios sería conformado por personas de todas las naciones, y marcó el paso de Israel a la iglesia. La experiencia de hablar en lenguas solo aparece en otras dos ocasiones en Hechos (Hch 10:46; Hch 19:6).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

2:4 — Y fueron todos llenos del Espíritu Santo — esto fue el cumplimiento de 1:4, 8.
— comenzaron a hablar en otras lenguas, — Mar 16:17, Jesús dijo, «hablarán nuevas lenguas», es decir, serían nuevas para ellos, idiomas que nunca habían hablado antes de ese día. Estas lenguas no eran «sonidos extáticos» (según algunas versiones modernas de las Escrituras), porque los judíos de varias naciones (ver. 5) les oían hablar «en nuestra lengua en la que hemos nacido» (vers. 6, 8, 11). La palabra «lengua» significa «idioma». Los judíos no «estaban confusos» por no poder entender lo que decían los apóstoles, sino porque les extrañó que aquellos galileos pudieran hablar idiomas que no habían aprendido, es decir, no entendían el significado de tal fenómeno. (Compárense Hch 4:13; Jua 1:46; Mat 26:73). Algunos dicen que hay una diferencia entre las lenguas (glossais) de este versículo y las lenguas (dialekto) de los vers. 6 y 8, pero el uso de la palabra glossais en el del ver. 11 refuta esa idea e indica que los dos términos se usan indistintamente.
El propósito de las lenguas se explica en 1Co 14:22, «las lenguas son por señal, no a los creyentes, sino a los incrédulos». Así fue su propósito en el día de Pentecostés; muchos judíos incrédulos se convencieron. No hay texto que diga o implique que las lenguas fueron usadas por los apóstoles y otros para predicar el evangelio a las varias naciones. En primer lugar, eso no fue el propósito de ellas (como hemos visto en 1Co 14:22), y en segundo lugar, tal cosa no fue necesaria porque el griego era el idioma universal de aquel tiempo.

Fuente: Notas Reeves-Partain

Hch 4:31; Hch 10:44-46; Hch 19:6; (ver Gén 11:1-9; Mar 16:17; 1Co 12:10; 1Co 12:28; 1Co 14:2; 1Co 4:1-21; 1Co 5:1-13; 1Co 6:1-20; 1Co 9:1-27; 1Co 10:1-33; 1Co 11:1-34; 1Co 12:1-31; 1Co 13:1-13; 1Co 14:1-40; 1Co 15:1-58).

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

d 51 Jua 14:26; Hch 6:3; 1Pe 1:12

e 52 Hch 10:46; 1Co 12:10

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

llenos del Espíritu Santo. Este evento marcó el comienzo de la iglesia. (cp. 1 Co 12:13). En el A.T. hay muchas referencias a la presencia del Espíritu (Is 61:1; Ez 11:5). Lo que es nuevo aquí es el cumplimiento de la profecía de Joel: el Espíritu desciende sobre todo creyente (vers. 17), y no solamente sobre líderes, profetas o reyes.

comenzaron a hablar en otras lenguas. Este milagro capacitó a los presentes a hablar en idiomas que no conocían y fue una manifestación de la presencia y del poder de Dios por medio del Espíritu Santo.

Fuente: La Biblia de las Américas

4 (1) Todos modifica solamente a llenos en la primera cláusula, no a comenzaron a hablar en la segunda cláusula. No puede usarse como evidencia de que todos los discípulos que fueron llenos del Espíritu Santo empezaron a hablar en lenguas.

4 (2) Gr. plétho (también usado en 4:8,31; 9:17; 13:9; Luc_1:15 , Luc_1:41 , Luc_1:67); significa llenar exteriormente. Según se usa en este libro, pleróo denota llenar un vaso por dentro, tal como el viento llenó la casa interiormente en el v.2, y plétho denota llenar a las personas exteriormente, tal como el Espíritu llenó a los discípulos exteriormente en este versículo. Los discípulos fueron llenos pleróo) del Espíritu interior y esencialmente (13:52) para su vida cristiana, y fueron llenos plétho) del Espíritu exterior y económicamente para su ministerio cristiano. El Espíritu que llena interiormente, el Espíritu esencial, está en los discípulos ( Jua_14:17 Rom_8:11), mientras que el Espíritu que llena exteriormente, el Espíritu económico, está sobre ellos (1:8; 2:17). Todo aquel que cree en Cristo debe experimentar ambos aspectos del Espíritu Santo. Aun Cristo como hombre experimentó lo mismo: El nació del Espíritu Santo esencialmente ( Luc_1:35 Mat_1:18 , Mat_1:20) para existir y vivir, y fue ungido con el Espíritu Santo económicamente ( Mat_3:16 Luc_4:18) para Su ministerio y Su mover. El Espíritu esencial estaba dentro de El, y el Espíritu económico estaba sobre El. El llenar exterior del Espíritu derramado representa el bautismo del Cuerpo en el Espíritu, llevado a cabo por la Cabeza en ascensión. El día de Pentecostés fueron bautizados los creyentes judíos, la primera parte del Cuerpo; y en la misma forma fueron bautizados los creyentes gentiles, la segunda parte del Cuerpo, en la casa de Cornelio (10:44-47). Con estos dos pasos la Cabeza bautizó a Su Cuerpo completo una vez y para siempre en el Espíritu ( 1Co_12:13), quien es la aplicación y realidad de Sí mismo. El hecho de que El bautizara Su Cuerpo en el Espíritu equivale a que lo bautizara en Sí mismo. Este fue el cumplimiento del bautismo en el Espíritu Santo que Cristo, la Cabeza del Cuerpo, había prometido en 1:5.

4 (3) Dialectos (vs.6,8). Los discípulos eran galileos (v.7), pero hablaron los diferentes dialectos extranjeros de los que habían venido de varias partes del mundo. Esto es una prueba contundente de que hablar en lenguas debe hacerse en un idioma comprensible, y no simplemente como una voz o un sonido emitido con la boca.

4 (4) «Una palabra especial, escogida deliberadamente para denotar una expresión clara y audible» (Vincent).

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

en otras lenguas. Lenguajes reales desconocidos de los que hablaban, pero entendidos por los que escuchaban (v. Hch 2:8).

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie

R748 En este contexto, ἑτέραις tiene el sentido de diferente. [Editor. Parece que esto está implícito en la descripción de las lenguas que se halla en los versículos siguientes.]

TGr18 Πνεύματος ἁγίου se considera un nombre propio. La primera vez que se menciona no tiene artículo, pero lo tiene cada vez que aparece posteriormente en este capítulo (vv. 4b, 33, 38 y otros).

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego