Biblia

Comentario de Hechos 26:15 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Hechos 26:15 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Entonces yo dije: “¿Quién eres, Señor?” Y el Señor dijo: “Yo soy Jesús, a quien tú persigues.

26:15-18 — Yo entonces dije: ¿Quién eres, Señor? Y el Señor dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Pero levántate, y ponte sobre tus pies; — pero no podía caminar sin que alguien le guiara; en este discurso no habla de haber estado ciego por tres días.

— porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto (Pablo era testigo de la resurrección de Cristo, (1:22; 22:14; 1Co 9:1) , y de aquellas en que me apareceré a ti, (18:3; 23:11; 2Co 12:2). — El testimonio de algunos de los testigos de Cristo les costó su vida; por eso, la palabra testigo, mártus, también significa mártir, «uno que da testimonio mediante su muerte» (Vine) (Apo 17:6; LBLA dice testigos).

— librándote de tu pueblo, y de los gentiles (continuamente el Señor lo hacía, como se ve a través de Hechos) , a quienes ahora te envío, para que abras sus ojos, — «Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, y con los oídos oyeron pesadamente, y sus ojos han cerrado, para que no vean con los ojos, y oigan con los oídos, y entiendan de corazón, y se conviertan, y yo los sane» (28:27). «Dios les dio espíritu de estupor, ojos con que no vean y oídos con que no oigan, hasta el día de hoy» (Rom 11:8). Estos dos textos describen la ceguedad de los judíos. Rom 1:21 describe la ceguedad de los gentiles: «Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido». «Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo» (2Co 4:6). Los que abren los ojos son los que están dispuestos a ver su condición espiritual y entender lo que Dios requiere de ellos.

— para que se conviertan de las tinieblas (la ignorancia, el pecado, la superstición, etc.) a la luz (el conocimiento pleno de Cristo, la luz del mundo, la perfecta Revelación del Padre) , y de la potestad de Satanás (2Co 11:14; Efe 6:12; Col 2:15; 2Ts 2:9) a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados. — Hacía todo esto por medio de la predicación del evangelio.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

Yo soy Jesús. Éxo 16:8; Mat 25:40, Mat 25:45; Jua 15:20, Jua 15:21.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Yo soy Jesús, a quien tú persigues: Tú eres el que peca en contra mía, pero yo te perdono.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

26:15-18 — Yo entonces dije: ¿Quién eres, Señor? Y el Señor dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Pero levántate, y ponte sobre tus pies; — pero no podía caminar sin que alguien le guiara; en este discurso no habla de haber estado ciego por tres días.
— porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto (Pablo era testigo de la resurrección de Cristo, (1:22; 22:14; 1Co 9:1) , y de aquellas en que me apareceré a ti, (18:3; 23:11; 2Co 12:2). — El testimonio de algunos de los testigos de Cristo les costó su vida; por eso, la palabra testigo, mártus, también significa mártir, «uno que da testimonio mediante su muerte» (Vine) (Apo 17:6; LBLA dice testigos).
— librándote de tu pueblo, y de los gentiles (continuamente el Señor lo hacía, como se ve a través de Hechos) , a quienes ahora te envío, para que abras sus ojos, — «Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, y con los oídos oyeron pesadamente, y sus ojos han cerrado, para que no vean con los ojos, y oigan con los oídos, y entiendan de corazón, y se conviertan, y yo los sane» (28:27). «Dios les dio espíritu de estupor, ojos con que no vean y oídos con que no oigan, hasta el día de hoy» (Rom 11:8). Estos dos textos describen la ceguedad de los judíos. Rom 1:21 describe la ceguedad de los gentiles: «Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido». «Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo» (2Co 4:6). Los que abren los ojos son los que están dispuestos a ver su condición espiritual y entender lo que Dios requiere de ellos.
— para que se conviertan de las tinieblas (la ignorancia, el pecado, la superstición, etc.) a la luz (el conocimiento pleno de Cristo, la luz del mundo, la perfecta Revelación del Padre) , y de la potestad de Satanás (2Co 11:14; Efe 6:12; Col 2:15; 2Ts 2:9) a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados. — Hacía todo esto por medio de la predicación del evangelio.

Fuente: Notas Reeves-Partain

REFERENCIAS CRUZADAS

s 1334 Hch 9:5; Hch 22:8

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

15 super (1) Véase la nota 5 super (1) del cap.9.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro