Biblia

Comentario de Hechos 4:14 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Hechos 4:14 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Pero, ya que veían de pie con ellos al hombre que había sido sanado, no tenían nada que decir en contra.

4:14 — Y viendo al hombre que había sido sanado, que estaba en pie con ellos, no podían decir nada en contra. — Entonces la única conclusión del asunto fue que Dios estaba con los apóstoles y a través de ellos El había revelado su poder y su Palabra. Le convenía al concilio reconocerlo y preguntar como los del día de Pentecostés, «¿Qué haremos?» Sin embargo, en lugar de esto, decidieron seguir oponiéndose al evangelio y a la iglesia.

La defensa de los apóstoles fue fuerte; consistía en lo siguiente: (1) podían hablar de la tumba vacía de Jesús; (2) daban su testimonio como testigos oculares de la resurrección; (3) el milagro de la curación del cojo, un milagro innegable (ver. 16); (4) su uso eficaz de las Escrituras; y, por último, (5) el testimonio de sus vidas. ¿Qué tan fuerte es la defensa de nosotros? Todavía existe la fuerza de los testigos de la resurrección de Jesús y los milagros hechos por Jesús y sus apóstoles; en cuanto a las Escrituras, tenemos la completa revelación; y debe haber mucha fuerza en nuestro testimonio.

Obsérvese que en todo este texto no había acusación contra los apóstoles. ¿Cuál era su crimen? (1) Habían predicado en el nombre de Jesús, y (2) habían acusado a los judíos de haber crucificado a Jesús, (3) a quien Dios había resucitado de los muertos.

Solamente interrogan a los apóstoles acerca del beneficio hecho a un cojo (ver. 9), pero no podían encontrar falla en las palabras de Pedro y no podían condenar la curación del cojo. Por eso, no hallaron la manera de castigarlos (ver. 21).

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

viendo al hombre. Hch 4:10; Hch 3:8-12.

no podían decir nada. Hch 4:16, Hch 4:21; Hch 19:36.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

no podían decir nada: El Sanedrín sabía que el milagro era real. Los apóstoles ofrecieron su explicación: Los milagros son obra de Jesucristo resucitado. Pero en vez de creerle, los miembros del Sanedrín se preocuparon en «aminorar el efecto». Trataron de intimidar a los apóstoles para que no hablen ni enseñasen en el nombre de Jesús.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

4:14 — Y viendo al hombre que había sido sanado, que estaba en pie con ellos, no podían decir nada en contra. — Entonces la única conclusión del asunto fue que Dios estaba con los apóstoles y a través de ellos El había revelado su poder y su Palabra. Le convenía al concilio reconocerlo y preguntar como los del día de Pentecostés, «¿Qué haremos?» Sin embargo, en lugar de esto, decidieron seguir oponiéndose al evangelio y a la iglesia.
La defensa de los apóstoles fue fuerte; consistía en lo siguiente: (1) podían hablar de la tumba vacía de Jesús; (2) daban su testimonio como testigos oculares de la resurrección; (3) el milagro de la curación del cojo, un milagro innegable (ver. 16); (4) su uso eficaz de las Escrituras; y, por último, (5) el testimonio de sus vidas. ¿Qué tan fuerte es la defensa de nosotros? Todavía existe la fuerza de los testigos de la resurrección de Jesús y los milagros hechos por Jesús y sus apóstoles; en cuanto a las Escrituras, tenemos la completa revelación; y debe haber mucha fuerza en nuestro testimonio.
Obsérvese que en todo este texto no había acusación contra los apóstoles. ¿Cuál era su crimen? (1) Habían predicado en el nombre de Jesús, y (2) habían acusado a los judíos de haber crucificado a Jesús, (3) a quien Dios había resucitado de los muertos.
Solamente interrogan a los apóstoles acerca del beneficio hecho a un cojo (ver. 9), pero no podían encontrar falla en las palabras de Pedro y no podían condenar la curación del cojo. Por eso, no hallaron la manera de castigarlos (ver. 21).

Fuente: Notas Reeves-Partain

REFERENCIAS CRUZADAS

t 190 Hch 3:11

u 191 Luc 21:15

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo