Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe. Y el eunuco no le vio más, pues seguía su camino gozoso.
8:39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. — Cuando el eunuco llegó a su tierra, ¿qué les dijo acerca de su conversión? ¿Que un ángel apareció a Felipe? No, no sabía nada de eso. ¿Que el Espíritu habló a Felipe? Tampoco sabía de eso. ¿Contó alguna «experiencia de gracia», algo que «se puede sentir más de lo que se puede explicar»? No, nada de eso. Entonces, ¿qué? Yo venía en mi carro, leyendo el profeta Isaías, queriendo entender el texto, cuando un señor llamado Felipe me explicó que Jesús de Nazaret había cumplido la profecía que yo estudiaba, y entonces me quedé convencido de lo que me predicó, confesé mi fe en Jesucristo como el Hijo de Dios, fui bautizado (de acuerdo con el mandamiento dado por Cristo) y Dios me perdonó mis pecados.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
cuando subieron del agua. Mat 3:16; Mar 1:10.
el Espíritu del Señor. 1Re 18:12; 2Re 2:16; Eze 3:12-14; Eze 8:3; Eze 11:24; 2Co 12:2-4.
y se fue por su camino. Hch 8:8; Hch 13:52; Hch 16:34; Sal 119:14, Sal 119:111; Isa 35:1, Isa 35:2; Isa 55:12, Isa 55:13; Isa 61:10; Isa 66:13, Isa 66:14; Mat 13:44; Rom 5:2; Rom 15:10-13; Flp 3:3; Flp 4:4; Stg 1:9, Stg 1:10; Stg 4:16.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
arrebató a Felipe … se encontró: La palabra griega que se traduce por arrebató también se usa en 1Ts 4:17 para hablar del arrebato de la Iglesia en el aire. Aunque este pasaje puede decir tan sólo que Felipe fue del desierto a Azoto, es muy probable que el término hable de un traslado milagroso.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
arrebató a Felipe. Elías (1Re 18:12; 2Re 2:16) y Ezequiel (Eze 3:12; Eze 3:14; Eze 8:3) también fueron arrebatados de manera milagrosa. Para la caravana, esta fue una poderosa confirmación de que Felipe era el enviado de Dios.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
8:39 Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. — Cuando el eunuco llegó a su tierra, ¿qué les dijo acerca de su conversión? ¿Que un ángel apareció a Felipe? No, no sabía nada de eso. ¿Que el Espíritu habló a Felipe? Tampoco sabía de eso. ¿Contó alguna «experiencia de gracia», algo que «se puede sentir más de lo que se puede explicar»? No, nada de eso. Entonces, ¿qué? Yo venía en mi carro, leyendo el profeta Isaías, queriendo entender el texto, cuando un señor llamado Felipe me explicó que Jesús de Nazaret había cumplido la profecía que yo estudiaba, y entonces me quedé convencido de lo que me predicó, confesé mi fe en Jesucristo como el Hijo de Dios, fui bautizado (de acuerdo con el mandamiento dado por Cristo) y Dios me perdonó mis pecados.
Fuente: Notas Reeves-Partain
Hch 8:8; 1Re 18:12; Luc 24:31-32.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
NOTAS
(1) Véase Ap. 1D.
REFERENCIAS CRUZADAS
n 461 1Re 18:12