Comentario de Isaías 48:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Oíd esto, oh casa de Jacob, los que sois llamados con el nombre de Israel, los que habéis salido de las entrañas de Judá, los que juráis por el nombre de Jehovah e invocáis al Dios de Israel, pero no en verdad ni con justicia.
que os llamáis del nombre de Israel. Gén 32:28; Gén 35:10; 2Re 17:34; Jua 1:47; Rom 2:17, Rom 2:28, Rom 2:29; Rom 9:6, Rom 9:8; Apo 2:9; Apo 3:9.
los que salieron de las aguas. Núm 24:7; Deu 33:28; Sal 68:26; Pro 5:16.
los que juran. Isa 44:5; Isa 45:23; Isa 65:16; Deu 5:28; Deu 6:13; Deu 10:20; Sal 63:11; Sof 1:5.
y hacen memoria del Dios de Israel. Isa 26:13; Isa 62:8; Éxo 23:13.
mas no en verdad ni en justicia. Isa 1:10-14; Lev 19:12; Sal 50:16-20; Sal 66:3; Jer 4:2; Jer 5:2; Jer 7:9, Jer 7:10; Mal 3:5; Mat 15:8, Mat 15:9; Mat 23:14; Jua 4:24; 1Ti 4:2; 2Ti 3:2-5.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Dios, convence al pueblo de su obstinanción, por medio de profecías, Isa 48:1-8.
Los salva por su propio bien, Isa 48:9-11.
Los exhorta a la obediencia, debido a su poder y providencia, Isa 48:12-15.
Lamenta su atraso, Isa 48:16-19.
Libra poderosamente a su pueblo de Babilonia, Isa 48:20-22.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
En este pasaje, dirigido a toda Israel, se condena al pueblo por su hipocresía (v. Isa 48:1), idolatría (v. Isa 48:5), arrogancia (v. Isa 48:7) y su deslealtad (v. Isa 48:8). Al mismo tiempo, esta profecía promete a la gente la salvación por el amor al nombre de Dios (vv. Isa 48:9-11). El tono es similar al que aparece en (Isa 42:18, Isa 42:19; Isa 43:22-25; Isa 46:1-13). Esta predicción cuenta con cuatro partes:
(1) el llamamiento a Israel para que escuche la palabra (vv. Isa 48:1, Isa 48:2);
(2) la acusación a Israel de que su incredulidad no tiene excusas ya que Dios ha manifestado siempre su ayuda (vv. Isa 48:3-5);
(3) la predicción sobre la salvación futura (vv. Isa 48:6-8); y
(4) la promesa de que Dios retardará su juicio por amor a su nombre (vv. Isa 48:9-11).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
Oíd es una apelación urgente dirigida a la «sorda Israel» (Isa 6:9, Isa 6:10; Isa 48:6, Isa 48:8).
Jacob … Israel: Aprecie un uso similar de estos nombres en Isa 41:8.
llamáis del nombre de: Descripciones parecidas de Israel nombrada por Dios se ven en Isa 43:1, Isa 43:7; Isa 63:8.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
CONSOLAOS. Se escribieron estos capítulos durante los últimos años de la vida de Isaías. Dios reveló estas profecías a fin de brindar esperanza y consuelo a su pueblo durante su cautividad en Babilonia ciento cincuenta años después de la época de Isaías (véase Isa 39:5-8). Están llenas de revelaciones proféticas acerca del Mesías venidero y su reino futuro en la tierra. Algunos acontecimientos profetizados se cumplieron en el cautiverio babilónico y en la restauración de Judá, muchos se relacionan más específicamente con la manifestación de Jesucristo en la tierra, y otros todavía esperan su cumplimiento. En general, los caps. Isa 40:1-31; Isa 41:1-29; Isa 42:1-25; Isa 43:1-28; Isa 44:1-28; Isa 45:1-25; Isa 46:1-13; Isa 47:1-15; Isa 48:1-22 hacen hincapié en la liberación, los caps. Isa 49:1-26; Isa 50:1-11; Isa 51:1-23; Isa 52:1-15; Isa 53:1-12; Isa 54:1-17; Isa 55:1-13; Isa 56:1-12; Isa 57:1-21 en la redención, y los caps. Isa 58:1-14; Isa 59:1-21; Isa 60:1-22; Isa 61:1-11; Isa 62:1-12; Isa 63:1-19; Isa 64:1-12; Isa 65:1-25; Isa 66:1-24 en la gloria.
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
MAS NO EN VERDAD NI EN JUSTICIA. Este capítulo revela que Judá era un pueblo que aparentaba seguir a Dios e invocar su nombre, pero que en realidad rechazaba las verdades de su palabra y se negaba a vivir justamente delante de Él. Tenían una forma de religión, pero le negaban a Dios su legítimo lugar en la vida de ellos (véanse Mat 23:13, nota sobre la hipocresía; 2Ti 3:5, nota).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
48. La Liberación de Israel, Obra de Yahve.
Este capítulo es como una recapitulación de la argumentación sobre las predicciones en los capítulos anteriores. Los hechos han demostrado que todo ha sucedido conforme a las predicciones de Yahvé. Israel no tiene excusa ante el cumplimiento de las profecías. La conquista de Babilonia por Ciro será un ejemplo de estas profecías. Suele dividirse el capítulo en cuatro partes: 1) las profecías de Yahvé en la historia (i-n); 2) anuncio de la conquista de Babilonia por Ciro (12-16); 3) la historia de Israel hubiera sido muy diferente si hubiera sido fiel a Yahvé (17-19); 4) invitación lírica a los exilados a salir de Babilonia (20-22). Este capítulo clausura otra gran sección del libro de Isaías.
Las predicciones antiguas (1-6).
1 Oíd esto, casa de Jacob, los que llevan el nombre de Israel, los salidos de las entrañas de Judá, los que juran por el nombre de Yahvé y celebran el Dios de Israel, pero sin verdad y sin justicia, 2porque llevan el nombre de la ciudad santa y se apoyan en el Dios de Israel, cuyo nombre es Yahvé de los ejércitos. 3Lo que ha pasado, ya ha tiempo lo predije, de mi boca salió. Yo lo hice oír, y de improviso obré, y todo se ha cumplido. 4Porque sabía que eres duro y es tu cerviz una barra de hierro, que tienes una frente de bronce. 5Yo te predije esto hace tiempo, antes de que sucediera te lo di a saber, para que no dijeras: Lo ha hecho mi ídolo; mi estatua, mi simulacro lo mandó. 6 Ya lo has oído, míralo todo ello, y ahora vosotros, ¿no lo anunciaréis?
Los israelitas llevan un título honorífico, el nombre de Israel (v.1), que es un verdadero timbre de gloria, ya que les recuerda el gran antepasado elegido y protegido por Yahvé (Gen 32:29), y han salido de las entrañas de Judá 1, gran antepasado de la tribu señora en Israel desde la implantación de la monarquía israelita. Sin embargo, tienen una conducta poco sincera y puramente formulista al jurar en nombre de Yahvé y celebrarlo con los labios; pero esto no corresponde a su proceder en la práctica: sin verdad y sin justicia (v.1). Además, se glorían de pertenecer a la ciudad santa y de estar bajo el amparo del Dios de Israel. Pero si esto es un timbre de gloria, es también una exigencia moral y espiritual mayor. Por tanto, si la conducta de ellos no corresponde a su categoría superior entre los pueblos, la responsabilidad y el castigo deben ser mayores.
Después de esta introducción enfática y amenazadora, Yahvé vuelve de nuevo a su argumentación a base de las profecías antiguas cumplidas: lo que ha pasado, ya ha tiempo lo predije (v.3) 2. Los israelitas son testigos de ello. Y todo esto es por la dureza y obstinación tradicional de Israel: sabía que eres duro (v.4). Esta expresión ya tenía una antigua tradición en la literatura bíblica 3. Israel ha sido demasiado insensible a lo espiritual a través de la historia. Es la gran acusación de los profetas: es tu cerviz una barra de hierro (v.4) 4; es desvergonzada, insolente: tienes una frente de bronce 5.
Además, estas predicciones de Yahvé tenían un claro fin apologético ante su pueblo: te lo di a saber para que no dijeras: Lo ha hecho mi ídolo (.6). Israel tenía una propensión innata a la idolatría, y, a pesar de los portentos que constantemente veía en su historia, debidos a Yahvé, por instinto los atribuía a sus ídolos favoritos, más condescendientes con sus instintos pasionales y sus egoísmos. El Yahvé del Sinaí era demasiado adusto y exigente para ellos, y por eso buscaban los cultos idolátricos, llenos de atractivos sensuales. El profeta, pues, en esta sección recrimina acremente la conducta del rebelde Israel a través de su historia. Ahora que todo está cumplido (míralo todo ello, v.6), invita a Israel a dar testimonio de ello, es decir, a reconocer las profecías cumplidas como prueba de la divinidad de Yahvé: y ahora vosotros lo anunciaréis (v.6).
Nuevas predicciones (6-11).
6 Yo te he hecho oír cosas nuevas desde ahora, cosas ocultas que no conocías. 7Ahora han sido creadas y no hace tiempo, antes de hoy no las habías oído, para que no dijeras: Ya lo sabía yo. 8No lo habías oído ni lo conocías, ni desde antiguo se había abierto tu oído6. Porque sabía que eres pérfido, y tu nombre es rebelde desde el seno materno. 9Yo por mi nombre difiero mi ira, y por amor de mi gloria me contengo frente a ti, para no exterminarte. 10 He aquí que te probé al fuego, y no había plata; te he pasado por la hornaza de la aflicción. 11 Es por mí, por amor de mí lo hago, porque ¿cómo (mi nombre) sería profanado? 7, y mi gloria a nadie se la doy.
Yahvé anuncia ahora cosas nuevas (v.6), e.d., el mensaje de consolación para su pueblo, que le permanecía oculto hasta estos tiempos. Dios las tuvo ocultas para que pudieran atribuirlas a los ídolos. Estas cosas nuevas entran ahora en su fase de realización: ahora han sido creadas (v.7). Y no se lo comunicó antes para que fuesen más impresionados en el momento de la realización: para que no dijeras: Ya lo sabía yo (v.7). Israel no tenía noticias de esta súbita promesa de liberación que se va a cumplir muy pronto. Yahvé sabía que Israel era pérfido. , rebelde desde el seno materno (v.8), y, por tanto, no quería rebelarle de antemano esto, que podía atribuir a los ídolos. Yahvé mantuvo el secreto de la aparición de Ciro y de la liberación, y no se lo comunicó por revelaciones hasta ahora. La historia de Israel ha sido tan pecaminosa, que hubiera merecido el exterminio más amplio; pero Yahvé, por amor de su nombre y de su gloria (v.9), difiere su ira. La ruina total de Israel hubiera comprometido la fama y gloria de Yahvé, su Dios, ante los gentiles, que considerarían lo de la desaparición total de Israel como un fracaso debido a la impotencia de su Dios nacional. Además, quizá en la palabra mi gloria (o mejor, “alabanza”) aluda al culto, que desaparecería totalmente con el exterminio de Israel como pueblo. Si Dios ha castigado al pueblo elegido con la cautividad, ha sido para purificarlo: te probé al fuego (v.10) con esperanza de forjar un pueblo fiel y santo; pero el resultado ha sido negativo: no había plata (v.10), es decir, el pueblo no supo aprovechar la lección del castigo y, en lugar de demostrar su fe en Yahvé, ha seguido fuera de camino, como si todo fuera basura sin valor. La hornaza de la aflicción (v.10) ha sido el crisol empleado por Yahvé para aquilatar la profundidad de los sentimientos religiosos de Israel. Y Yahvé vuelve de nuevo a la idea de que lo que va hacer (por mi amor lo hago), e.d., la liberación de Israel tomando como instrumento a Ciro, se debe al celo por su gloria, para que no fuera profanado, blasfemado (cómo sería profanado) por los gentiles. Y, por otra parte, lo que va a realizar (las cosas nuevas, v.6) se debe exclusivamente a él, no a los ídolos: mi gloria a nadie se la doy (v.11). Sólo Yahvé es capaz de realizar la nueva gesta de la liberación de Israel.
Ciro, enviado por Yahvé (12-16).
126yeme, Jacob, e Israel, a quien he llamado; soy yo, yo el primero, y aun también el postrero. 13Mi mano cimentó la tierra, mi diestra desplegó los cielos, y los llamé y luego aparecieron. 14Reunios todos y oíd: ¿Quién de entre ellos anunció estas cosas? Aquel a quien ama Yahvé, cumplirá su voluntad contra Babilonia y contra la raza de los caldeos. 15Yo, yo he hablado, yo le he llamado, yo le guío y hago prosperar sus caminos. l6Acercaos a mí y oíd esto: Desde el principio no os he hablado en secreto; cuando las cosas se hacían, allí estaba yo. Y ahora Yahvé me ha enviado con su espíritu.
Yahvé va a manifestar cosas nuevas por amor de su gloria; para ello, como garantía, presenta sus credenciales de creador de todas las cosas y forjador de la historia de Israel desde su elección. Es una recapitulación de conceptos ya expresados en capítulos anteriores. Yahvé se encara amorosamente con Israel, a quien ha llamado (v.12) como pueblo elegido. Yahvé es eterno, señor del tiempo: el primero y el postrero (v.12). La frase ya apareció en 41:4; 44:6. Al comenzar a existir las cosas, era ya Señor supremo de todo, y cuando llegue la consumación de ellas seguirá como arbitro de la historia humana y de la creación toda. Y Yahvé se encara con los israelitas para que presenten predicciones semejantes a las que ahora les comunica: ¿quién de entre ellos anunció estas cosas? (v.14). Entre ellos, e.d., los dioses paganos, a los que los israelitas se sentían muchas veces inclinados.
Y llega el punto culminante del vaticinio: la aparición de Ciro, conquistador de Babilonia y libertador de Israel. Aquel a quien ama Yahvé es una apelación interesante. Salomón fue llamado también amado de Yahvé (2Sa 12:24).8·Ciro, por su misión de liberador del pueblo elegido y por ser instrumento de Yahvé, es llamado su amigo; por permisión de Yahvé cumplirá su voluntad contra Babilonia y la raza de los caldeos. Será el instrumento de Yahvé: cumplirá su voluntad de castigar a los habitantes de la gran metrópoli de los caldeos. Y Yahvé es quien le ha llamado, haciendo prosperar sus caminos, sus conquistas. Y todo esto lo había predicho Yahvé, no de un modo enigmático (desde el principio no os he hablado en secreto, v.16), desde el principio de la historia de Israel, o mejor, desde que las cosas empezaron a cumplirse (cuando las cosas se hacían). Estaba allí Yahvé (allí estaba yo) dirigiendo el curso de los acontecimientos, de modo que le pudieran conocer. La frase final: Y ahora Yahvé me ha enviado con su espíritu (15b), parece ser una declaración del profeta para confirmar su misión 9.
Utilidad de la ley del Señor (17-19).
17 Así habla Yahvé, tu redentor, el Santo de Israel: Yo soy Yahvé, tu Dios, que para utilidad tuya te enseña y te pone en el camino que has de seguir. 18 ¡Ahí, si hubieses atendido a mis mandamientos, tu paz sería como un río, y tu justicia como las olas del mar. 19 Y sería como arena tu simiente, y los frutos de tus entrañas como sus granos 10, y no sería extirpado ni exterminado tu nombre delante de mí11.
El profeta hace ver a Israel, en un tono desilusionado, que la conducta de Israel ha sido decepcionante para Yahvé (cf. Sal 81:13-16). Si hubiera sido fiel a su Dios, otro sería el panorama actual del pueblo elegido. Este tono triste del fragmento, poco en consonancia con el ambiente de liberación y de alegría que impera en este capítulo, y el hecho de que parece interrumpir el contexto de 12-16 (cuya continuación normal es 20-21), ha obligado a muchos autores a suponer que está desplazado de su lugar 12.
Dios ha adoctrinado a Israel para su utilidad (v.17), en cuanto que sus caminos conducen a la verdadera y única felicidad. Si Israel hubiera sido fiel a su vocación, siguiendo los preceptos del Señor, su paz sería como un río (v.18), e.d., su estado de tranquilidad y bienestar sería tan abundante como un río, en contraposición a los torrentes intermitentes de Palestina, que sólo en determinadas épocas llevan caudal, y éste escaso. La paz en Israel ha sido tan rara como las aguas en estos wadys circunstanciales. También su justicia sería tan desbordante como las olas del mar (v.18): habría un reino de equidad sobreabundante, que daría por fruto un completo bienestar. Por otra parte, la descendencia de Israel se multiplicaría como arena (v.19), y Dios no lo habría sometido a la prueba del exilio, en la que estuvo a punto de ser extirpado y exterminado (v.19).
Invitación a los israelitas para que salgan de Babilonia (20-22).
20Salid de Babilonia, huid de entre los caldeos, con gritos de exultación anunciad, proclamad esto, publicadlo hasta los confines de la tierra; decid: Rescató Yahvé a su siervo Jacob. 21 No tendrán sed en el desierto por el cual los guía; hará que broten para ellos aguas de la roca, abrirá la peña y brotarán las aguas. 22Pero no hay paz para los malvados, dice Yahvé.
Ha llegado el momento de la liberación, y por eso el profeta invita a los cautivos a que abandonen la capital de sus opresores, y todo ha sido obra de Yahvé: Rescató Yahvé a su siervo Jacob (v.20). Y el Señor mismo les acompañará en su viaje por el desierto (v.21), para que no se vean sometidos a la sed abrasadora. La nueva liberación se describe en los mismos términos que la tradicional del éxodo (Exo 17:6; Num 20:11); de nuevo Yahvé hará brotar aguas de la roca.
La terminación: no hay paz para los malvados (v.22), parece ser una glosa posterior, tomada Deu 57:21, donde encuentra su contexto. Es una fórmula estereotipada, que bien pudo servir al copista para marcar la final de una sección en esta segunda parte del libro de Isaías.
1 El texto hebreo dice literalmente “aguas de Judá” (quizá aludiendo al semen húmedo fecundante); pero una ligerísima corrección nos da entrañas, que se adapta perfectamente al contexto. – 2 Cf. 42:9; 43:12; 44:8. – 3 Cf. Eze 3:7; Isa 6:10; Exo 32:9; Deu 9:6.13, etc. – 4 Exo 32:9; Deu 9:6. – 5 Cf. Eze 3:7s. – 6 Los LXX leen: “no he abierto tu oído.” – 7 Los LXX intercalan “mi nombre.” – 8 Los LXX omiten Yahvé. – 9 No pocos autores consideran esta frase como glosa posterior. Condamin corrige el texto y traduce: “y yo le envío con su espíritu.” En ese caso, el que hablaría sería Yahvé a propósito de Ciro, su enviado. – 10 La palabra que traducimos por granos es de sentido incierto en el hebreo. Los LXX traducen “como polvo de la tierra.” – 11 Con los LXX hemos preferido la lectura “tu nombre,” en vez de “su nombre” del texto masorético, porque está más en conformidad con el contexto. – 12 Condamin pone los v.20-21 después Deu 52:10.
Fuente: Biblia Comentada
juran en el nombre de Jehová … mas no en verdad. Se trataba de israelitas de nombre cuyo corazón estaba lejos de Dios. Esta hipocresía fue común durante toda la historia de Israel, incluso en el tiempo del Señor Jesús. Cp. Mat 23:3; Mat 23:13-39.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Las profecías de los capítulos Isa 1:1-31 al Isa 39:1-8 iban dirigidas a Judá en medio de su situación durante el ministerio de Isaías (739 a.C. hasta ca. 686 a.C.). Las profecías de los capítulos Isa 40:1-31 a Isa 66:1-24 van dirigidas a Judá como si el cautiverio en Babilonia (Isa 39:5-7) ya fuera una realidad presente, aunque ese cautiverio no sucedió hasta 605-586 a.C. Las palabras «No hay paz para los malos, dijo Jehová» (Isa 48:22; Isa 57:21) marcan la división de esta sección en tres partes: capítulos Isa 40:1-31 a Isa 48:1-22, capítulos Isa 49:1-26 a Isa 57:1-21 y capítulos Isa 58:1-14 a Isa 66:1-24.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Esta sección trata la esperanza y el consuelo de un futuro bienaventurado después del juicio de Dios en el cautiverio babilónico que está por venir.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
— Jacob… Israel… Judá: El mensaje parece ir dirigido a todo el pueblo, a los dos antiguos reinos. Es probable que el profeta estuviera pensando en una renovación del período de David y Salomón.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
“Amor mostrado a los que no aman.” 1-8 Volver la atención de Babilonia otra vez a Israel nada tiene de elogioso. Su fácil mención de Jehovah y de la Santa Ciudad, (vv. 1, 2) no hace juego con su idolatría (v. 5); aparecen, en realidad, como inveterados hipócritas (vv. 1, 4, 8). Es un cuadro más oscuro aun que el de la infidelidad de 40:27 y aun la frialdad de 43:22, si bien se la anticipó en el pecado contra la luz, implícita en 42:18-20. El alegato de la profecía, hasta aquí dirigido contra los paganos (cf. 41:21-24), ahora tiene que ser vuelto contra el propio pueblo de Dios, estos empecinados escépticos (vv. 3-8). Ver la Introducción.
9-22 Todo esto, sin embargo, sólo sirve para revelar la paciencia de Dios por lo que es: inmerecida (v. 9), constructiva (v. 10; ver nota más abajo) y resuelta (v. 11). Después de toda su franqueza todavía puede afirmar tanto su llamado (v. 12) como su amor (v. 14) y dar la libertadora orden de ¡Salid de Babilonia! (v. 20). Su eco se escuchará a través de los próximos capítulos (cf. 49:9; 52:11; 55:12; 62:10). No obstante, esto no es una rapsodia; una y otra vez se insistirá en que el alto precio que habrá que pagar por la obstinación es nada menos que el adiós a la paz (vv. 18, 22); es decir, a la salud espiritual y a la sociedad. El triste realismo del v. 22 reaparece en 57:21, y el libro termina con una nota más dura en 66:24.
Notas. 10 Presenta problemas de traducción. El heb. tiene “como”, que también podría significar “a costo de” o “en el carácter de”; la diferencia está en una sola letra que se confunde fácilmente con “como”. En el v. 10b el rollo de Isaías de los Rollos del Mar Muerto apoya la traducción probado; pero escogido es el significado normal de la palabra de acuerdo con los textos tradicionales (ver nota de la RVA). 16 El versículo termina con un extraordinario cambio de orador; el que habla no es más el Señor, como en los vv. 15, 16a, sino uno que él ha enviado, así como también es enviado el Espíritu. Podría ser el profeta pero tiene mayor significación si anticipa el “me” de 49:1; 50:4; 61:1; en otras palabras, el Siervo en quien Jesús había de verse. Es un extraordinario reflejo, a la distancia, de la Trinidad.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
48.1 El pueblo de Judá se sentía confiado porque vivía en Jerusalén, la ciudad del templo de Dios. Dependieron de su herencia, ciudad y templo, pero esta era una seguridad falsa ya que no dependieron de Dios. ¿Se siente seguro porque asiste a la iglesia o vive en cierto país cristiano? Ni la herencia, los edificios ni las naciones pueden darnos una relación con Dios. Debemos depender verdaderamente de El en forma personal, con todo nuestro corazón.48.9-11 No había nada en las acciones, actitudes y logros de Israel que obligaran a Dios a amarlos y salvarlos. Pero por amor a sí mismo, para mostrar quién es El y lo que puede hacer, los salvó. Dios no nos salva porque seamos buenos, sino porque nos ama y por su naturaleza misericordiosa.48.10 ¿Se queja con facilidad cuando su vida se vuelve complicada o difícil? ¿Por qué un Dios amoroso permitirá que sus hijos atraviesen por toda clase de experiencias desagradables? Este versículo nos muestra sencillamente que Dios nos pone a prueba «en horno de aflicción». En lugar de quejarnos, nuestra respuesta debería ser volvernos a Dios en fe buscando fortaleza para soportar y regocijarnos en nuestros sufrimientos (véase Rom 5:3; Jam 1:2-4). Sin la prueba, nunca sabremos de qué somos capaces, ni creceríamos. Y sin la purificación, no seríamos más puros ni más semejantes a Cristo. ¿Qué clase de adversidad enfrenta actualmente?48.14, 15 «Aquel a quien Jehová amó» se refiere a Ciro y esto sin duda estremeció a su audiencia. ¿Cómo podía amar el Señor a un rey pagano, un enemigo? Pero era Ciro al que Dios utilizaría para liberar a su pueblo del cautiverio en Babilonia. La misión de Ciro era liberar a Israel al conquistar Babilonia, luego decretar que todos los judíos podían regresar a su tierra natal. ¿Quién sino un profeta podía narrar una historia tan increíble pero verdadera casi doscientos años antes de que sucediera?48.17, 18 Como un padre amoroso, Dios nos enseña y dirige. Debemos escucharlo, porque recibimos paz y justicia cuando obedecemos su Palabra. Negarnos a prestar atención a los mandatos de Dios invita al castigo y amenaza esa paz y justicia.48.20 ¿Puede imaginar a los cautivos saliendo de Babilonia muchos años más tarde? No nos queda duda del porqué dan voces de alegría, así como sus antepasados gritaron con gozo después de cruzar el Mar Rojo, ¡al fin libres de la esclavitud de Egipto! ¿Qué lo tiene a usted cautivo? ¡Libérese! El Señor ha redimido a sus siervos de la esclavitud del pecado. Cuando permita que lo libere de su cautiverio, sentirá deseos de gritar de alegría.48.22 Mucha gente demanda comodidades, seguridad y consuelo, pero no ha dado el primer paso para quitar el pecado de su vida y abrir las puertas a Dios. No están arrepentidos ni confían en El. Si usted desea paz verdadera, busque primero a Dios. Entonces la tendrá.
Fuente: Comentarios de la Biblia del Diario Vivir
NOTAS
(1) “Entrañas; partes internas”, por una corrección de M; unos 40 mss heb.: “días”.
(2) “Y […] del Dios de.” Heb.: u·v·E’·lo·héh.
(3) O: “en apego a la verdad”.
REFERENCIAS CRUZADAS
a 2408 Gén 32:28; Gén 35:10; 2Re 17:34; Rom 9:6
b 2409 Gén 49:8; 1Cr 5:2; 1Cr 28:4
c 2410 Deu 6:13; Jer 4:2; Sof 1:5
d 2411 Éxo 23:13; Isa 26:13
e 2412 Lev 19:12; Jer 4:2; Mal 3:7
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
no en verdad. De nuevo el S eñor denuncia a los judíos desterrados que se llaman adoradores del Dios verdadero, pero no de un modo que pueda llamarse verdadero ni justo. Como demuestra el contexto (vers. 5), el error resulta de la combinación de la adoración al S eñor con la de los dioses de las naciones paganas, especialmente los de Babilonia.
Fuente: La Biblia de las Américas
El pueblo habla del Señor pero practica la idolatría (v. Isa 48:5).
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
Lit., se llaman por
Lit., aguas
Lit., salen … juran … hacen
Fuente: La Biblia de las Américas
[6] Con las festividades que celebráis en su memoria.[12] Principio y fin de todas las cosas.[16] San Jerónimo y otros padres lo interpretan como el misterio de la Santísima Trinidad.[21] Ex 17, 6.[22] Is 57, 21.