Comentario de Isaías 64:7 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
No hay quien invoque tu nombre ni se despierte para asirse de ti. Ciertamente escondiste tu rostro de nosotros y nos has entregado al poder de nuestras iniquidades.
Nadie hay que invoque tu nombre. Isa 50:2; Isa 59:16; Sal 14:4; Eze 22:30; Ose 7:7, Ose 7:14.
que se despierte para apoyarse en ti. Isa 27:5; Isa 56:4.
por lo cual escondiste de nosotros. Isa 57:17; Isa 59:2; Deu 31:17; Deu 32:19-25; Ose 5:15.
y nos dejaste marchitar. Jer 9:7; Eze 22:18-22; Eze 24:11.
en poder de nuestras maldades. Job 8:4.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Nadie hay que invoque es una exageración que llama la atención de la apatía de las personas.
escondiste: Dios nunca está escondido en realidad, pero oscurece su presencia debido al pecado humano (Isa 1:15).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
Nadie hay que invoque. El profeta no encuentra excepción alguna entre un pueblo cuyas iniquidades lo habían separado de Dios. Vea las notas sobre Rom 3:10-18. Esa búsqueda e invocación del Señor como la describe Isaías en Isa 55:6-7 no puede ocurrir si no es por la convicción firme y el despertamiento poderoso del corazón pecador por parte del Espíritu Santo. La oración reconoce a Dios como un alfarero que tiene control del barro y es un ruego para que Él realice en el pueblo una obra de salvación (v. Isa 64:8). Cp. Isa 45:9-10; Isa 60:21; Isa 63:16. Esta obra es lo que Dios prometió para dar por terminado su furor (Isa 54:7-8) y su recuerdo del pecado (v. Isa 64:9; Isa 43:25).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
REFERENCIAS CRUZADAS
q 3310 Sal 14:4; Ose 7:7
r 3311 Deu 31:17; Isa 57:17
s 3312 Eze 22:20
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
no hay quien invoque tu nombre. Esta descripción se aplica específicamente a la misma generación del profeta. El N. T. emplea un lenguaje semejante para describir la condición pecaminosa del pueblo en general (cp. Ro 3:10– 18).
Fuente: La Biblia de las Américas
Así en la versión gr. (Sept.); en el T.M., derretido en el