Biblia

Comentario de Jeremías 2:6 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Jeremías 2:6 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

No dijeron: ‘¿Dónde está Jehovah, que nos hizo subir de la tierra de Egipto y nos condujo por el desierto, por una tierra árida y de hoyos, por una tierra reseca y de densa oscuridad, por una tierra por la cual ningún hombre ha pasado, ni habitó allí hombre alguno?’

Dónde está Jehová. Jer 2:8; Jer 5:2; Jue 6:13; 2Re 2:14; Job 35:10; Sal 77:5; Isa 64:7.

que nos hizo subir. Éxo 14:1-31; Éxo 15:1-27; Isa 63:9, Isa 63:11-13; Ose 12:13; Ose 13:4.

que nos condujo por el desierto. Jer 2:2; Deu 8:14-16; Deu 32:10.

y de sombra de muerte. Job 3:5; Job 10:21, Job 10:22; Sal 23:4; Mat 4:16.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Al seguir a otros dioses, el pueblo de Israel perdió de vista su identidad como el pueblo elegido de Dios. Olvidaron cómo Dios les había liberado de la opresión en Egipto y les dio alimento, agua, y protección en el desierto durante cuarenta años.

 EN PERSONA

La fe de Jeremías

Algunos podrían considerar a Jeremías como un modelo de fidelidad, mientras otros podrían pensar de él como ejemplo de fracaso e inutilidad. Sirvió como profeta de Dios por más de cuarenta años, sin embargo, los líderes y el pueblo de Judá no escucharon sus advertencias. Jeremías fue puesto en prisión, arrojado dentro de una cisterna, y llevado a Egipto contra su voluntad. No le fue concedido el matrimonio. Sus amigos, vecinos, familiares, falsos sacerdotes, profetas y reyes lo rechazaron. Jeremías permaneció solo en su llamado para que el pueblo se arrepintiera y se volviera a Dios. Les advirtió repetidas veces acerca de su inminente castigo. Y a pesar del cumplimiento durante su ministerio de gran parte de lo que profetizó, el pueblo y los líderes continuaron ignorándole.

Sin embargo, a pesar de todas las pruebas y humillaciones que se vio forzado a soportar, Jeremías permaneció obediente y fiel a Dios. Aunque al principio cuestionó el llamado de Dios, cuando aceptó su posición, se convirtió en un modelo de perseverancia y devoción. Después de soportar décadas de abusos, amenazas y franca indiferencia, Jeremías podría fácilmente haber vuelto la espalda para alejarse. Pero él sabía que advertir al pueblo era exactamente el problema sobre el que Dios le había encargado. El pueblo se había apartado de la voluntad de Dios, y Jeremías no iba a hacer lo mismo.

Algunos podrían considerar que el ministerio de Jeremías fue un fracaso porque el pueblo no respondió al llamado profético. En realidad, su vida fue un glorioso éxito, porque Jeremías permaneció fiel a su Dios. Puede no haber visto resultados inmediatos, sin embargo, su lucha por obedecer a Dios en un mundo que se había apartado masivamente de su Creador, ha inspirado a generaciones de creyentes.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Éxo 20:2; Deu 8:14-15.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

NOTAS

(1) O: “sombra de muerte”.

(2) “Hombre.” Heb.: ’isch.

(3) “Hombre terrestre.” Heb.: ’a·dhám.

REFERENCIAS CRUZADAS

o 54 Éxo 14:30; Jue 6:13; Isa 63:11; Ose 13:4

p 55 Deu 1:1; Deu 32:10

q 56 Deu 8:15; Neh 9:20

r 57 Sal 23:4

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

O, de sombra de muerte

Fuente: La Biblia de las Américas