Comentario de Juan 13:33 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Hijitos, todavía sigo un poco con vosotros. Me buscaréis, pero como dije a los judíos: “A donde yo voy vosotros no podéis ir,” así os digo a vosotros ahora.

13:33 Hijitos (expresión de mucha ternura; 1Jn 2:1; 1Jn 2:12; 1Jn 2:18; 1Jn 2:28), aún estaré con vosotros un poco.

7:33; 8:21; 12:35: 14:18, 19; 16:16-20. Pronto — sin la presencia física de Jesús — los apóstoles predicarán el evangelio a todas las naciones. Para animarles les habla de la unión espiritual entre El y ellos. Hay algo de semejanza entre este discurso y el discurso final de Moisés en Deuteronomio.

— Me buscaréis; pero como dije a los judíos, A donde yo voy, vosotros no podéis ir. — Con estos versículos se despide de ellos, y nadie le puede acompañar. Los «judíos» no podían ir con Cristo. «Yo me voy, y me buscaréis, pero en vuestro pecado moriréis; a donde yo voy, vosotros no podéis venir» (Jua 8:21) .

— así os digo ahora a vosotros: Porque El iría al Padre, pero dijo a Pedro, «me seguirás después» (12:36) y dice a todos los fieles, «si me fuere y os preparare un lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo» (14:3).

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

Hijitos. Gál 4:19; 1Jn 2:1; 1Jn 4:4; 1Jn 5:21.

aun estaré un poco con vosotros. Jua 12:35, Jua 12:36; Jua 14:19; Jua 16:16-22.

Me buscaréis. Jua 7:33; Jua 8:21-24; Jua 14:4-6.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

El tiempo había llegado para que Jesús anunciara su partida a sus discípulos.

Hijitos es una expresión de cariño tierno usada por todos los Evangelios. Juan no olvidó la expresión; la utilizó en repetidas ocasiones en 1 Juan.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

como dije a los judíos. La declaración se encuentra en Jua 8:21.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

13:33 Hijitos (expresión de mucha ternura; 1Jn 2:1; 1Jn 2:12; 1Jn 2:18; 1Jn 2:28), aún estaré con vosotros un poco. — 7:33; 8:21; 12:35: 14:18, 19; 16:16-20. Pronto — sin la presencia física de Jesús — los apóstoles predicarán el evangelio a todas las naciones. Para animarles les habla de la unión espiritual entre El y ellos. Hay algo de semejanza entre este discurso y el discurso final de Moisés en Deuteronomio.
— Me buscaréis; pero como dije a los judíos, A donde yo voy, vosotros no podéis ir. — Con estos versículos se despide de ellos, y nadie le puede acompañar. Los «judíos» no podían ir con Cristo. «Yo me voy, y me buscaréis, pero en vuestro pecado moriréis; a donde yo voy, vosotros no podéis venir» (Jua 8:21) .
— así os digo ahora a vosotros: Porque El iría al Padre, pero dijo a Pedro, «me seguirás después» (12:36) y dice a todos los fieles, «si me fuere y os preparare un lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo» (14:3).

Fuente: Notas Reeves-Partain

EL MANDAMIENTO DE LA DESPEDIDA

Juan 13:33-35

-Hijitos -les siguió diciendo Jesús a Sus discípulos-, no voy a estar con vosotros más que un poco más; y, como les dije a los judíos, os lo digo a vosotros ahora: No podéis ir adonde Yo voy. Os doy un nuevo mandamiento: que os améis unos a otros; que también vosotros os améis entre vosotros como Yo os he amado; en esto es en lo que todos reconocerán que sois discípulos Míos: si existe este amor entre vosotros.

Jesús estaba dándoles a Sus discípulos Su mandamiento de despedida. Le quedaba poco tiempo; si aún necesitaban oír Su voz, tenía que se entonces. Él iba a hacer un viaje en el que ninguno podía acompañarle; iba a ponerse en camino, y tenía que ir Él solo. Y, antes de marcharse, les dio el mandamiento de que se amaran entre sí como Él los había amado. ¿Qué quiere decir eso para nosotros, en nuestras relaciones con nuestros semejantes? ¿Cómo amó Jesús a Sus discípulos?
(i) Los amó sin el menor egoísmo. Hasta en el amor humano más noble hay algo de egoísmo. A menudo pensamos -puede que inconscientemente- en lo que vamos a sacar. Pensamos en la felicidad que disfrutaremos, o en la soledad en que quedaremos si el amor falla o se nos niega. A menudo estamos pensando: ¿Qué me reportará este amor? Por detrás de todo, es nuestra felicidad lo que estamos buscando. Pero Jesús no pensaba nunca en Sí mismo. Su único deseo era darse a Sí mismo y todo lo que tenía por los que amaba.

(ii) Jesús amaba a Sus discípulos sacrificialmente. No había límite a lo que su amor pudiera llegar o dar. Ninguna demanda era excesiva. Si el amor quería decir la Cruz, Jesús la aceptaba. A veces cometemos el error de pensar que el amor está para darnos la felicidad. A fin de cuentas, así es; pero también puede traer dolor, y demandar una cruz.

(iii) Jesús amaba a Sus discípulos comprensivamente. Conocía íntima y totalmente a Sus discípulos. No conocemos a una persona a menos que hayamos convivido con ella. Si se trata de un encuentro casual, la vemos en su mejor momento. Es después de vivir con ella cuando conocemos sus rarezas y debilidades. Jesús había convivido con Sus discípulos día tras día durante muchos meses y sabía todo lo que había que saber de ellos -y, sin embargo, los amaba. A veces decimos que el amor es ciego. No hay tal, porque el amor que es ciego pronto se queda en nada, como no sea en desilusión y desencanto. El amor verdadero tiene los ojos bien abiertos. Ama, no lo que se imagina, sino lo que es. El corazón de Jesús es lo bastante grande como para amarnos tal como somos.

(iv) Jesús amaba a Sus discípulos perdonándolos. El primero de la compañía Le negaría. Todos Le abandonarían cuando más los necesitaba. Nunca, en toda Su vida, Le comprendieron realmente. Eran ciegos e insensibles, lentos para aprender y faltos de comprensión. Al final, todos se portaron como unos cobardes. Pero Jesús nunca les tuvo rencor; no tenían fallo que Él no pudiera perdonar. El amor que no ha aprendido a perdonar no puede hacer más que marchitarse y morir. Somos pobres criaturas; y hay una especie de fatalidad en las cosas que nos hace herir más a los que más nos aman. Por esa misma razón todo amor duradero ha de edificarse sobre el cimiento del perdón; porque, sin perdón, está destinado fatalmente a morir.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento

b. La despedida de Jesús (v. Jua 13:33)

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

También aquí generaría problemas de comprensión traducir literalmente “Hijitos”, como en realidad dice el texto griego. No es seguro que el diminutivo conlleve aquí un sentido especial, como han sugerido algunos comentaristas. Es mejor buscar un término equivalente para no dar la idea de que Jesús está hablando a sus propios hijos o que estaba tratando a los discípulos como niños. El término comunica más bien un sentido inmediato de afecto y cariño, cuya equivalencia puede ser “mis queridos compañeros”, “ustedes a quienes quiero mucho” o «mis amados compañeros» (TLA).

Aún estaré con vosotros un poco, “Por un poco más de tiempo estaré con ustedes” es una expresión similar a la de Jua 7:33. Aquí no hay un período de tiempo específico al que se aluda con la frase “por un poco de tiempo”. Jesús usa esta expresión seis meses antes de su crucifixión, mientras que aquí su crucifixión está por suceder en unas pocas horas. En algunos idiomas habrá que traducir esta frase indicando específicamente “pocas horas”, por ejemplo: “seguiré con ustedes sólo por unas pocas horas” o “dentro de unas breves horas ya no estaré con ustedes”.

El anuncio de su ida recoge lo que Jesús ya había dicho en Jua 7:33 y Jua 8:21 : «Les digo a ustedes lo mismo que les dije a los jefes judíos: No pueden ir a donde yo voy» (TLA), “Como ya dije a las autoridades judías, también se los repito a ustedes: donde yo voy ustedes no pueden ir”. Con el “también les digo a ustedes lo mismo” Jesús se refiere a su muerte y partida hacia el Padre. La condición de los discípulos es la misma que la de las autoridades judías, incapaces por sus medios de seguir el destino de Jesús.

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

Jua 7:33 (ver Jua 16:16; Jua 16:19).

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

m 801 Heb 2:13

n 802 Jua 7:34; Jua 8:21

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

Hijitos. La forma de expresión denota afecto personal y preocupación por ellos.

Fuente: La Biblia de las Américas

Adonde Yo voy…Jua 7:34.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

g Jua 7:34.

Fuente: La Biblia Textual III Edición