Biblia

Comentario de Juan 16:26 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Juan 16:26 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

En aquel día pediréis en mi nombre, y no os digo que yo rogaré al Padre por vosotros,

16:26, 27 En aquel día pediréis en mi nombre; y no os digo que yo rogaré al Padre por vosotros, pues el Padre mismo os ama (philei), porque vosotros me habéis amado, y habéis creído que yo salí de Dios. — Debemos pedir en el nombre de Jesús, porque el Padre mismo lo ha nombrado como Mediador (1Ti 2:5; Heb 7:25; 1Jn 2:2), pero Jesús no tiene que rogar al Padre para que nos ame, pues El nos ama porque amamos al Hijo y creemos que El vino del Padre. Es interesante observar que el Padre nos ama (philei), es decir, con el amor de afecto y de amistad (15:15). («O qué Amigo nos es Cristo»; y si Cristo es nuestro Amigo, el Padre también es nuestro Amigo).

«El no reconocer al Padre como la fuente de gracia, amor y misericordia ha llevado a la Iglesia Romana a grandes errores. Al sospechar que el Padre obra con rigor indebido, ha habido la misma sospecha con respecto al Hijo por causa de su cercanía al Padre. Por lo tanto, la Virgen María fue invocada para interceder con el Hijo y suavizar su obstinación. Desde la deificación de la Virgen María en 1853, ha habido desconfianza en ella también, y ha habido una tendencia a invocar a José para que interceda con María para que interceda con el Hijo para que interceda con el Padre. De esta manera el maravilloso amor del Padre que pasa todo entendimiento se hace menor que el amor de meros mortales» (JWM).

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

en aquel día pediréis en mi nombre. Jua 16:23.

yo rogaré al Padre por vosotros. Jua 14:16; Jua 17:9, Jua 17:19, Jua 17:24; Rom 8:34.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

en mi nombre significa mediante la autoridad de Cristo.

no os digo que yo rogaré al Padre por vosotros: Como Jesús provee el perdón de pecados mediante su muerte y ahora intercede por todos los creyentes a la diestra del Padre (Heb 7:25), podemos tener acceso directo al Padre. No necesitamos la intercesión de un sacerdote, porque Jesús actúa como nuestro sumo sacerdote ante Dios.

pues indica que el versículo Jua 16:27 explica el versículo previo. Después de la partida de Jesús, los discípulos podrán orar directamente a Dios el Padre, quien los ama porque creen en su Hijo Jesús y además lo aman.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

no os digo. Cristo aclara aquí lo que significaba la oración en su nombre. No se trata de pedirle a Él para que Él pida al Padre, como si el Padre fuera indiferente a los creyentes y no al Hijo. Antes bien, el Padre ama a los que son de Cristo. En efecto, el Padre envió al Hijo para redimirlos y luego regresar. Pedir en el nombre de Jesús significa pedir sobre la base de sus méritos y de su justicia, y procurar todo lo que le conceda honor y gloria para así edificar su reino.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

16:26, 27 En aquel día pediréis en mi nombre; y no os digo que yo rogaré al Padre por vosotros, pues el Padre mismo os ama (philei), porque vosotros me habéis amado, y habéis creído que yo salí de Dios. — Debemos pedir en el nombre de Jesús, porque el Padre mismo lo ha nombrado como Mediador (1Ti 2:5; Heb 7:25; 1Jn 2:2), pero Jesús no tiene que rogar al Padre para que nos ame, pues El nos ama porque amamos al Hijo y creemos que El vino del Padre. Es interesante observar que el Padre nos ama (philei), es decir, con el amor de afecto y de amistad (15:15). («O qué Amigo nos es Cristo»; y si Cristo es nuestro Amigo, el Padre también es nuestro Amigo).
«El no reconocer al Padre como la fuente de gracia, amor y misericordia ha llevado a la Iglesia Romana a grandes errores. Al sospechar que el Padre obra con rigor indebido, ha habido la misma sospecha con respecto al Hijo por causa de su cercanía al Padre. Por lo tanto, la Virgen María fue invocada para interceder con el Hijo y suavizar su obstinación. Desde la deificación de la Virgen María en 1853, ha habido desconfianza en ella también, y ha habido una tendencia a invocar a José para que interceda con María para que interceda con el Hijo para que interceda con el Padre. De esta manera el maravilloso amor del Padre que pasa todo entendimiento se hace menor que el amor de meros mortales» (JWM).

Fuente: Notas Reeves-Partain

En aquel día tiene su equivalencia en una oración temporal: “cuando ese día llegue”, que se refiere al tiempo mencionado en el v. Jua 16:25. Es la tercera vez que Jesús usa esta frase con sentido de futuro (cf. Jua 14:20; Jua 16:23, Jua 16:26). Posiblemente se refiera al día de la resurrección: “aquel día primero de la semana” (cf. Jua 20:1, Jua 20:19). Con pediréis en mi nombre traducen literalmente la mayoría de las versiones, pero sería mejor explicitar el complemento del verbo, refiriéndolo al Padre. “le pedirán al Padre porque son mis discípulos, y yo no digo que voy a rogar a él por ustedes”, y no os digo que yo rogaré al Padre por vosotros, «Y no necesito aseguraros que yo voy a interceder ante el Padre por vosotros» (BI), «Ya no hará falta que le ruegue a mi Padre por ustedes, sino que ustedes mismos le rogarán a él, porque son mis seguidores» (TLA).

En este versículo aparecen, como en el v. Jua 16:23, dos verbos sutilmente diferentes: “pedir” y “suplicar”. La comprensión es que la petición será concedida, y este hecho ya se establece en Jua 14:13. La última oración necesita más información porque es muy negativa y para no dar la idea que a Jesús no le interesa interceder por los que oran al Padre. La idea es que “en aquel día” ellos podrán pedir al Padre directamente a través de la ayuda del Espíritu. Se puede traducir en forma positiva así: “y les digo que no habrá necesidad de que yo ruegue entonces a él en favor de ustedes” o “y les aseguro que de ahora en adelante no hay necesidad de que yo ruegue al Padre por ustedes”.

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

pediréis en mi nombre. Véase coment. en 14:13 (cp. 16:23).

no os digo que yo rogaré. Jesús intercede por los creyentes (Ro 8:34; He 7:25); pero también es cierto que orar en el nombre de Jesús da acceso inmediato al Padre.

Fuente: La Biblia de las Américas

pediréis en mi nombre. Dirigirse al Padre mediante el Hijo ha sido desde entonces la práctica normal cristiana. Véase nota en Jua 14:13.

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie