Comentario de Juan 20:9 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Pues aún no entendían la Escritura, que le era necesario resucitar de entre los muertos.
20:9 Porque aún no habían entendido la Escritura, que era necesario que él resucitase de los muertos. — Una de las pruebas más importantes de la resurrección era la voz de la profecía. En el camino a Emaús los dos discípulos «se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba en el camino, y cuando nos abría las Escrituras?» (Luc 24:32). Jesús les abría las Escrituras cuando les explicó que en su muerte, sepultura y resurrección El las cumplió. «Porque no dejarás mi alma en el Seol, ni permitirás que tu santo vea corrupción» (Sal 16:10). De esta manera David profetizaba acerca del Hijo de David, como explica el apóstol Pedro (Hch 2:27). Los salmos profetizaban que Cristo sería exaltado para sentarse sobre su trono (el trono de David) (Sal 2:7-9; Hch 13:33). Véase también Isa 53:10-12. Jesús dijo a sus discípulos que el Hijo del Hombre «será entregado a los gentiles… y le matarán; mas al tercer día resucitará. Pero ellos nada comprendieron de estas cosas, y esta palabra les era encubierta, y no entendían lo que se les decía» (Luc 18:31-34). Jesús dijo a los judíos, «Destruid este templo, y en tres días lo levantaré… Por tanto, cuando resucitó de entre los muertos, sus discípulos se acordaron que había dicho esto; y creyeron la Escritura y la palabra que Jesús había dicho» (2:19-22). «Entonces les abrió el entendimiento, para que comprendiesen las Escrituras» (Luc 24:45).Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
aún no entendido la Escritura. Mat 16:21, Mat 16:22; Mar 8:31-33; Mar 9:9, Mar 9:10, Mar 9:31, Mar 9:32; Luc 9:45; Luc 18:33, Luc 18:34; Luc 24:26; Luc 24:44-46.
Que era necesario que él resucitase de los muertos. Sal 16:10; Sal 22:15, Sal 22:22; Isa 25:8; Isa 26:19; Isa 53:10-12; Ose 13:14; Hch 2:25-32; Hch 13:29-37; 1Co 15:4.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
no habían entendido la Escritura: Los discípulos creyeron debido a lo que vieron en la tumba (v. Jua 20:8), no debido a lo que conocían de los pasajes del AT. que describían la resurrección de su Salvador (Luc 24:25-27). Jesús profetizó su muerte y resurrección en presencia de sus discípulos, pero estos no entendieron lo que estaba hablando. Más tarde Jesús los instruiría sobre cómo su vida y muerte cumplieron las Escrituras (Luc 24:13-27, Luc 24:44-47).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
ERA NECESARIO QUE ÉL RESUCITASE. Véanse Mat 28:6, nota sobre la importancia de la resurrección de Cristo, y Luc 24:6, nota sobre la confirmación de la resurrección de Cristo.
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
no habían entendido la Escritura. Pedro y Juan no entendieron las Escrituras que declaraban la resurrección de Jesús (Sal 16:10). Esto se evidencia en el relato de Lucas (Luc 24:25-27; Luc 24:32; Luc 24:44-47). Jesús había profetizado su resurrección (Jua 2:19; Mat 16:21; Mar 8:31; Mar 9:31; Luc 9:22), pero ellos no lo admitían (Mat 16:22; Luc 9:44-45). En la época en la cual Juan escribió este Evangelio, la Iglesia había crecido en su comprensión de la resurrección profetizada del Mesías consagrada en el AT (cp. «aún»).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
20:9 Porque aún no habían entendido la Escritura, que era necesario que él resucitase de los muertos. — Una de las pruebas más importantes de la resurrección era la voz de la profecía. En el camino a Emaús los dos discípulos «se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba en el camino, y cuando nos abría las Escrituras?» (Luc 24:32). Jesús les abría las Escrituras cuando les explicó que en su muerte, sepultura y resurrección El las cumplió. «Porque no dejarás mi alma en el Seol, ni permitirás que tu santo vea corrupción» (Sal 16:10). De esta manera David profetizaba acerca del Hijo de David, como explica el apóstol Pedro (Hch 2:27). Los salmos profetizaban que Cristo sería exaltado para sentarse sobre su trono (el trono de David) (Sal 2:7-9; Hch 13:33). Véase también Isa 53:10-12.
Jesús dijo a sus discípulos que el Hijo del Hombre «será entregado a los gentiles… y le matarán; mas al tercer día resucitará. Pero ellos nada comprendieron de estas cosas, y esta palabra les era encubierta, y no entendían lo que se les decía» (Luc 18:31-34). Jesús dijo a los judíos, «Destruid este templo, y en tres días lo levantaré… Por tanto, cuando resucitó de entre los muertos, sus discípulos se acordaron que había dicho esto; y creyeron la Escritura y la palabra que Jesús había dicho» (2:19-22). «Entonces les abrió el entendimiento, para que comprendiesen las Escrituras» (Luc 24:45).
En el día de Pentecostés Pedro citó lo que la Escritura (Sal 16:10) había dicho acerca de Cristo, «Porque no dejarás mi alma en el Hades, ni permitirás que tu Santo vea corrupción» (Hch 2:26) y muchos creyeron, pero creyeron después del cumplimiento de la profecía.
La causa principal de la incredulidad en el mundo es que la gente no entiende o no cree lo que la Escritura dice. Si Juan y los otros apóstoles hubieran creído la Escritura (o si hubieran creído a Jesús), no habría sido necesario que vieran el sepulcro vacío, ni los lienzos y el sudario, ni a Jesús, pero ahora, por fin, habiendo visto este maravilloso fenómeno — el cumplimiento de la Escritura –, la mente de Juan capta el significado de la Escritura acerca de la resurrección de Jesús. Ahora para él (y después para los demás) la Escritura tendría un significado nuevo. Aunque tal vez durante toda la vida hubiera escuchado y leído la Escritura, apenas ahora la están entendiendo. Como Jesús había dicho, «Si no viereis señales y prodigios, no creeréis» (4:48).
Muchísimos hombres creen la profecía bíblica sólo cuando se cumpla. ¿Cuándo creyeron los contemporáneos de Noé la profecía acerca del diluvio? ¿Cuándo creyeron los israelitas infieles las profecías de Lev 26:1-46 y Deu 28:1-68? ¿Cuándo creyeron los judíos la profecía de Mat 24:2; Mat 24:21? La mayoría de ellos creyeron sólo cuando el evento predicho ocurrió. Nos preguntamos, ¿y cuántos creerán la profecía acerca del castigo eterno sólo cuando el Señor les diga en el Día Final, «apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles» (Mat 25:41) ? Dios ha exaltado a Cristo «para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre» (Flp 2:10-11). En realidad los que mueren en pecado se convencen inmediatamente (véase Luc 16:22-23).
— que era necesario que él resucitase de los muertos. — «Le era necesario… ser muerto, y resucitar al tercer día» (Mat 16:21). Era necesario que Cristo muriera (3:14) y también que resucitase
Fuente: Notas Reeves-Partain
Pues aún no habían entendido la Escritura: que era necesario que él resucitara de los muertos, “Por supuesto, ellos no sabían que según las Escrituras Jesús debía levantarse de entre los muertos”. Juan no especifica a qué texto de las Escrituras se refiere, aunque posiblemente esté pensando a todo el Antiguo Testamento. El versículo está conectado con la última oración del versículo anterior: “pues ellos no entendían todavía que de acuerdo con lo que estaba escrito, Jesús tenía que volver a vivir”. Aquí también es muy provechoso comparar algunas buenas propuestas de traducción de este versículo. Las BA y BI lo comunican como una aclaración de Juan, entre paréntesis: «(Y es que hasta entonces, los discípulos no habían entendido la Escritura, según la cual Jesús tenía que resucitar de entre los muertos)». Con su habitual precisión, traduce la TLA: «Antes de eso, los discípulos no habían entendido lo que dice la Biblia acerca de que Jesús tenía que volver a vivir».
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
(ver Sal 16:10); Luc 24:26-27; Luc 24:44-46; Hch 2:25-32; 1Co 15:4.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
h 1083 Sal 16:10; Isa 53:10; Mat 16:21; Jua 2:22; Hch 2:27; 1Co 15:4
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
todavía no habían entendido. Ellos no podían comprender la magnitud de lo que estaban presenciando, es decir, el cumplimiento de todas las promesas de Dios en las Escrituras, por medio del Cristo resucitado.
Fuente: La Biblia de las Américas
9 (1) El Señor no solamente es la vida, sino también la resurrección (11:25). Así que, la muerte no puede retenerlo ( Hch_2:24). El fue a la muerte voluntariamente para llevar a cabo Su obra. Cuando terminó Sumisión, salió de la muerte y resucitó.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
Lit., El
Fuente: La Biblia de las Américas
† Que Jesús se había levantado de los muertos.