Comentario de Juan 3:31 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

El que viene de arriba está por encima de todos. El que procede de la tierra es terrenal, y su habla procede de la tierra. El que viene del cielo está por encima de todos.

3:31 El que de arriba viene, es sobre todos (la supremacía de Cristo se ve en su origen); el que es de la tierra, es terrenal, y cosas terrenales habla (aun cosas que no convienen, Mat 11:2-3; Mat 18:1; Gál 2:11-14) ; el que viene del cielo, es sobre todos. — Jesús había de crecer porque había venido «de arriba» y, por lo tanto, «es sobre todos». Juan el bautista era un profeta muy importante (Mat 11:11), pero era «de la tierra».

Algunos dicen que los vers. 31-36 ya no son las palabras de Juan el bautista, sino las del apóstol (el escritor del libro), pero Juan el bautista era capaz de pronunciar estas verdades (compárense 1:26, 27, 29-36; 3:27-30; Mat 3:11-12).

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

El que de arriba viene. Jua 3:13; Jua 6:33; Jua 8:23; Efe 1:20, Efe 1:21; Efe 4:8-10.

sobre todos es. Jua 1:15, Jua 1:27, Jua 1:30; Jua 5:21-25; Mat 28:18; Hch 10:36; Rom 9:5; Efe 1:21; Flp 2:9-11; 1Pe 3:22; Apo 19:16.

el que es de la tierra. Jua 3:12; 1Co 15:47, 1Co 15:48; Heb 9:1, Heb 9:9, Heb 9:10.

el que viene del cielo. Jua 6:33, Jua 6:51; Jua 16:27, Jua 16:28.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

El que de arriba viene alude a Jesucristo.

el que es de la tierra alude a Juan el Bautista. Juan enfatizó su origen y limitaciones terrestres. Él proclamó la verdad divina en la tierra; por otro lado, Jesús es del cielo y sobre todos.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

sobre todos. Estos versículos consolidan varios temas de todo el capítulo. A partir del contexto inmediato, Juan explicó por qué Jesús el Verbo encarnado debía crecer hasta ser el más grande de todos: porque solo Él viene «de arriba» (su origen celestial), por ende es el único que «es sobre todos». El término griego que se traduce «sobre todos» recuerda el v. Jua 3:3, donde el nuevo nacimiento «de lo alto» solo puede experimentarse por fe en aquel quien es «de arriba». A diferencia de Él, todos los demás son «de la tierra» finitos y limitados por naturaleza. En el contexto inmediato, Juan el Bautista tenía que menguar (v. Jua 3:30) porque era «de la tierra» y pertenecía a la tierra. Aunque llamó al arrepentimiento y el bautismo, Juan no podía revelar el consejo celestial como Jesús, quien era Dios hecho hombre.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

En estos versículos Juan el Bautista presentó cinco razones para reconocer la superioridad de Cristo sobre él: 1) Cristo era de origen celestial (v. Jua 3:21), 2) Cristo conocía lo verdadero por experiencia propia y de primera mano (v. Jua 3:32), 3) el testimonio de Cristo siempre estuvo de acuerdo con Dios (v. Jua 3:33), 4) Cristo experimentó el Espíritu Santo de una forma ilimitada (v. Jua 3:34) y 5) Cristo era supremo porque el Padre en su soberanía le había concedido tal preponderancia a Él (v. Jua 3:35).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

3:31 El que de arriba viene, es sobre todos (la supremacía de Cristo se ve en su origen); el que es de la tierra, es terrenal, y cosas terrenales habla (aun cosas que no convienen, Mat 11:2-3; Mat 18:1; Gál 2:11-14) ; el que viene del cielo, es sobre todos. — Jesús había de crecer porque había venido «de arriba» y, por lo tanto, «es sobre todos». Juan el bautista era un profeta muy importante (Mat 11:11), pero era «de la tierra».
Algunos dicen que los vers. 31-36 ya no son las palabras de Juan el bautista, sino las del apóstol (el escritor del libro), pero Juan el bautista era capaz de pronunciar estas verdades (compárense 1:26, 27, 29-36; 3:27-30; Mat 3:11-12).

Fuente: Notas Reeves-Partain

EL QUE HA VENIDO DEL CIELO

Juan 3:31-36

EL Que viene de Arriba está por encima de todos. El que procede de la Tierra es de la Tierra y habla de la Tierra. El Que procede del Cielo está por encima de todos: lo que atestigua es lo que ha visto y oído, y no reciben Su testimonio; pero los que reciben Su testimonio autentican que Dios es veraz. El Que Dios ha enviado habla la Palabra de Dios, porque Dios no Le asigna el Espíritu con una medida escasa. El Padre ama al Hijo, y lo ha dejado todo en Sus manos. El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que no cree en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios permanece sobre él.

Como ya hemos visto, una de las dificultades del Cuarto Evangelio es saber cuándo hablan los personajes y cuándo es Juan el que añade el comentario. Estos versículos puede que contengan las palabras de Juan el Bautista; pero parece más bien que son el testimonio y comentario del evangelista.
Juan empieza por afirmar la supremacía de Jesús. Si queremos información, tenemos que acudir a la persona que la tiene. Si queremos información acerca de una familia, la obtendremos de primera mano solamente de uno de los miembros de esa familia. Si queremos información sobre una ciudad, la recibiremos de primera mano sólo de alguien que viva o haya estado allí. De la misma manera, si queremos información acerca de Dios, sólo la podremos obtener del Hijo de Dios; y si la queremos acerca del Cielo y de la vida que se vive allí, sólo la podremos recibir del Que vino de allí. Cuando Jesús habla de Dios y de las cosas celestiales, dice Juan, no habla de segunda mano, sino nos cuenta lo que ha oído y visto por Sí mismo. Para decirlo simplemente, como Jesús es el único que conoce a Dios, es el único que puede comunicarnos los Hechos acerca de Dios, y eso es lo que es el Evangelio.
Lo que le da pena a Juan es que sean tan pocos los que acepten el Mensaje que nos ha traído Jesús; pero, cuando uno lo recibe, atestigua el hecho de que en su fe la Palabra de Dios es verdad. En el mundo antiguo, si una persona quería autenticar un documento como, por ejemplo, un testamento o un tratado, le ponía su sello al pie. Ese sello era la señal de que él estaba de acuerdo con el contenido del documento y lo consideraba fidedigno y efectivo. De la misma manera, cuando alguien acepta el Evangelio, afirma y pone su sello atestiguando que cree que lo que Dios dice es cierto.
Y Juan prosigue: podemos creer lo que nos dice Jesús porque Dios derramó en Él Su Espíritu en plenitud, sin reservarse nada. Hasta los mismos judíos decían que los profetas recibían de Dios una cierta medida del Espíritu. La totalidad del Espíritu estaba reservada para el Escogido de Dios. Ahora bien: según la manera de pensar de los judíos, el Espíritu de Dios tenía dos misiones: la primera era revelar a la humanidad la verdad de Dios; y la segunda, capacitar a los seres humanos para reconocer y entender esa verdad cuando venía a ellos. El decir que el Espíritu estaba en Jesús de la manera más completa es decir que Jesús conocía y entendía perfectamente la verdad de Dios. Para decirlo de otra manera: escuchar a Jesús es escuchar la misma voz de Dios.

Por último, Juan nos presenta otra vez la alternativa eterna, la vida o la muerte. A lo largo de todo su historia, Dios le había presentado al pueblo de Israel esta gran elección. Deuteronomio conserva las palabras de Moisés: » Mira: yo te he puesto delante hoy la vida y el bien, la muerte y el mal… A los cielos y a la Tierra invoco por testigos contra vosotros hoy de que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; por tanto, escoge la vida, para que viváis tú y tu descendencia» (Dt 30:15-20 ). Y Josué reiteró el desafío: » Escogeos hoy a quién sirváis» (Jos 24:15 ). Se ha dicho que toda la vida se concentra en las encrucijadas. Una vez más, Juan vuelve a su tema favorito: lo que importa es nuestra reacción a Cristo. Si esa reacción es amor y anhelo, esa persona conocerá la vida. Si es indiferencia u hostilidad, esa persona no cosechará más que la muerte. No es que Dios descargue Su ira sobre ella; es que ella se la atrae sobre sí misma.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento

b. El que viene de Dios (vv. Jua 3:31-36)

Análisis de discurso

De nuevo el traductor se enfrenta al problema de identificar quién es aquí el narrador (cf. Jua 3:14 ss). Los eruditos bíblicos se plantean tres posibilidades: (1) Juan Bautista, ya que él fue la última persona que habló, claramente identificado, según vv. Jua 3:27-30. Si esto es así, entonces el Bautista sigue el contraste entre él mismo y Jesús. (2) Jesús es quien habla en esta sección, como una continuación del diálogo con Nicodemo. (3) Es posible que el autor del evangelio sea quien hable aquí, haciendo una especie de reflexión sobre lo dicho por el Bautista. En algunos idiomas receptores es menos problemático aceptar que este discurso pertenece a la redacción del mismo evangelista, o por lo menos que es continuación de las palabras de Juan Bautista. En realidad no es posible resolver el enigma, además de que en este caso no es tan importante para apreciar la importancia teológica del texto.

TÍTULO: Se ha titulado sencillamente El que viene de arriba (RV60, RV95, DHH) y El que viene del cielo (BA). Algo más específico quedaría con El que viene de Dios, ya que tanto arriba como cielo aluden a Dios. En algunas versiones como TLA estos vv. forman parte de la unidad anterior (Jua 3:22-36).

Análisis textual y morfosintáctico

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

El que viene de arriba (v. Jua 3:31) obviamente es una clara referencia al «que viene del cielo» (TLA); en otras palabras: «que viene de Dios» (BI) (cf. Jua 3:3 en este manual). El que está por encima que todos se entiende como “que está por encima de todas las personas” o, aún mejor: “el que es más importante que todas las personas”, «es más importante que todos nosotros» (TLA).

Una traducción literal de la segunda parte del versículo puede crear confusión. “El que viene de la tierra” en algunas culturas se puede entender como “el que viene de debajo, de los poderes demoníacos” o simplemente quedar confuso. Hablar de asuntos terrenales se entiende como de “las cosas que pasan aquí en la tierra” o “habla desde acá abajo en la tierra”. La tierra tiene un carácter neutral en una traducción de Juan, contrario a “mundo”, el cual se presenta a menudo en oposición a Dios.

Al final de este versículo hay un problema textual. En el texto griego la expresión “es más importante que todos” o “está por encima de todos” es incluido como parte del texto y se coloca un punto final en el versículo, como lo hacen la mayoría de las versiones. Pero es posible que la oración no formaba parte del texto original. En este caso, la última parte del v. Jua 3:31 y el principio del v. Jua 3:32 se leería así: “el que viene de Dios de lo que ha visto y oído personalmente de eso testifica”. La cuestión es si se adopta la lectura breve o la larga. En otras palabras, si hay omisión o inclusión en la traducción de esta oración. Las propuestas El que viene del cielo está por encima de todos, y de lo que ha visto y oído testifica y «El que viene del cielo es más importante, y habla de lo que ha visto y oído en el cielo» (TLA) son fieles al texto original y expresan la idea con mucha claridad.

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

— el que viene de lo alto: No es fácil precisar con quién debe relacionarse este pasaje (vv. Jua 3:31-36). Unos comentaristas lo consideran continuación del testimonio de Juan el Bautista; otros lo relacionan con las palabras de Jesús a Nicodemo en Jua 3:19-21; y otros, en fin, piensan que se trata de una reflexión del propio evangelista.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Jua 8:23; 1Jn 4:5.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

NOTAS

(1) O: “todas las cosas”.

REFERENCIAS CRUZADAS

a 164 Jua 8:23

b 165 1Jn 4:5

c 166 Mat 3:11

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

El…está sobre todos. Jesús tiene preeminencia sobre toda la creación, incluyendo a Juan y a su ministerio.

Fuente: La Biblia de las Américas

31 (1) Los vs.31-36 nos reveían lo ilimitado e inmensurable de Cristo. El es inmensurable e ilimitado, quien vino de arriba y está por encima de todos, al cual el Padre le ha dado todo, y quien dispensa el Espíritu sin medida. Este Cristo necesita un aumento universal para que sea Su novia y Su complemento, tal como se revela en los vs. 22-30. El que cree en el Cristo inmensurable tiene vida eterna; el que le desobedece está bajo la ira de Dios.

31 (2) Procede de, de y, viene de son la misma palabra griega. Ya que las personas, asuntos y cosas que están en la tierra proceden de la tierra, de la tierra son. El que viene del cielo se refiere al que procede del cielo; por lo tanto, tal persona es celestial.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

Este versículo reanuda el pensamiento de Jua 3:13.

El que de arriba viene es el Hijo del Hombre.

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie

R5098 Ἐκ denota la idea de origen o fuente.

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego

Lit., es

Fuente: La Biblia de las Américas

§ O “está encima” en el sentido de autoridad.

Fuente: Versión Biblia Libre del NuevoTestamento