Biblia

Comentario de Juan 6:13 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Juan 6:13 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Recogieron, pues, y llenaron doce canastas de pedazos de los cinco panes de cebada que sobraron a los que habían comido.

6:13 Recogieron, pues, y llenaron doce cestas (canastos de mimbre) de pedazos, que de los cinco panes de cebada sobraron a los que habían comido. — Después de alimentar la multitud, no tenían cinco panes y dos pececillos, sino doce canastos de comida.

¿Cómo explican este milagro los modernistas (incrédulos) ? Dicen que la lección aquí es que un muchacho pobre compartió su comida con otros y que su falta de egoísmo y su espíritu benévolo provocaba a los demás a hacer lo mismo para que hubiera suficiente comida para todos. Si esto hubiera sido lo que en realidad sucediera, nadie habría pensado que Jesús era el Profeta.

Dice el modernista William Barclay, «Nunca sabremos con exactitud qué fue lo que sucedió en esa verde planicie de Betsaida Julia. Podemos verlo en tres formas. (a) Podemos verlo simplemente como un milagro… (b) Puede ser que en realidad se haya tratado de una comida sacramental… lo que cada persona recibió no fue más que un fragmento, como en el sacramento… (c) Puede haber otra explicación, muy hermosa. No se debe pensar que la multitud emprendió una expedición de catorce kilómetros sin hacer ningún preparativo. Si entre ellos había peregrinos, sin duda tendrían provisiones para el viaje. Pero puede ser que ninguno de ellos haya querido ofrecer lo que tenía, porque con todo egoísmo

— y muy humanamente — querían guardar todo para sí. Puede ser que Jesús, con su extraña sonrisa, sacó la pequeña provisión que tenía con sus discípulos, con una fe radiante dio gracias a Dios por ella y la compartió con todos. Conmovidos por su ejemplo, todos los que tenían algo lo imitaron; y al final hubo comida suficiente, y más que suficiente, para todos». Esta «explicación» es pura incredulidad. Barclay admite que «podemos verlo como milagro», pero así hablan los modernistas (incrédulos): para ellos, esta explicación es aceptable, pero luego dan otras dos explicaciones que son incorrectas. De esta manera, rechazan la verdad.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

llenaron doce cestas. 1Re 7:15, 1Re 7:16; 2Re 4:2-7; 2Cr 25:9; Pro 11:24, Pro 11:25; 2Co 9:8, 2Co 9:9; Flp 4:19.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

6:13 Recogieron, pues, y llenaron doce cestas (canastos de mimbre) de pedazos, que de los cinco panes de cebada sobraron a los que habían comido. — Después de alimentar la multitud, no tenían cinco panes y dos pececillos, sino doce canastos de comida.
¿Cómo explican este milagro los modernistas (incrédulos) ? Dicen que la lección aquí es que un muchacho pobre compartió su comida con otros y que su falta de egoísmo y su espíritu benévolo provocaba a los demás a hacer lo mismo para que hubiera suficiente comida para todos. Si esto hubiera sido lo que en realidad sucediera, nadie habría pensado que Jesús era el Profeta.
Dice el modernista William Barclay, «Nunca sabremos con exactitud qué fue lo que sucedió en esa verde planicie de Betsaida Julia. Podemos verlo en tres formas. (a) Podemos verlo simplemente como un milagro… (b) Puede ser que en realidad se haya tratado de una comida sacramental… lo que cada persona recibió no fue más que un fragmento, como en el sacramento… (c) Puede haber otra explicación, muy hermosa. No se debe pensar que la multitud emprendió una expedición de catorce kilómetros sin hacer ningún preparativo. Si entre ellos había peregrinos, sin duda tendrían provisiones para el viaje. Pero puede ser que ninguno de ellos haya querido ofrecer lo que tenía, porque con todo egoísmo — y muy humanamente — querían guardar todo para sí. Puede ser que Jesús, con su extraña sonrisa, sacó la pequeña provisión que tenía con sus discípulos, con una fe radiante dio gracias a Dios por ella y la compartió con todos. Conmovidos por su ejemplo, todos los que tenían algo lo imitaron; y al final hubo comida suficiente, y más que suficiente, para todos». Esta «explicación» es pura incredulidad. Barclay admite que «podemos verlo como milagro», pero así hablan los modernistas (incrédulos): para ellos, esta explicación es aceptable, pero luego dan otras dos explicaciones que son incorrectas. De esta manera, rechazan la verdad.

Fuente: Notas Reeves-Partain

La realización del milagro y la abundancia se determinan por los doce canastos. Recogieron, pues, «ellos los recogieron» (DHH). El texto no dice qué recogieron, pero se sobreentiende que reunieron todos los pedazos. Lo sobrante tiene una carga teológica en Juan que alude de nuevo a la distancia con Eliseo, quien dio de comer a cien hombres y hubo de sobra (cf. 2Re 4:43, 2Re 4:44). Una traducción más específica sería: “Entonces los discípulos recibieron de la gente pedazos sobrantes que reunieron en doce canastos”. Por supuesto, si se acepta que los pedazos seguían sirviendo y que no eran desperdicios.

No se dice nada respecto de lo que sobró de los pescados. Tampoco se especifica en el texto el tipo ni el tamaño de las cestas. En algunas culturas se usan cestos, en otras canastas o canastos.

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

REFERENCIAS CRUZADAS

m 303 Mat 14:20; Mar 6:43; Luc 9:17

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

13 super (1) Las doce cestas de pedazos que sobraron representan las rebosantes riquezas del suministro de vida de Cristo. Los cinco panes, que representan este suministro, no solamente alimentaron mil veces ese número, o sea cinco mil personas, sino que también proveyeron lo suficiente para que sobrara.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

cinco… doce… → §170 (Núm 5:1-31 y Núm 12:1-16).

Fuente: Biblia Textual IV Edición