Comentario de Juan 7:18 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

El que habla de sí mismo busca su propia gloria; pero el que busca la gloria del que le envió, éste es verdadero, y en él no hay injusticia.

7:18 El que habla por su propia cuenta, su propia gloria busca; pero el que busca la gloria del que le envió, éste es verdadero, y no hay en él injusticia. — Jesús no habló por su propia cuenta, como si fuera independiente del Padre, con un mensaje personal que no estuviera de acuerdo con la voluntad del Padre o que contradijera la enseñanza del Padre. Si lo hubiera hecho, no habría buscado la gloria del Padre sino su propia gloria, pero Cristo era verdadero y en El no había injusticia, porque había perfecta armonía entre la enseñanza de El y la voluntad del Padre; de hecho, era una sola voluntad, y una sola enseñanza.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

El que habla de sí mismo. Jua 5:41; Jua 8:49, Jua 8:50; 1Co 10:31-33; Gál 6:12-14; Flp 2:3-5; 1Ts 2:6; 1Pe 4:11.

su propia gloria busca. Jua 3:26-30; Jua 11:4; Jua 12:28; Jua 13:31, Jua 13:32; Jua 17:4, Jua 17:5; Éxo 32:10-13; Núm 11:29; Pro 25:27; Mat 6:9.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

es verdadero: La prueba de un maestro es si entrega el mensaje de Dios. Jesús dio el mensaje de Dios, también Moisés. Los líderes religiosos estaban rompiendo la ley de Moisés al tratar de matar a Jesús.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

SU PROPIA GLORIA. Jesús destaca un criterio de suma importancia para probar si un predicador religioso es o no es de Dios: ¿Busca su propia gloria o progreso? Al evaluar a los ministros, hay que preguntarse si lo que predican los ensalza a ellos o a Cristo.

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

el que busca la gloria del que le envió. A diferencia de otros «salvadores» y «héroes mesiánicos» que actuaban conforme a sus propios intereses egoístas, con lo cual evidenciaban su falsedad, Jesucristo como Hijo de Dios vino de manera única y exclusiva para glorificar al Padre y hacer la voluntad del Padre (2Co 2:17; Flp 2:5-11; Heb 10:7).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

7:18 El que habla por su propia cuenta, su propia gloria busca; pero el que busca la gloria del que le envió, éste es verdadero, y no hay en él injusticia. — Jesús no habló por su propia cuenta, como si fuera independiente del Padre, con un mensaje personal que no estuviera de acuerdo con la voluntad del Padre o que contradijera la enseñanza del Padre. Si lo hubiera hecho, no habría buscado la gloria del Padre sino su propia gloria, pero Cristo era verdadero y en El no había injusticia, porque había perfecta armonía entre la enseñanza de El y la voluntad del Padre; de hecho, era una sola voluntad, y una sola enseñanza.

Fuente: Notas Reeves-Partain

El que habla por su propia cuenta es la misma frase anterior, sólo que aquí está en tercera persona. También se puede traducir así: “La persona que insiste en que sus palabras son originales busca conseguir su propio prestigio”. Su propia gloria se entiende como “su propia fama”, “vanagloria”, “honor” o “prestigio”. La CEV traduce el versículo siguiendo la primera persona del versículo anterior, es decir, para esta versión el sujeto aquí es Jesús quien sigue refiriéndose a sí mismo, y se aparta así de la tercera persona del texto: «Si yo busco honor para mí mismo, yo hablaría de mí mismo». En este sentido se ve más clara la continuidad con el mismo sujeto, en lugar del sentido general en tercera persona: «Quien habla por su propia cuenta sólo quiere que la gente lo admire» (TLA).

La segunda parte del versículo es un gran contraste iniciado con “pero”: “Pero la persona que quiere la fama majestuosa para el que le envió, es una persona honesta y sin falsedad” o también “Pero quien desea que la persona que le envió reciba todo el prestigio honroso, es justo e intachable”. Otra forma de estructurar esta segunda oración pudiera ser en forma condicional: “Si una persona busca la fama para quien la envió, dicha persona es honesta y sin falsedad”. Sólo que con la forma condicional el sentido es más amplio que con el contraste encabezado con “pero”. Las palabras “verdadero” y “falsedad” tienen un amplio repertorio de significados. “Verdadero” puede ser “honesto”, “íntegro”, “genuino”, “sincero”, “confiable”. En contraste, “falsedad” es “injusticia”, “deshonestidad”, “mentira”: «pero quien busca la gloria del que lo envió, ese dice la verdad y en él no hay nada reprochable» (DHH).

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

Jua 8:50.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

r 389 Jua 5:41; Jua 8:50

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

R762 El artículo τήν se repite con el adjetivo para indicar un significado especial (comp. Jua 1:9 y Jua 6:70): su propia gloria (en oposición a la gloría de Dios).

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego