Comentario de Judas 1:8 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
De la misma manera, también estos soñadores mancillan la carne, rechazan toda autoridad y maldicen las potestades superiores.
v. 8 — Véase 2Pe 2:10. «de la misma manera». Dice Judas que de la manera que los de Sodoma y Gomorra se portaban, así también los falsos maestros del momento. Como aquellos no admitieron advertencia, tampoco éstos. Como aquellos fueron castigados, así serán éstos. «estos soñadores». Literalmente, «estos tomados de un sueño profundo». Significa este verbo, enupniadzo, metafóricamente, «ser engañados por medio de pensamientos sensuales y llevados a un curso impío de conducta». Véanse Rom 13:11 y 1Ts 5:6, donde el «sueño» simboliza el estado de no estar alerta y sobrios, sino engañados en el pecado.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
estos soñadores. Jer 38:25-28.
mancillan la carne. 1Co 3:17; 1Ti 1:10; 2Pe 2:10-12.
rechazan la autoridad. Gén 3:5; Núm 16:3, Núm 16:12, Núm 16:13, 1Sa 10:27; Sal 2:1-6; Sal 12:3-4; Luc 19:14; Hch 7:27, Hch 7:39; 1Ts 4:8; Heb 13:17.
blasfeman de las potestades superiores. Jud 1:9, Jud 1:10; Éxo 22:28; Pro 30:11, Pro 30:17; Ecl 10:20; Hch 23:5; 1Pe 2:17.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Los falsos maestros eran arrogantes y tenían su propia agenda. No fueron ordenados por la Iglesia ni llamados por el Espíritu Santo. Judas le dio el nombre de soñadoras a estas personas impías, tal vez porque pedían la revelación divina, pero más precisamente porque negaban al Señor y por lo tanto vivían en un mundo irreal de engaños. Creaban su propio mundo falso, en el cual dedicarse a la inmoralidad iba mano a mano con la salvación.
rechazan la autoridad y blasfeman de las potestades superiores: Estos falsos maestros rechazaban a los que estaban en cargos de la autoridad en las congregaciones locales. No sólo preferían el error a la verdad, sino que también se degradaban y rechazaban a quienes les enseñaban la verdad.
EN CONTEXTO
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El uso de fuentes apócrifas
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Los Apócrifos judíos constan de libros y escritos que nunca se reconocieron como parte del canon de las Escrituras, pero para muchos creyentes de la antigüedad tenían un propósito piadoso, incluso para algunos de los autores del NT. (En esta carta Judas cita dos de los libros Apócrifos.) Aparentemente Jud 1:9 viene de La asunción de Moisés y el v. Jud 1:14 viene del Libro de Enoc. Hoy no tenemos un texto completo de La Asunción de Moisés, pero dos antiguos padres de la Iglesia, Clemente de Alejandría y Orígenes, testifican que el v. Jud 1:9 es una referencia a este libro.
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Judas no es el único autor del NT. que cita fuentes adicionales a la Biblia. En 1Co 10:4 Pablo aparentemente hizo uso de un comentario hebreo (el Midrash) para apoyar su interpretación de las peregrinaciones de los israelitas en el desierto. En Hch 17:28 y Tit 1:12, citó a poetas paganos para apoyar algunas de sus aseveraciones. Aunque no sabemos de dónde vienen los nombres de Janes y Jambres (2Ti 3:8), Pablo no vaciló en usar su historia como un ejemplo de impiedad para Timoteo.
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¿Debieron citar las fuentes apócrifas los autores del NT. Seguramente Dios no tuvo problemas en guiar a los escritores bíblicos para seleccionar material de esas fuentes. Lucas conocía «muchos» relatos de la vida de Cristo (Luc 1:1), con los cuales mejoró su «relato ordenado» (Luc 1:1). En la misma línea, Pablo tuvo por lo menos una carta de la iglesia de Corinto para guiar sus respuestas en 1 y 2 Corintios. Hasta en Mat 4:3, Mat 4:6, Mat 4:9 se cita al diablo. Esto no quiere decir que estas fuentes estén inspiradas ni que sean exactas, pero sí quiere decir que algunas veces los autores de NT. extrajeron de las fuentes escritas que Dios les dio para comunicar eficazmente lo que Él quería que dijeran. Los autores de las Escrituras escribieron todo, y solamente, lo que Dios les inspiró que dijeran. Debemos afirmar con Pedro que el origen último de las Escrituras está en la mente de Dios (2Pe 1:19-21).
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Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
RECHAZAN LA AUTORIDAD. Véase 2Pe 2:10, nota.
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
estos soñadores. Vea las notas sobre 2Pe 2:10-12. Esto se refiere a un estado confuso del alma O a una imaginación anormal que produce alucinaciones y trastorno sensual. La mente de cada uno de estos hombres era tan insensible a la verdad de la Palabra de Dios que solo se dedicaban a fantasías perversas y delirios insidiosos, por lo cual quedaban ciegos y sordos a toda realidad y verdad. Quizás afirmaban con atrevimiento que estos sueños y visiones provenían de Dios. «Estos» ocurre cinco veces más (vv. Jud 1:10; Jud 1:12; Jud 1:14; Jud 1:16; Jud 1:19) en referencia a los apóstatas, quienes se caracterizan por tres cosas (v. Jud 1:8). mancillan la carne. De manera similar a los habitantes de Sodoma y Gomorra (v. Jud 1:7) los apóstatas tienen muy pocas, si acaso alguna restricción moral, por eso se caracterizan por un estilo de vida inmoral y desenfrenado (v. Jud 1:4). Cp. Tit 1:15; Heb 12:15; 2Pe 2:10-19; 2Pe 3:3. rechazan la autoridad. Como los ángeles pecadores (v. Jud 1:6) estos farsantes rechazaban toda autoridad civil y espiritual, de tal modo que rechazaban las Escrituras y negaban a Cristo (v. Jud 1:4). blasfeman … potestades superiores. Cp. el v. Jud 1:10. Estas potestades O dignatarios (Lit. «glorias») son ángeles, como lo confirma la ilustración en el v. Jud 1:9.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
v. 8 — Véase 2Pe 2:10. «de la misma manera». Dice Judas que de la manera que los de Sodoma y Gomorra se portaban, así también los falsos maestros del momento. Como aquellos no admitieron advertencia, tampoco éstos. Como aquellos fueron castigados, así serán éstos.
«estos soñadores». Literalmente, «estos tomados de un sueño profundo». Significa este verbo, enupniadzo, metafóricamente, «ser engañados por medio de pensamientos sensuales y llevados a un curso impío de conducta». Véanse Rom 13:11 y 1Ts 5:6, donde el «sueño» simboliza el estado de no estar alerta y sobrios, sino engañados en el pecado.
«mancillan la carne». Andan entregados a las pasiones y apetitos carnales (Rom 1:26 –; Efe 4:19; Efe 4:22; Efe 5:11-12; 1Ts 4:5; Apo 2:14-15; Apo 2:20; Apo 2:24).
«rechazan la autoridad». No tienen ningún respeto por los gobiernos y no se someten a ellos, como tampoco por la autoridad espiritual de Dios en su Palabra. Son rebeldes en todo sentido.
«blasfeman de las autoridades superiores». Literalmente, «blasfeman de las glorias»; es decir, de los que poseen la gloria del oficio gubernamental. Estos consideraban ser enemigos de su libertinaje los gobernadores y demás hombres de autoridad y de la ley, y los poderes celestiales o dignidades angélicas.
Fuente: Notas Reeves-Partain
EL DESPRECIO A LOS ÁNGELES
Judas 1:8-9
De la misma manera, estos también contaminan la carne con sus sueños, y menosprecian a los poderes celestiales, y hablan mal de las glorias angélicas. Cuando el arcángel Miguel mismo estaba disputando con el diablo el cuerpo de Moisés, no se aventuró a lanzar contra él una acusación condenatoria, sino dijo simplemente: » ¡Qué el Señor te reprenda!»
Judas empieza este pasaje comparando a los hombres malvados con los falsos profetas a los que la Escritura condena. Dt 13:1-5 establece lo que se ha de hacer con «un profeta o soñador de sueños» que corrompa a la nación y aparte al pueblo de su lealtad a Dios. Tal profeta debe morir irremisiblemente. Estos hombres a los que Judas ataca son falsos profetas, soñadores de falsos sueños, seductores del pueblo, y han de ser tratados como tales. Su falsa enseñanza producía dos resultados.
(i) Les hacía contaminar la carne. Ya hemos visto la doble dirección de su enseñanza sobre la carne. Primero, la carne era totalmente mala, y por tanto no tenía ninguna importancia; así es que los instintos del cuerpo se podían satisfacer sin ningún control. Segundo, la gracia de Dios lo perdonaba todo; y, por tanto, el pecado no importaba, puesto que la gracia perdonaba todos los pecados. El pecado no era más que un medio para que la gracia tuviera oportunidad de obrar.
(ii) Despreciaban a los ángeles. Los poderes celestiales y las glorias angélicas eran rangos en la jerarquía angélica. Esto sigue inmediatamente después de la referencia a Sodoma y Gomorra como ejemplos terribles; y parte del pecado de Sodoma fue el deseo de sus habitantes de abusar de los visitantes angélicos (Ge 19:1-11 ). Los hombres que Judas ataca hablaban mal de los ángeles. Para demostrar lo terrible que eso era cita Judas un ejemplo del libro apócrifo La Asunción de Moisés. Una de las cosas que extrañan de Judas son las citas de los libros apócrifos. A nosotros nos sorprenden; pero esos libros se usaban ampliamente en el tiempo en que Judas estaba escribiendo, y las citas que se hicieran de ellos serían muy efectivas.
El relato de La Asunción de Moisés es como sigue. La historia sorprendente de la muerte de Moisés se encuentra en Dt 34:1-6 . La Asunción de Moisés sigue el tema hablando de la tarea de enterrarle, que se le confió al arcángel Miguel. El diablo le disputó a Miguel la posesión del cuerpo de Moisés. Basaba su pretensión en dos razones. Primera, que el cuerpo de Moisés era materia; la materia era mala; y, por tanto, le pertenecía a él, porque la materia era su dominio. Segunda, que Moisés era un asesino, porque había matado al egipcio que estaba maltratando al hebreo (Ex 2:11 s). Y, si era un asesino, el diablo tenía derecho a su cuerpo. La lección que Judas ve en esto es que Miguel estaba ocupado en una tarea que le había asignado Dios; el diablo estaba tratando de impedírselo, presentando unos derechos que en realidad no tenía. Pero, hasta en un conjunto de circunstancias así, Miguel no habló mal del diablo, sino simplemente le dijo: «¡Que el Señor te reprenda!» Si el más importante de los ángeles buenos se negó a hablar mal del mayor de los ángeles malos, hasta en circunstancias tales, no hay duda que ningún ser humano puede hablar mal de ningún ángel.
Lo que estaban diciendo acerca de los ángeles los hombres que Judas está atacando, no lo sabemos. Tal vez decían que no existían; o que eran malos. Este pasaje no tiene mucho sentido para nosotros; pero sin duda contenía una seria reprensión para aquellos a los que Judas se lo dirigió.
Fuente: Comentario al Nuevo Testamento
— la autoridad del Señor: El texto griego dice simplemente: la soberanía, pero parece indudable que se refiere al poder de Cristo.
— seres gloriosos: Por el contexto parece que la expresión debe entenderse no sólo de los ángeles que se mantuvieron fieles a Dios, sino también de los ángeles pecadores, es decir, del diablo y los suyos (ver 2Pe 2:10).
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
2Pe 2:10.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
Denuncia de Los Falsos Maestros
Jud. pasa ahora de los ejemplos del pasado a los falsos maestros del presente y muestra cómo están siguiendo los mismos peligrosos senderos. Los israelitas contaminaron sus cuerpos, los ángeles rechazaron la autoridad, y la gente de Sodoma y Gomorra agravió a los seres celestiales. Esto último es algo que no hizo ni siquiera Miguel aunque tenía justificación para ello. Prefirió dejar a Dios que tra tara con ellos. Esos falsos maestros pueden burlarse de las cosas que no entienden, pero entienden lo suficiente como para ser responsables de su propia ruina. De ese modo Judas vuelve a declarar su condenación, ya que están siguiendo tres malos ejemplos: Caín, que no mostró respeto por su hermano, que fue hecho a la imagen de Dios; Balaam, que hizo desviar a Israel buscando ganancias personales; y Coré, quien rechazó la autoridad de Dios ejercida por medio de Moisés.
Así se les culpa por perturbar la fraternidad cristiana con su servicio desvergonzado, siendo falsos pastores que se preocupan sólo por sí mismos, sin lo grar cumplir lo que prometen, tal como ocurre con las nubes sin lluvia o los árboles sin fruto, tan fuera de toda la ley como los mares sacudidos por tormentas, produciendo sólo caos y siendo estrellas errantes, dando dirección imprecisa, y que por lo mismo están condenadas a perder su función. Buena parte de esta denuncia nos recuerda las palabras de Pedro en 2 Ped. 2:10-17.
8 De la misma manera expresa la sorpresa de que, a pesar de como Dios castigó a los obradores de maldad en el pasado, estos hombres aún se atreven a seguir sus impíos ejemplos. Soñadores sugie re que pueden haber pretendido que recibían sus enseñanzas por medio de visiones. Mancillan … rechazan … y maldicen establecen las tres acusaciones básicas contra ella (ver más arriba). Autoridad (gr. kuriotes) posiblemente se refiere a la autoridad de Dios (kurios es “Señor”). Potestades superiores (como en 2 Ped. 2:10) se usa para referirse a los ángeles. 9 Arcángel es una pala bra que se encuentra sólo aquí y en 1 Tes. 4:16 en el NT. Miguel se conoce por el libro de Daniel (10:13, 21; 21:1) y Apoc. 12:7 como líder de las huestes celestiales. El apócrifo “Asunción de Moisés” cuenta cómo Mi guel fue enviado a enterrar a Moisés. El diablo se le opuso, reclamando que el cuerpo, como objeto material, le pertenecía. Aun aquí Miguel simplemente respondió con las palabras de Zac. 3:2, y así su conducta contrasta fuer temente con la de los falsos maestros. 10 Lo que no conocen puede referirse a los seres celestiales del v. 8 o más ampliamente a las dimensiones espirituales de la vida. Por instinto significa de una manera natural o física. Al no tener tiempo para las cosas espirituales, limitan su conocimiento al mundo físico. De ese modo llegan a su caída al permitir que los domine su parte física, tal como sucede con los animales.
11 Caín, Balaam y Coré (cf. Gén. 4:1-16; Núm. 16:22-24) son clásicos ejemplos de los efectos desastrosos del celo, el orgullo y la avaricia. Los descendientes contemporáneos de ese trío tienen celo del progreso cristiano de otros y de ese modo buscan arrastrarlos a la inmoralidad (con lo cual los asesinan espiritualmente). Están tan ávidos de obtener por medio de su enseñanza lo que la gente pagará para que se les enseñe, que los persuaden fácilmente a practicar la inmoralidad (cf. Núm. 25:1-9; 31:16 y 2 Ped. 2:15), y es tan grande su orgullo que no pueden soportar que se les hable de cualquier po der (o conocimiento) superior al de ellos.
12 Manchas (ver 2 Ped. 2:13) quizá se puede traducir como “escollos ocultos” (BA). Las comidas fraternales (BJ, “ágapes”) se realizaban regularmente junto con la cena del Señor en la iglesia primitiva y en 1 Cor. 11:20-22 se ve que aun en aquellos primeros tiempos podía haber casos de una conducta que no era consecuente con el amor cristiano. La señal de estos falsos pastores es que usan su posición para aprovechar en favor de sus propios fines egoístas y no para alimentar el rebaño (cf. Eze. 34:2-10; Juan 21:15-17; 1 Ped. 5:2). Los árboles … sin fruto al tiempo de la cosecha han dejado de cumplir la función para la que existen (cf. Mat. 7:15-20; Mar. 11:12-14). Desarraigados es un cuadro del juicio (cf. Sal. 52:5; Jer. 1:10; Mat. 3:10). Estos hombres están dos veces muertos porque han probado la vida espiritual (así como la física) y la han rechazado (cf. Heb. 6:4-8; 10:26-31; 2 Ped. 2:20-22). 13 Fieras olas del mar sugiere la inquietud de la marea, que, después de todo su ruido, sólo deja un depósito de espuma y basura en la playa (cf. Isa. 57:20). Estrellas errantes es otra referencia al “Libro de Enoc”, que describe las estrellas que han violado las normas por lo que están juntas en prisión. Algunos consideran que esto se refiere a los planetas (errantes en gr. es planetai) cuyos movimientos habrían sido malentendidos por Judas y sus contemporáneos; otros a las estrellas fugaces que aparecen brevemente para dar luz y luego caen en la oscuridad. Pareciera que el pensamiento es el de Luc. 6:39: los que pretenden ser guías están ellos mismos fuera del camino. Sobre la profunda oscuridad de las tinieblas, ver sobre 2 Ped. 2:4, 17.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
NOTAS
(1) Lit.: “están blasfemando”.
(2) Lit.: “de glorias”.
REFERENCIAS CRUZADAS
d 30 Deu 13:3; 2Pe 2:1
e 31 Deu 17:12; 2Pe 2:10
f 32 Éxo 22:28; Jua 17:22; 1Ti 6:4; 1Pe 4:14; 3Jn 1:10
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
estos hombres. Estos se refiere a los hombres introducidos en el vers. 4 y descritos aquí como impíos mal intencionados. Estos se usa también en los vers. 10, 12, 14, 16 y 19.
mancillan…rechazan…blasfeman. Nótese otra vez el uso de tres palabras. Mancillan la carne es una referencia a la conducta de estos hombres que siguen un comportamiento inmoral paralelo al de los habitantes de Sodoma y Gomorra (vers. 7). Rechazan la autoridad es paralelo a la conducta de los ángeles que no conservaron su señorío (vers. 6). Blasfeman de las majestades angélicas , o de las « glorias» , indica una actitud de rebelión contra la autoridad divina (v. coment. en 2 P 2:10).
Fuente: La Biblia de las Américas
8 super (1) Los hombres impíos mencionados en el v.4 eran soñadores que se decían cristianos pero hacían cosas como si estuvieran soñando, tales como convertir la gracia de Dios en libertinaje contaminando así su propia carne, y negar que Jesucristo es nuestro único Amo y Señor, menospreciando así Su señorío e injuriando a las potestades de Su gobierno celestial.
8 super (2) Véase la nota 10 super (2) de 2 P 2.
8 super (3) Véase la nota 10 super (4) de 2 P 2.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
las potestades superiores. Se refiere a los ángeles (cp. 2Pe 2:10), aunque podría incluir también a líderes de la iglesia.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
potestades superiores… Es decir, los ángeles.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
BD450(1) La conjunción μέντοι, en este versículo sólo significa: pero.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
Lit., de las glorias
Fuente: La Biblia de las Américas
Es decir, los ángeles.
Fuente: La Biblia Textual III Edición
§ Se refiere a las personas mencionadas en el versículo Jud 1:4.