Comentario de Levítico 23:9 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Jehovah habló a Moisés diciendo:
primicia de los primeros frutos de vuestra siega. Esta fiesta dedicaba la porción inicial de la siega de la cebada en marzo / abril y se celebraba el día después del día de reposo de la semana de los panes sin levadura. Incluía la presentación al Señor de una gavilla de cebada (cp. Lev 23:10-11) acompañada de holocausto, ofrenda y libación (cp. Éxo 29:40). Las primicias simbolizaban la consagración de toda la cosecha a Dios, y era una prenda de toda la siega que vendría (cp. Rom 8:23; Rom 11:16; 1Co 15:20; Stg 1:18).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Éxo 23:16; Deu 26:1.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
[=] *Dt 26:1 *Ex 29:24
[.] A continuación, destacamos la ofrenda de la primera gavilla, que se hace en la fiesta de los ázimos, iniciando así el tiempo de la cosecha. Dios no necesita nada. Si nos pide algo es porque necesitamos dar algo de nosotros para ser auténticamente hombres. No hay fiesta, alegría compartida, si no se sacrifica algo banquetes y luces no bastarán para que el corazón esté de fiesta. El diezmo o sea, la décima parte de los frutos ofrecidos a Dios y de que van a vivir el levita y el pobre, es para el pueblo de la Biblia su riqueza espiritual. En numerosas iglesias o grupos cristianos, los miembros de la comunidad dan la décima parte de sus entradas, y nadie, ni siquiera en un país pobre, se ha empobrecido más por ello. La primera gavilla ofrecida a Dios significa también el primer minuto de la jornada que se le da, es el primer descuento del mes que se hace para ayudar al compañero necesitado, el primer momento del descanso que los esposos reunidos dan al Señor, la coperación de cada creyente a su Iglesia para que sea libre frente a los poderosos.