Comentario de Lucas 12:33 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Vended vuestros bienes y dad ofrendas de misericordia. Haceos bolsas que no se envejecen, un tesoro inagotable en los cielos, donde no se acerca el ladrón, ni la polilla destruye.

12: 33 Vended lo que poseéis, y dad limosna; — 18:18-23, el joven rico; 21:1-4, la viuda; Hch 4:34-37, los hermanos de Jerusalén; 2Co 8:1-5, los macedonios. Lucas enfatiza mucho la mayordomía y la generosidad. Pedro dice (Mat 19:27) “He aquí, nosotros lo hemos dejado todo, y te hemos seguido”. ¿Qué podrían vender? Jesús no está diciendo que literalmente todo cristiano debe vender toda posesión y darla a los pobres. Aun después de Hch 4:34-37 vemos que una hermana fiel tenía una casa (Hch 12:12). En esta casa oraban por Pedro. También leemos de varias iglesias que se reunían en las casas de los hermanos (Rom 16:5; Col 4:15; Flm 1:2). Por eso, este texto debe entenderse a la luz de 1Co 16:1-2; 2Co 8:1-24; 2Co 9:1-15; Efe 4:28; 1Ti 6:17-18; 1Jn 3:17; Stg 2:14-26, etc. Cristo no quería que los discípulos quedaran totalmente destituidos de sus posesiones para luego ser una carga para otros. La lección principal es que no seamos como el sembrador rico de la parábola de Luc 12:16-21 que guardaba sus cosechas solamente para sí mismo.

— haceos bolsas que no se envejezcan, tesoro en los cielos que no se agote, donde ladrón no llega, ni polilla destruye. — Las “bolsas que no se envejezcan” son el “tesoro en los cielos que no se agote”. Este texto nos enseña a poner nuestra confianza en Dios, y no en cosas terrenales (materiales). Jesús no condena la posesión sino el mal uso de bienes materiales. El «corazón» del asunto es el corazón. Si tenemos «limpio corazón», buscaremos tesoros celestiales.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

Vended lo que poseéis. Luc 18:22; Mat 19:21; Hch 2:45; Hch 4:34, Hch 4:35; 2Co 8:2.

haceos bolsas que no se envejecen, tesoro en los cielos que no se agota. Luc 16:9; Hag 1:6; Mat 6:19-21; Jua 12:6; 1Ti 6:17-19; Stg 5:1-3.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Vended lo que poseéis: En oposición a la acumulación frenética de posesiones que ocupa al mundo, los discípulos deben ser generosos con lo que Dios les da.

bolsas que no se envejezcan: Al servir a Dios y al prójimo, uno invierte en el futuro eterno. No pueden llevarse posesiones a la próxima vida pero, al dar a otros, se puede almacenar un tesoro eterno (véase la afirmación de Pablo en Flp 4:17).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

VENDED LO QUE POSEÉIS. Véanse Mat 19:21, nota; 1Co 16:2; 2Co 8:1-5 para el significado de lo que Jesús dice en este pasaje.

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

Vended lo que poseéis, y dad limosna. Los que acumulan posesiones materiales con la noción falsa de que su seguridad depende de recursos materiales (vv. Luc 12:16-20), más bien tienen que juntar tesoros en el cielo. Vea la nota sobre Mat 6:20. Los creyentes en la iglesia primitiva vendían una parte de sus bienes para satisfacer las necesidades básicas de los hermanos más pobres (Hch 2:44-45; Hch 4:32-37), pero este mandato no debe torcerse en el sentido que constituya una prohibición absoluta de todas las posesiones terrenales. De hecho, las palabras de Pedro a Ananías en Hch 5:4 dejan en claro que la venta de las posesiones individuales fue algo opcional. bolsas que no se envejezcan. Estas bolsas que no se desgastan e impiden la pérdida de dinero se definen como «tesoro en los cielos que no se agote». El lugar más seguro para poner el dinero es en una bolsa de esas características, es decir, en el cielo, donde se mantendrá seguro de los ladrones así como también del desgaste y la corrupción.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

12: 33 Vended lo que poseéis, y dad limosna; — 18:18-23, el joven rico; 21:1-4, la viuda; Hch 4:34-37, los hermanos de Jerusalén; 2Co 8:1-5, los macedonios. Lucas enfatiza mucho la mayordomía y la generosidad. Pedro dice (Mat 19:27) “He aquí, nosotros lo hemos dejado todo, y te hemos seguido”. ¿Qué podrían vender? Jesús no está diciendo que literalmente todo cristiano debe vender toda posesión y darla a los pobres. Aun después de Hch 4:34-37 vemos que una hermana fiel tenía una casa (Hch 12:12). En esta casa oraban por Pedro. También leemos de varias iglesias que se reunían en las casas de los hermanos (Rom 16:5; Col 4:15; Flm 1:2). Por eso, este texto debe entenderse a la luz de 1Co 16:1-2; 2Co 8:1-24; 2Co 9:1-15; Efe 4:28; 1Ti 6:17-18; 1Jn 3:17; Stg 2:14-26, etc. Cristo no quería que los discípulos quedaran totalmente destituidos de sus posesiones para luego ser una carga para otros. La lección principal es que no seamos como el sembrador rico de la parábola de Luc 12:16-21 que guardaba sus cosechas solamente para sí mismo.
— haceos bolsas que no se envejezcan, tesoro en los cielos que no se agote, donde ladrón no llega, ni polilla destruye. – Las “bolsas que no se envejezcan” son el “tesoro en los cielos que no se agote”. Este texto nos enseña a poner nuestra confianza en Dios, y no en cosas terrenales (materiales). Jesús no condena la posesión sino el mal uso de bienes materiales. El «corazón» del asunto es el corazón. Si tenemos «limpio corazón», buscaremos tesoros celestiales.

Fuente: Notas Reeves-Partain

REFERENCIAS CRUZADAS

q 826 Mat 19:21; Luc 18:22; Hch 2:45; Hch 4:34

r 827 Luc 11:41; Luc 16:9

s 828 Mat 6:20; 1Ti 6:19

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

Vended vuestras posesiones y dad limosnas. Los discípulos deben estar comprometidos con ayudar al necesitado (Ef 4:28). Las posesiones materiales que ahogan espiritualmente y no permiten ver las necesidades de otros, no agradan al Señor.

Fuente: La Biblia de las Américas

33 super (1) Véase la nota 20 super (1) de Mt 6.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

R1100 Τὰ ὑπάρχοντα ὑμῶν significa: las pertenencias de ustedes.

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego