Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros.’”
15:19 Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; — Yo sé lo que he hecho, y estoy confesando mis pecados. Compárese su actitud ahora con la del v. 12. Yo sé que no merezco nada. No soy digno de nada, pero también yo sé que aquí entre los cerdos no puedo mejorar mi vida. — hazme como a uno de tus jornaleros. — Con gozo aceptaría el último lugar en la casa de su padre. Este es el verdadero arrepentimiento. “Tal como soy sin más decir…”Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
Ya no soy digno de ser llamado tu hijo. Luc 5:8; Luc 7:6, Luc 7:7; Gén 32:10; Job 42:6; 1Co 15:9; 1Ti 1:13-16.
hazme como a uno de tus jornaleros. Jos 9:24, Jos 9:25; Sal 84:10; Mat 15:26, Mat 15:27; Stg 4:8-10; 1Pe 5:6.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
15:19 Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; — Yo sé lo que he hecho, y estoy confesando mis pecados. Compárese su actitud ahora con la del v. 12. Yo sé que no merezco nada. No soy digno de nada, pero también yo sé que aquí entre los cerdos no puedo mejorar mi vida.
— hazme como a uno de tus jornaleros. – Con gozo aceptaría el último lugar en la casa de su padre. Este es el verdadero arrepentimiento. “Tal como soy sin más decir…”
En las parábolas de la oveja perdida y la moneda perdida se enfatizaba la búsqueda. En esta se explica cómo se perdió el hijo, y cómo tuvo cambio de corazón y volvió al padre. Al salir decía “dame” y al volver dice “perdóname”. No culpa a otros. No emblanquece su pecado. No trata de justificarse. No trata de reformarse viviendo con los cerdos. Simplemente reconoce que el pecado no satisface sino que sólo produce el hambre y que sería locura perecer con hambre en lugar de volver a la casa de su padre donde hay abundancia de pan aun para los jornaleros. Por eso, toma otra decisión importante. Teniendo libre albedrío había tomado la decisión de abandonar la casa del padre para ir a una provincia lejana y malgastar su herencia, ahora toma la decisión de emprender el viaje de arrepentimiento para volver a la casa del padre donde hay abundancia de pan. Esta decisión requería mucha humildad pero también requería mucha sensatez, porque no todo el mundo reducido a la miseria toma decisiones buenas. Algunos cometen suicidio como Judas, otros empiezan una vida de crimen o borrachera, pero éste actuaba con sobriedad y volvió a su padre
El pródigo sabía que podía regresar a la casa del padre. Creo que este punto merece mucho énfasis. 2Pe 3:1-18, “15 Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación”. Nos toca convencer a los perdidos que no solamente pueden volver al Padre, sino que El sinceramente anhela su retorno, no para castigarlos sino para perdonarles. Debemos predicar más sobre este tema. Es indispensable que todos los perdidos lo sepan. La puerta está abierta. Es necesario recalcar esta verdad para evitar la desesperación en el corazón del perdido. Todo miembro de la iglesia debe compartir esta actitud benévola del padre, la buena disposición de recibir con gozo al perdido arrepentido. ¡Cuán importante es que el pecador sepa que las puertas de la iglesia están abiertas para recibirlo con gozo! ¡Cuán importante es que los brazos de los miembros siempre estén abiertos para recibir con gozo al hermano descarriado!
Fuente: Notas Reeves-Partain
como uno de tus trabajadores. En el mundo antiguo había tres clases de trabajadores: los esclavos regulares, que le pertenecían al amo de por vida; los esclavos o siervos temporales, que se vendían en pago por deudas o por tiempo limitado y los que eran empleados como asalariados, recibiendo una compensación diaria como de un denario por día. Es a la tercera clase de obrero que se refiere este pasaje.
Fuente: La Biblia de las Américas
19 super (1) El hijo pródigo no conocía el amor del padre.
19 super (2) Un pecador caído que se arrepiente, tiene siempre la idea de hacer obras para Dios o de servir a Dios para obtener Su favor, sin saber que este pensamiento va en contra del amor y la gracia de Dios, y que es un insulto a Su corazón y a Su intención.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
T320 En el griego bíblico, ὡς puede servir para suavizar una declaración: como si fuera, tal vez, aproximadamente. Eso ocurre en este versículo.
BD247(2) El numeral εἷς tiene el sentido de τὶς en este contexto (comp. el v. 15): uno de tus jornaleros.