conforme a la costumbre del sacerdocio, le tocó por sorteo entrar en el templo del Señor para quemar el incienso.
ofrecer, o quemar el incienso. Éxo 30:7, Éxo 30:8; Éxo 37:25-29; Núm 16:40; 1Sa 2:28; 1Cr 6:49; 1Cr 23:13; 2Cr 26:16; 2Cr 29:11; Heb 9:6.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
le tocó en suerte ofrecer el incienso. Un honor supremo (Éxo 30:7-8; 2Cr 29:11). Debido a la gran cantidad de sacerdotes disponibles, ellos en su gran mayoría nunca serían elegidos para cumplir un deber tan destacado y a ninguno se le permitía prestar este servicio más de una vez. Es indudable que Zacarías consideró este como un momento culminante en toda una vida dedicada al servicio sacerdotal. El incienso se mantenía encendido todo el tiempo frente al velo que dividía el Lugar santo del Lugar santísimo. A solas, el sacerdote ofrecía el incienso cada mañana y cada tarde, mientras el resto de los sacerdotes y adoradores permanecían fuera del Lugar santo en oración penitente (v. Luc 1:10).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Éxo 30:7.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
— le tocó en suerte: Cada uno de los veinticuatro turnos sacerdotales arriba mencionados oficiaba dos veces al año durante una semana. Como el número de sacerdotes de cada turno era elevadísimo, tenían que sortear cada día a quién le correspondía ofrecer el incienso. Por término medio, sólo una o dos veces le correspondía este honor a un mismo sacerdote a lo largo de su vida.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
NOTAS
(1) O: “la habitación (morada) divina”. Gr.: na·ón; lat.: tém·plum; J17,18,22(heb.): heh·kjál, “palacio; templo”.
(2) Véase Ap. 1D.
REFERENCIAS CRUZADAS
r 18 Éxo 30:7
s 19 Éxo 40:5
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
escogido por sorteo. Solamente una persona podía entrar a oficiar el rito sagrado de quemar el incienso durante los sacrificios matutinos y vespertinos (Ex 30:7– 8). Como había muchos sacerdotes, cada uno de ellos podía servir en esta función solamente una vez en su vida. Así que la revelación divina ocurre en el clímax de la vida de Zacarías.
Fuente: La Biblia de las Américas
9 (1) Sobre el altar del incienso dentro del Lugar Santo (v. 11; Éxo_30:6-8 ; 1Sa_2:28 ; 1Cr_23:13 ; 2Cr_29:11).
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
le tocó en suerte. El privilegio de ofrecer el incienso se ejercía solamente una vez durante la vida entera de un sacerdote.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
B401 Aquí el infinitivo con τοῦ se usa como el complemento directo de ἔλαχε, el cual toma un sustantivo en genitivo como complemento directo: era su suerte (probablemente la obtuvo por suertes) la de encender el incienso.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
‡ Se usó un sistema de selección aleatoria similar a elegir palillos al azar, porque había más personas dispuestas a servir que vacantes disponibles.