Y Jesús decía: —Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y partiendo sus vestidos, echaron suertes.
23:34 Y Jesús decía: Padre, perdónalos (en ese momento Jesús daba su vida como sacrificio perfecto para salvarnos de los pecados; en base a esa muerte, Dios puede perdonar) , porque no saben lo que hacen. — Jesús practicaba lo que predicaba (Mat 5:44). Lo imitó Esteban, Hch 7:59-60. Sin embargo, esta petición no significa que éstos fueron perdonados incondicionalmente (simplemente en base a la petición de Jesús). Más bien, esta petición significa que Jesús hizo posible su perdón y que estaba dispuesto a perdonarles, pero Jesús y los apóstoles nombraron condiciones o requisitos que todos deben cumplir para obtener el perdón de los pecados. Mar 16:16; Hch 2:38, etc. — porque no saben lo que hacen” — Hch 3:17, “Mas ahora, hermanos, sé que por ignorancia lo habéis hecho, como también vuestros gobernantes”; 1Co 2:8, “la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria”.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
Padre, perdónalos. Luc 23:47, Luc 23:48; Luc 6:27, Luc 6:28; Gén 50:17; Sal 106:16-23; Mat 5:44; Hch 7:60; Rom 12:14; 1Co 4:12; 1Pe 2:20-23; 1Pe 3:9.
porque no saben lo que hacen. Luc 12:47, Luc 12:48; Jua 15:22-24; Jua 19:11; Hch 3:17; 1Co 2:8; 1Ti 1:13.
repartieron entre si sus vestidos, echando suertes. Sal 22:18; Mat 27:35, Mat 27:36; Mar 15:24; Jua 19:23, Jua 19:24.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
perdónalos: Los que le dieron muerte a Jesús actuaron con ignorancia, porque no entendían a quién realmente estaban matando. El ejemplo de Jesús de interceder por sus ejecutores fue seguido por Esteban en Hch 7:60.
repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes: El lenguaje que se utiliza alude al Sal 22:18 : El sufrimiento del Justo.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
LAS SIETE PALABRAS DE CRISTO. Lo más probable es que el v. Luc 23:34 sea la primera de las siete palabras de Cristo en la cruz. Estas fueron pronunciadas en el siguiente orden:
(1) Desde las nueve de la mañana hasta el mediodía:
(a) La palabra de perdón: «Padre, perdónalos» (v. Luc 23:34).
(b) La palabra de salvación: «Hoy estarás conmigo en el paraíso» (v. Luc 23:43).
(c) La palabra de amor: «Mujer, he ahí tu hijo…. He ahí tu madre» (Jua 19:26-27).
(2) Las tres horas de oscuridad: desde el mediodía hasta las tres de la tarde, no se menciona palabra alguna.
(3) Alrededor de las tres de la tarde:
(a) La palabra de dolor espiritual: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?» (Mar 15:34).
(b) La palabra de dolor físico: «Tengo sed» (Jua 19:28).
(c) La palabra de victoria: «Consumado es» (Jua 19:30).
(d) La palabra de entrega: «Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu» (v. Luc 23:46).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
perdónalos. Esto es, quienes lo atormentaban, tanto judíos como romanos (cp. Hch 7:60). Parte del fruto de esta oración se vio en la salvación de miles de personas en Jerusalén en el Pentecostés (Hch 2:41). no saben lo que hacen. No eran conscientes del alcance total de su maldad. No lo reconocieron como el verdadero Mesías (Hch 13:27-28). Estaban ciegos a la luz de la verdad divina, «porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria» (1Co 2:8). Con todo, su ignorancia no los hizo merecedores del perdón; antes bien, su propia ceguera espiritual era prueba de su culpa (Jua 3:19). Pero la oración de Cristo en el momento mismo en el cual se burlaban de Él es una expresión de la infinita compasión de la gracia divina. echando suertes. Vea las notas sobre Mat 27:35; Mar 15:24.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
23:34 Y Jesús decía: Padre, perdónalos (en ese momento Jesús daba su vida como sacrificio perfecto para salvarnos de los pecados; en base a esa muerte, Dios puede perdonar) , porque no saben lo que hacen. – Jesús practicaba lo que predicaba (Mat 5:44). Lo imitó Esteban, Hch 7:59-60. Sin embargo, esta petición no significa que éstos fueron perdonados incondicionalmente (simplemente en base a la petición de Jesús). Más bien, esta petición significa que Jesús hizo posible su perdón y que estaba dispuesto a perdonarles, pero Jesús y los apóstoles nombraron condiciones o requisitos que todos deben cumplir para obtener el perdón de los pecados. Mar 16:16; Hch 2:38, etc.
— porque no saben lo que hacen” — Hch 3:17, “Mas ahora, hermanos, sé que por ignorancia lo habéis hecho, como también vuestros gobernantes”; 1Co 2:8, “la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria”.
Las “siete palabras de la cruz”: (1) Luc 23:34, “Padre, perdónalos”; (2) Luc 23:43, “hoy estarás conmigo”; (3) Jua 19:27, “Mujer… tu hijo”; (4) Mar 15:34, “Dios mío”; (5) Jua 19:28, “Tengo sed”; (6) Jua 19:30, “consumado es”; (7) Luc 23:46, “Padre, en tus manos…”
— Y repartieron entre sí sus vestidos, (HIMATION, sus vestidos exteriores) , echando suertes, (Sal 22:18) e hicieron cuatro partes, una para cada soldado. — Normalmente el judío tenía cinco artículos de ropa: la túnica (ropa interna), la capa (la ropa externa), el cinto, las sandalias y el turbante. Al crucificar a un criminal una parte del sueldo de los soldados era la ropa del hombre crucificado. Repartieron la ropa de Jesús como si ya estuviera muerto, nunca pensando que la volvería a necesitar. De esta manera, sin saberlo, llevaban a cabo lo que Dios había predicho. Aun los detalles minuciosos de este gran evento eran temas de profecía (JWM).
¡Qué imagen tan clara de la indiferencia del mundo hacia Cristo! Mientras El agonizaba sobre la cruz, muriendo por los pecados del mundo, los soldados jugaban y repartían su ropa como si El fuera de los más comunes criminales. Es verdad que hay mucha hostilidad contra Cristo hoy en día, pero la tragedia más grande no es la hostilidad hacia Cristo, sino la fría indiferencia hacia Cristo.
Fuente: Notas Reeves-Partain
Isa 53:12; (ver Mat 5:44; Hch 3:17; Hch 7:60); Sal 22:18; Mat 18:21-22.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
NOTAS
(1) אCVgSyc,p insertan las palabras entre corchetes; P75BD*WSys las omiten.
REFERENCIAS CRUZADAS
i 1427 Hch 7:60
j 1428 Sal 22:18; Isa 53:12; Mat 27:35; Mar 15:24
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Padre, perdónalos. El perdón del Señor contrasta con el odio de la multitud y los líderes, que actuaban por ignorancia sin comprender que verdaderamente El era el Rey de los judíos (vers. 38).
echaron suertes. Véase coment. en Mt 27:35.
Fuente: La Biblia de las Américas
repartieron entre sí sus vestidos. Véase Sal 22:18 y nota en Mat 27:35.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
suertes… → Sal 22:18. M↓ añaden al principio del versículo y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
Algunos mss. antiguos no incluyen: Y Jesús decía: … hacen.
Fuente: La Biblia de las Américas
g Sal 22:18. M i añaden y Jesu250?s decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen.
Fuente: La Biblia Textual III Edición
[Jesús decía: «Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen.»]6 Y los soldados echaron suertes para repartirse entre ellos sus vestidos.
6. El texto que aparece entre corchetes se halla sólo en mss. tardíos.