Comentario de Lucas 24:47 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
y que en su nombre se predicase el arrepentimiento y la remisión de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén.
y que se predicase. Dan 9:24; Mat 3:2; Mat 9:13; Hch 2:38; Hch 3:19; Hch 5:31; Hch 11:18; Hch 13:38, Hch 13:39, Hch 13:46; Hch 17:30, Hch 17:31; Hch 20:21; Hch 26:20; 1Jn 2:12.
en todas las naciones. Gén 12:3; Sal 22:27; Sal 67:2-4, Sal 67:7; Sal 86:9; Sal 98:1-3; Sal 117:1-2; Isa 2:1-3; Isa 11:10; Isa 49:6, Isa 49:22; Isa 52:10, Isa 52:15; Isa 60:1-3; Isa 66:18-21; Jer 31:34; Ose 2:23; Miq 4:2; Mal 1:11; Mat 8:10, Mat 8:11; Hch 10:46-48; Hch 18:5, Hch 18:6; Hch 28:28; Rom 10:12-18; Rom 15:8-16; Efe 3:8; Col 1:27.
comenzando desde Jerusalén. Luc 13:34; Isa 5:4; Ose 11:8; Mat 10:5, Mat 10:6; Hch 3:25, Hch 3:26; Hch 13:46; Rom 5:20; Rom 11:26, Rom 11:27; Efe 1:6.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Jesús fue considerado suplantador y blasfemo. Después de su resurrección, la gente tuvo que cambiar su opinión y servirle por quien es Él en realidad, el Hijo de Dios. Este es el mensaje que predicaría Pedro en Pentecostés, un mensaje que provocaría que miles de personas declararan a Jesús como su Señor. Jesús resume la misión de sus discípulos en predicar arrepentimiento, y llamar la gente a alejarse de su egoísmo para acercarse a Cristo, quien murió por nosotros.
perdón de pecados: El contenido de lo que predican los discípulos se concentrará en el ofrecimiento de la gracia de Dios para perdonar a todos los que creen (Hch 2:38; Hch 10:43).
en su nombre: Esto se refiere a la autoridad de Jesús. El perdón y la bendición llegan sólo mediante la obra de Jesús resucitado (Hch 2:30-39). El mensaje de salvación es para todas las naciones, tanto para judíos como para gentiles. El ofrecimiento es para todo el que lo quiera recibir (Hch 10:1-48; Hch 11:1-30; Hch 12:1-25; Hch 13:1-52; Hch 14:1-28; Hch 15:1-41). La misión de los discípulos comenzaría en Jerusalén, el lugar donde murió Jesús; desde allí se divulgaría al mundo entero (Hch 1:8).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
SE PREDICASE. Véase Mat 28:19, nota, para comentarios sobre la gran comisión.
EL ARREPENTIMIENTO Y EL PERDÓN DE PECADOS. Los discípulos no debían predicar el perdón de pecados sin el requisito del arrepentimiento. El predicador que ofrece salvación sobre la base de una fe fácil o por la simple aceptación de la salvación gratuita desprovista de una entrega a obedecer a Cristo y su Palabra, predica un evangelio falso. El arrepentimiento implica abandono del pecado; este siempre ha sido un elemento esencial en el verdadero evangelio del NT (véase Mat 3:2, nota sobre el arrepentimiento).
EN TODAS LAS NACIONES. Cristo mismo instituye las misiones cristianas como una tarea santa y obligatoria de la iglesia. Las misiones son un tema principal del AT (Gén 22:18; 1Re 8:41-43; Sal 72:8-11; Isa 2:3; Isa 45:22-25) y del NT (Mat 28:19; Hch 1:8; Hch 28:28; Efe 2:14-18).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
Esta era la Gran Comisión (cp. Mat 28:19-20; Mar 16:15).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
REFERENCIAS CRUZADAS
o 1504 Hch 5:31; Hch 13:38
p 1505 Gén 22:18; 1Co 15:12; Gál 3:14; 1Ti 3:16
q 1506 Hch 4:2; Hch 5:28
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
se predicara el arrepentimiento para el perdón de los pecados. Tres aspectos de la doctrina de la salvación son enfatizados aquí: 1) El arrepentimiento (5:32; 13:3; 15:7, 10), que significa un cambio de pensar y de actuar y volverse a Dios; 2) El perdón de los pecados , que describe la respuesta de Dios al arrepentimiento conforme a los ministerios de Juan el Bautista (1:77; 3:3) y de Jesús (4:18, 19; 5:17– 26); y 3) La proclamación del evangelio es el medio por el cual se llega al arrepentimiento y es un tema central del libro de los Hechos. Tal predicación debe ser hecha en el nombre de Cristo (Hch 1:8; 3:16), es decir con la autoridad de Jesús. La proclamación debe hacerse a todas las naciones, según Hch 1:8, comenzando en Jerusalén y continuar por todo el mundo.
Fuente: La Biblia de las Américas
47 (1) El perdón de los pecados solamente podía ser proclamado después de que se hubiese realizado la muerte substitutiva del Salvador-Hombre por los pecados de los hombres, y después de que hubiese sido verificada por Su resurrección (v.46; cfr. Rom_4:25). El Evangelio de Juan, que es el evangelio del Dios-Salvador, recalca la vida que lleva fruto ( Jua_15:5). El Evangelio de Lucas, como el del Salvador-Hombre, da énfasis al perdón de pecados que debe proclamarse. Para llevar fruto en vida se requiere al Espíritu esencial de vida, recibido a través del soplo del Espíritu ( Jua_20:22). Para proclamar el perdón de pecados se requiere al Espíritu económico de poder, recibido a través del bautismo en el Espíritu ( Hch_1:5 , Hch_1:8). Llevar fruto implica vida; proclamar el perdón de pecados es asunto de poder.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
para… La preposición eis tiene función acusativa. M↓ registran y; liberación… → §262.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
M69 Parece que εἰς con el acusativo aquí equivale a un simple dativo: a todas las naciones (esta frase denota los destinatarios de la predicación -BD207[1]).
T78 Parece muy probable que el infinitivo κηρυχθῆναι sea imperativo, y que signifique: que se predique.
MT182 Con gran vacilación, ἀρξάμενοι puede tomarse como imperativo, si se toma la puntuación del versículo según la nota marginal de Wescott y Hort: Comiencen desde Jerusalén, como testigos de estas cosas. El enfático ὑμεῖς, repetido en el v. 49, así indica el contraste entre los doce, para quienes Jerusalén siempre sería el centro, y el que sería levantado pronto, quien haría del mundo su parroquia (o el participio es imperativo, o lo que hay aquí es un anacoluto -R1203; el participio significa: desde … en adelante -T155; comenzando con -BD419[3]). [Editor. No es necesario traducir este participio como un imperativo; especialmente por el hecho de que su significado más común, comenzando con, provee un sentido válido.]
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
Algunos mss. dicen: y el perdón
Fuente: La Biblia de las Américas
La preposición eis tiene función de acusativo.