Comentario de Marcos 10:9 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Por tanto, lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre.
10:9 — Por tanto — Jesús llega a la conclusión en su discusión con los falsos maestros, los fariseos. Hace un gran contraste entre el plan original de Dios sobre el matrimonio, y lo que Moisés permitió y mandó temporalmente para regular abusos respecto al matrimonio debidos a la dureza de corazón de los maridos judíos del tiempo.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
Rom 7:1-3; 1Cr 7:10-13.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Jesús indica que el propósito original de Dios en el matrimonio no debe ser roto por el hombre. No se entrega ninguna excepción. La excepción en Mat 19:9 puede atribuirse a la característica judía de ese Evangelio (cf. con Apo 18:1-24).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
Por tanto, lo que Dios juntó. Jesús añade una cuarta razón para la inviolabilidad del matrimonio (vea la nota sobre los vv.Mar 10:7-8): Dios ordena los matrimonios y los mismos no deben ser deshechos por el hombre.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
10:9 — Por tanto — Jesús llega a la conclusión en su discusión con los falsos maestros, los fariseos. Hace un gran contraste entre el plan original de Dios sobre el matrimonio, y lo que Moisés permitió y mandó temporalmente para regular abusos respecto al matrimonio debidos a la dureza de corazón de los maridos judíos del tiempo.
— lo que Dios juntó, no lo separe el hombre — Aquí está la respuesta a la pregunta del ver. 2 (Mat 19:3): lo que Dios juntó (el marido y su mujer por toda la vida, Rom 7:2-3), no lo separe el hombre por medio del divorcio.
(Marcos no registra el punto de la causa excepcional respecto al divorcio, pero Mateo sí, 19:9).
Debemos recordar siempre que es Dios quien junta, y solamente él puede librar al cónyuge de sus votos de matrimonio. Se hace el argumento de que el hombre puede (por el divorcio) separar lo que Dios juntó. Sí, puede desobedecer a Dios, pero no puede dictar las consecuencias de su divorcio. Puede disolver la unión físicamente, pero no puede librarse de sus votos que hizo cuando se casó. Si se divorcia (sin la causa estipulada), es cierto que queda no casado (1Co 7:10-11), pero no queda libre de sus votos. Solamente Dios puede hacer eso, y lo hace solamente a beneficio del inocente de los dos cónyuges en el caso de fornicación. El matrimonio es más que una unión física de dos cuerpos (compárese 1Co 6:16). Es también un pacto sellado con votos (Mal 2:14; Pro 2:17). El hombre solo puede disolver la unión física pero solo no puede disolver el pacto. Solamente Dios une, y solamente él separa.
El divorcio por cualquier causa queda, pues, condenado. Nos conviene prestar atención a Jesús, porque es Dios, es nuestro Salvador, y va a ser el Juez de todo el mundo en el día del juicio final (Hch 17:31).
Fuente: Notas Reeves-Partain
Lo que Dios juntó, no lo separe el hombre: Aquí hombre se refiere al marido, que era el único que podía comenzar el trámite de divorcio. Para reflejar esta práctica en la traducción, habría que poner: “Lo que Dios ha unido, el marido no lo debería separar”. Sin embargo, una traducción contemporánea requiere ser contextual. En este sentido, es muy agradable cómo resuelve el problema TLA: «Si Dios ha unido a un hombre y a una mujer, nadie debe separarlos».
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
REFERENCIAS CRUZADAS
g 464 Mat 19:6
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
lo que Dios ha unido. Esta relación entre los esposos fue establecida por Dios como una unión divina y permanente.
Fuente: La Biblia de las Américas
TGr60 Algunos exegetas han alegado que ἄνθρωπος μὴ χωριζέτε significa: ningún marido lo separe. Sin embargo, decir esto es pasar por alto el hecho de que, nuestro Señor cambió ἀνήρ (marido; en v. 2) por ἄνθρωπος cuando dijo: ningún hombre lo separe; en el v. 9, ἄνθρωπος significa un miembro de la especie humana, pero nunca un marido (así que, Jesús prohibió completamente el divorcio).