¡Bendito el reino venidero de nuestro padre David! ¡Hosanna en las alturas!
11:10 — Bendito el reino de nuestro padre David que viene! — El reino del padre David es el reino del Mesías. (“Mesías”, término hebreo, en griego,” Cristo”, significa “ungido”). Véanse 2Sa 7:12-16; Sal 89:3-4; Sal 132:11; Eze 37:24. Los judíos de esta multitud vieron en la entrada de Jesús en Jerusalén la venida de la promesa mesiánica. Venía el reino, venía el Rey (Jua 12:13).Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
Bendito el reino. Isa 9:6, Isa 9:7; Jer 33:15-17, Jer 33:26; Eze 34:23, Eze 34:24; Eze 37:24, Eze 37:25; Ose 3:5; Amó 9:11, Amó 9:12; Luc 1:31-33
¡Hosanna en las alturas! Sal 148:1; Luc 2:14; Luc 19:38-40.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
el reino de nuestro padre David. Este tributo, registrado solo por Marcos, es un reconocimiento a Jesús como la persona que traerá el reino mesiánico prometido al Hijo de David. La multitud parafraseó la cita del Sal 118:26 (v. Mar 11:9) anticipando que Jesús cumpliría la profecía trayendo el reino.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
11:10 — Bendito el reino de nuestro padre David que viene! — El reino del padre David es el reino del Mesías. (“Mesías”, término hebreo, en griego,” Cristo”, significa “ungido”). Véanse 2Sa 7:12-16; Sal 89:3-4; Sal 132:11; Eze 37:24. Los judíos de esta multitud vieron en la entrada de Jesús en Jerusalén la venida de la promesa mesiánica. Venía el reino, venía el Rey (Jua 12:13).
— Hosanna en las alturas! — Véanse los comentarios del versículo anterior.
Juan (12:16) nos dice que los apóstoles al principio no entendieron bien estas cosas, pero que después de la ascensión de Jesús al cielo, entonces se acordaron de las profecías al respecto.
Lucas (19:37) informa que estas alabanzas de la gente, y su expectación del principio del reino mesiánico, tuvieron su base en las grandes maravillas hechas por Jesús que ellos habían visto. Pero esta gente anticipaba una restauración del reino literal de David como existía en tiempos pasados, y una independencia nacional como antes del cautiverio en Babilonia.
Fuente: Notas Reeves-Partain
Bendito el reino de nuestro padre David que viene se presta a confusión. ¿Quién es el que viene? ¿David o el reino? Obviamente, el reino, por lo cual sería mejor seguir la sugerencia de NVI, que traduce: «¡Bendito el reino venidero de nuestro padre David!»
¡Hosana en las alturas! es la traducción preferida de casi todas las versiones, excepto de TLA, que propone: «¡Sálvanos, Dios altísimo!» Es posible que la frase signifique, simplemente, “gloria a Dios”, “que los ángeles del cielo alaben a Dios”, o “que viva el Dios altísimo”.
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
— ¡Gloria al Dios Altísimo!: Ver segunda nota a Mat 21:9.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
Luc 1:32-33; Hch 2:29.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
NOTAS
(1) “El reino venidero de nuestro padre David”, אBCD; ASyh: “el reino de nuestro padre David que viene en el nombre del Señor”; J7,8,10-14,16,17: “el reino de nuestro padre David que viene en el nombre de Jehová”.
(2) O: “en los lugares más altos”.
REFERENCIAS CRUZADAS
ñ 534 Zac 9:9; Luc 1:32; Hch 2:29
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Bendito el reino de nuestro padre David que viene. La multitud esperaba que Jesús estableciera inmediatamente el reino davídico terrenal prometido a Israel en el A.T. (2 S 7:8– 17; Mt 19:28; Lc 1:31– 33; Hch 1:6, 7). Pero el pueblo de Israel no cumplió con los requisitos espirituales necesarios para recibir el reino (Mr 1:15; Jn 1:11; 3:3, 5), y por tanto no pudieron recibir las bendiciones prometidas, sino más bien el justo juicio de Dios (Lc 19:41– 44). Ni siquiera los discípulos parecían entender el significado de su entrada triunfal, especialmente en el cumplimiento de la profecía de Zac 9:9 (Jn 12:16).
Fuente: La Biblia de las Américas
el reino de nuestro padre David. i.e., el reino mesiánico.