Comentario de Marcos 14:65 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Algunos comenzaron a escupirle, a cubrirle la cara y a darle de bofetadas, diciendo: —¡Profetiza! También los guardias le recibieron a bofetadas.
14:65 — Y algunos comenzaron a escupirle, y a cubrirle el rostro y a darle de puñetazos, y a decirle: Profetiza. Enseguida de la sentencia (ver. 64), algunos comienzan a infligir en Jesús dolor físico en varias formas juntamente con actos de burla y vergüenza. Lucas (22:63) dice que estos “algunos” fueron“ los hombres que custodiaban a Jesús”. Le vendaron los ojos y con burla le dicen, “Profetízanos, Cristo, quién es él que te golpeó” (Mat 26:68). — Y los alguaciles le daban de bofetadas — “Y los oficiales (guardias, sirvientes) le recibieron a bofetadas” (BLA, LAC, ASV, JTD). Al hacerse cargo de Jesús, le dieron bofetadas.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
Mar 15:19; Núm 12:14; Job 30:10; Isa 50:6; Isa 52:14; Isa 53:3; Miq 5:1; Mat 26:67, Mat 26:68; Luc 22:63, Luc 22:64; Jua 18:22; Jua 19:3; Hch 23:2; Heb 12:2.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Aquellos que escupieron y golpearon a Jesús no estaban aplicando el castigo, el cual podía desentrañar a un individuo. Compárese Mar 15:15 donde el castigo se menciona.
EN PROFUNDIDAD
|
«¡Danos a Barrabás!»
|
Excepto por una serie de circunstancias extraordinarias, Barrabás probablemente habría permanecido desconocido en la historia. Él era uno de los del sicarii (hombre del puñal), quien había asesinado a oficiales romanos en el vano intento de llevarlos fuera de Palestina. En ocasiones, cuando las condiciones políticas lo permitían, tales hombres conseguían tener un pequeño grupo de partidarios y crear serios problemas. Por ejemplo, en el año 6 d.C Judas el galileo condujo una rebelión contra los impuestos. Pero los romanos rápidamente lo ejecutaron y dispersaron a sus seguidores.
De manera similar, las autoridades habían arrestado a Barrabás y a otros con cargos de insurrección y asesinato (Mar 15:7; Luc 23:19). Los prisioneros conocían bien qué destino les esperaba: la crucifixión, una manera de ejecución que los romanos reservaban para los criminales políticos. El espectáculo público de clavar a los rebeldes en una cruz levantada era un disuasivo potente para la oposición política.
Pero Barrabás no iba a morir de esa manera. El arresto de Jesús, la maniobra política de Caifás el sumo sacerdote y de Herodes y Pilato (Luc 23:6-12) y la costumbre de liberar un prisionero durante la Fiesta de la Pascua (Mar 15:6) le proporcionaron a Barrabás una vía para ser libre.
Lo que finalmente aseguró su libertad fueron los gritos de la multitud liberarlo (Jua 18:40). Para Pilato era difícil creer que ellos realmente prefirieran a Barrabás, y, cuando siguieron exigiendo que Cristo fuera crucificado, Pilato preguntó: «¿A vuestro Rey he de crucificar?» (Jua 19:15.) En ese punto los principales sacerdotes exclamaron: «No tenemos más rey que César», y el gobernador liberó a Barrabás. Es una peculiar ironía que un revolucionario contra Roma debiera ser liberado por el grito de: «No tenemos más rey que César».
|
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
DARLE PUÑETAZOS. Véase Mat 26:67, nota.
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
comenzaron a escupirle … y a darle de puñetazos. Para los judíos «escupir» en la cara de otra persona era la forma de insulto personal más grosera y odiosa posible (cp. Núm 12:14; Deu 25:9). Su brutal crueldad alcanzó el punto máximo revelando la gran depravación del corazón de cada uno de ellos cuando comenzaron a «darle puñetazos», golpeándolo con los puños. Profetiza. Burlona e irrespetuosamente ordenaron a Jesús que utilizara los poderes proféticos que decía tener, adivinando frívolamente quién de ellos lo estaba golpeando (Mat 26:68).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
14:65 — Y algunos comenzaron a escupirle, y a cubrirle el rostro y a darle de puñetazos, y a decirle: Profetiza. Enseguida de la sentencia (ver. 64), algunos comienzan a infligir en Jesús dolor físico en varias formas juntamente con actos de burla y vergüenza. Lucas (22:63) dice que estos “algunos” fueron“ los hombres que custodiaban a Jesús”. Le vendaron los ojos y con burla le dicen, “Profetízanos, Cristo, quién es él que te golpeó” (Mat 26:68).
— Y los alguaciles le daban de bofetadas — “Y los oficiales (guardias, sirvientes) le recibieron a bofetadas” (BLA, LAC, ASV, JTD). Al hacerse cargo de Jesús, le dieron bofetadas.
Fuente: Notas Reeves-Partain
¡Profetiza! Aquí esto no significa “predice el futuro”, sino, más bien, «¡adivina quién te pegó!» (TLA).
Reflexión bíblica y pastoral
El juicio contra Jesús estuvo plagado de anormalidades, desde la manera en que fue arrestado —de noche, fuera de la vista del pueblo que le seguía—hasta la manera en que fue llevado, también de noche, a una sesión irregular del Sanedrín, que por lo general no se reunía después de la caída del sol. Los testigos fueron comprados, como Judas, por las autoridades religiosas, para testificar falsamente en contra de Jesús. El punto principal de las acusaciones contra él era el templo. Los testigos afirmaban que habían oído a Jesús decir que derribaría el templo y lo volvería a levantar en tres días. Esta acusación se repite en Mar 15:29. Sin embargo, en el Evangelio de Marcos Jesús nunca afirma que él derribaría el templo, sino, más bien, que el templo sería destruido. Jesús tenía en mente una acción de Dios, un evento escatológico. Dado que la expectativa de los apocalípticos era que, en el nuevo mundo, Dios o el Mesías reedificarían el templo, resulta evidente que aquí se está acusando a Jesús de tener aspiraciones mesiánicas, tal como las entendía la tradición apocalíptica, es decir, referidas a un Mesías casi divino, que era más que un simple ser humano. Cuando el sumo sacerdote cataloga la respuesta de Jesús como una blasfemia, parece entender que Jesús se está poniendo a la misma altura que Dios. Esto era particularmente problemático para los saduceos —incluido el sumo sacerdote, que era uno de ellos—, quienes no abrigaban expectativas apocalípticas porque ya se beneficiaban económicamente del sistema del templo tal como existía en ese momento.
Aparte de estas especulaciones escatológicas, que pertenecen a un tiempo y contexto muy específico, hay otras cosas importantes de resaltar aquí. Jesús fue acusado y se le negó el derecho a un juicio imparcial. Se trajeron testigos con una misión bien concreta: acusarlo. Sus seguidores le abandonaron, y uno de sus discípulos, Pedro, estaba abajo, calentándose en el fuego, demasiado aterrorizado para siquiera identificarse como uno de sus seguidores, y mucho menos para defenderlo en una corte judicial. Jesús estuvo solo ante un juzgado totalmente parcial, sin ninguna posibilidad de ser exonerado. Su suerte había sido decidida de antemano por los líderes religiosos. No obstante, Dios, el juez supremo, estaba del lado de Jesús, sólo que en ese momento nadie lo podía ver. El tiempo le daría la razón a Jesús. Tres días más tarde, el reo de muerte, el crucificado, se transformaría en el Señor de la vida.
Es probable que la audiencia de Marcos estuviera atravesando momentos difíciles. Quizás ya estaba viviendo lo que Jesús había anunciado en Mar 13:9, Mar 13:11-13 : persecución por causa del evangelio, encarcelamiento y comparecencia delante de jueces parciales. En situaciones tan difíciles, estos lectores originales podían encontrar consuelo en el ejemplo de Jesús; podían vislumbrar el futuro de Dios en la promesa de la resurrección y del nuevo mundo; podían sentir la presencia reconfortante del Espíritu Santo en medio de sus tribulaciones. Así recibían la fortaleza necesaria para cumplir su verdadera vocación, que no era la de ser mártires, sino la de ser portadores de buenas nuevas de vida y de resurrección.
Actualmente, muchas personas encarceladas injustamente por su compromiso con la liberación del pueblo encuentran en Jesús un ejemplo vivificante. Muchos siervos y siervas de Jesús han confiado en la promesa de que el reino de la muerte no tiene la última palabra; por eso, han sobrellevado el hostigamiento físico, la persecución ideológica, y hasta han enfrentado la muerte sabiendo que Dios está de su lado. En América Latina hay muchos ejemplos de personas así. Es el caso del Arzobispo Romero, del padre Ellacuría y sus compañeros, y de cientos de cristianos y cristianas que, como ellos, dieron su vida por la liberación de los oprimidos, pues creían que era parte fundamental del evangelio. Recordémosles como siervos y siervas fieles a Dios, cuya vocación no era el martirio, sino la vida. El martirio vino como consecuencia ineludible de su elección por Dios y su reino.
Más aún, la experiencia de Jesús es, de alguna manera, similar a la de personas que fueron arrebatadas de su casa durante la noche por grupos paramilitares para terminar muertas, tiradas en alguna zanja o en algún terreno baldío. En efecto, tales personas tampoco tuvieron acceso a un proceso legal imparcial. Muchas de ellas no formaban parte de ningún movimiento armado, pero sí creían en el poder de la palabra, de las ideas, para cambiar el mundo. El problema es que para los tiranos de turno las ideas son tan peligrosas como las armas, y así como Jesús fue crucificado por causa de sus enseñanzas, estas personas fueron asesinadas por sus ideales. Dios, que no olvidó el cuerpo mutilado de Jesús, sino que lo levantó y le dio nueva vida, hará que un día triunfe la justicia en nuestros pueblos, gracias al sacrificio de ellos.
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
— adivinas: Bastantes mss., aunque no de especial valor, añaden: quién te ha pegado!.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
l 776 Isa 50:6; Isa 53:3; Mat 26:67
m 777 Luc 22:64
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
escupirle…cubrirle el rostro…darle de puñetazos…bofetadas. Véase coment. Mt 26:67.
Fuente: La Biblia de las Américas
65 (1) Esto fue el rechazo y menosprecio supremo que los judíos manifestaron hacia el Salvador-Esclavo, como se profetizó en Isa_53:3 .
65 (2) Esta fue una palabra de burla e irrisión.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
a escupirle. Cp. Isa 50:6.
Profetiza. Dicho en burla. Quizá querían decir Adivina quién es el que te golpea (en cada puñetazo que le daban).
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
Profetiza… Es decir, ¡Adivina!
Fuente: Biblia Textual IV Edición
R617 Περικαλύπτειν significa: cubrir todo alrededor.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
O, los ojos
O, sirvientes
O, le trataron
O, posiblemente, a garrotazos
Fuente: La Biblia de las Américas
Es decir, u161?Adivina!