Biblia

Comentario de Marcos 5:29 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Marcos 5:29 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Al instante, se secó la fuente de su sangre y sintió en su cuerpo que ya estaba sana de aquel azote.

5:29 — Y en seguida la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote — Su fe le logró la sanidad (ver. 34) que buscaba tan desesperadamente en el pasado. Su sanidad o curación fue instantánea. Lo pudo sentir enseguida. (No es así en los supuestos milagros de sanidad de hoy en día).

Lo que le trajo la curación no fue tocar el borde del manto de Jesús, sino la misma voluntad de Jesús. Pero su fe fue necesaria para su sanidad, y se manifestó en el tocar la ropa de Jesús.

“Aquel azote” había durado muchos años. Su fe en Cristo le trajo el alivio deseado.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

y en seguida. Éxo 15:26; Job 33:24, Job 33:25; Sal 30:2; Sal 103:3; Sal 107:20; Sal 147:3.

la fuente de su sangre se secó. Lev 20:18.

sana de aquel azote. Mar 5:34; Mar 3:10; 1Re 8:37; Luc 7:21.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

La frase en seguida y la palabra luego (que puede sustituirse por «muy pronto») dan a entender que la mujer y Jesús simultáneamente supieron que algo estaba ocurriendo. La mujer no tenía idea de que Jesús la había sanado a sabiendas. Mientras ella buscaba desaparecer entre la multitud, Jesús se volvió y preguntó: «¿Quién ha tocado mis vestidos?» Él deseaba corregir el pensamiento erróneo que ella pudiera haber tenido sobre su sanidad. Esta no había sido una cualidad mágica de la ropa de Él, sino que su divina voluntad fue la que hizo que ella sanara.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

la fuente de su sangre. El origen de su sangrado, comparándolo por analogía con el origen de una fuente.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

5:29 — Y en seguida la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote — Su fe le logró la sanidad (ver. 34) que buscaba tan desesperadamente en el pasado. Su sanidad o curación fue instantánea. Lo pudo sentir enseguida. (No es así en los supuestos milagros de sanidad de hoy en día).
Lo que le trajo la curación no fue tocar el borde del manto de Jesús, sino la misma voluntad de Jesús. Pero su fe fue necesaria para su sanidad, y se manifestó en el tocar la ropa de Jesús.
“Aquel azote” había durado muchos años. Su fe en Cristo le trajo el alivio deseado.

Fuente: Notas Reeves-Partain

Inmediatamente la fuente de su sangre se secó: Esto significa que la hemorragia se detuvo. Podríamos traducir, entonces, “se detuvo inmediatamente la hemorragia”, o “inmediatamente cesó su hemorragia”. Así lo sugieren varias versiones.

Azote: Si esta palabra no es muy común, puede utilizarse otra que sea apropiada para referirse a una enfermedad que ha afligido a la persona por mucho tiempo. Entre las posibilidades se encuentran «aflicción» (BA, NVI), «mal» (BJ), o, directamente, “sufrimiento”, “plaga” o “calamidad”. La palabra «enfermedad» (DHH) es demasiado general y no connota el tremendo sufrimiento que describe Marcos.

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

REFERENCIAS CRUZADAS

e 218 Luc 8:44

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

sintió… Lit. conoció; había sido… Lit. ha sido.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

Lit. conoció.

5.29 Lit. ha sido.

Fuente: La Biblia Textual III Edición