Comentario de Marcos 6:23 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Y le juró mucho: —Todo lo que me pidas te daré, hasta la mitad de mi reino.
6:23 — Y le juró: Todo lo que me pidas te daré, hasta la mitad de mi reino — No ha de entenderse esta última frase en sentido literal. Es una expresión de jactancia delante de halagadores. La promesa de Herodes, que no tenía él el poder de cumplirla, pues no era rey sino súbdito de Roma, fue sellada con un juramento, cosa que hizo peor su conducta. Compárese Lev 5:4-6.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
le juró. 1Sa 28:10; 2Re 6:31; Mat 5:34-37; Mat 14:7.
Todo lo que me pidieres. Est 5:3, Est 5:6; Est 7:2; Pro 6:2; Mat 4:9.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Debido a que ella lo complació, Herodes Antipas juró a Salomé un juramento solemne para darle hasta la mitad de su reino (una expresión que significa una gran cantidad pero con límites), palabras que nos recuerdan las promesas de Asuero a Ester (Est 5:3, Est 5:6). Este gesto era sin duda exagerado, pero Salomé aprovechó la oportunidad para su madre, Herodías, quien odiaba a Juan el Bautista.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
hasta la mitad de mi reino. Esta era una exageración hecha con la intención de reforzar su afirmación anterior de generosidad. Como monarca romano, Herodes en realidad no tenía «reino» que dar.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
6:23 — Y le juró: Todo lo que me pidas te daré, hasta la mitad de mi reino — No ha de entenderse esta última frase en sentido literal. Es una expresión de jactancia delante de halagadores. La promesa de Herodes, que no tenía él el poder de cumplirla, pues no era rey sino súbdito de Roma, fue sellada con un juramento, cosa que hizo peor su conducta. Compárese Lev 5:4-6.
El hombre, bajo el control de lo mundanal, está dispuesto a entregar su alma por un momento de gratificación carnal. Herodes no estuvo solo en esto.
Fuente: Notas Reeves-Partain
Y le juró, esto es, «le prometió bajo juramento» (NVI). La mitad de mi reino: En regiones donde no existe la idea de rey y reino, debería traducirse de manera diferente. “La mitad de mis tierras” o “la mitad de todo lo que poseo” son posibilidades. DHH sugiere: «La mitad del país que él gobernaba».
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
Est 5:3; Est 5:6; Est 7:2.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
j 269 Est 5:6; Est 7:2
k 270 Lev 5:4; Mat 14:7