Comentario de Mateo 13:52 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
El les dijo: —Por eso, todo escriba instruido en el reino de los cielos es semejante a un padre de familia que saca de su tesoro cosas nuevas y viejas.
13: 52 El les dijo: Por eso todo escriba docto en (que ha sido instruido en, FL; hecho un aprendiz o discípulo del reino, ATR; convertido en un discípulo de LBLA) el reino de los cielos es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas. — Los escribas copiaban las Escrituras y, por eso, eran reconocidos como conocedores de ellas. Los escribas que fueron instruidos en el reino de los cielos poseen y enseñan tesoros tanto del Antiguo Testamento como el Nuevo Testamento. Los apóstoles sabían el Antiguo Testamento y ahora reciben la instrucción de Cristo (el Nuevo Testamento). Todo maestro debe ser alumno. Esd 7:6; Esd 7:10, «Esdras había preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová y para cumplirla, y para enseñar en Israel sus estatutos y decretos». Esdras era buen ejemplo de un maestro que con diligencia estudiaba la ley de Dios para poder enseñarla a otros 2Ti 2:2, «Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros». Aquí se ve una «cadena» de alumno-maestro. Pablo enseña a Timoteo para que enseñe a hombres fieles para que éstos sean idóneos para enseñar a otros. Las Escrituras nos hacen completamente adecuados para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia (2Ti 3:16-17). No es posible ser obrero eficaz sin ser alumno eficaz.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
todo escriba docto en el reino. Mat 23:34; Esd 7:6, Esd 7:10, Esd 7:21; Luc 11:49; 2Co 3:4-6; Col 1:7; 1Ti 3:6, 1Ti 3:15, 1Ti 3:16; 2Ti 3:16, 2Ti 3:17; Tit 1:9; Tit 2:6, Tit 2:7.
que saca de su tesoro. Mat 12:35; Pro 10:20, Pro 10:21; Pro 11:30; Pro 15:7; Pro 16:20-24; Pro 18:4; Pro 22:17, Pro 22:18; Ecl 12:9-11; 2Co 4:5-7; 2Co 6:10; Efe 3:4, Efe 3:8; Col 3:16.
cosas nuevas y cosas viejas. Cnt 7:13; Jua 13:34; 1Jn 2:7, 1Jn 2:8.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas. Los discípulos no despreciarían las cosas viejas en honor de las nuevas. Por el contrario, las nuevas visiones que habían obtenido de las parábolas de Jesús vendrían a ser entendidas a la luz de las antiguas verdades y viceversa.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
13: 52 El les dijo: Por eso todo escriba docto en (que ha sido instruido en, FL; hecho un aprendiz o discípulo del reino, ATR; convertido en un discípulo de LBLA) el reino de los cielos es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas. — Los escribas copiaban las Escrituras y, por eso, eran reconocidos como conocedores de ellas. Los escribas que fueron instruidos en el reino de los cielos poseen y enseñan tesoros tanto del Antiguo Testamento como el Nuevo Testamento. Los apóstoles sabían el Antiguo Testamento y ahora reciben la instrucción de Cristo (el Nuevo Testamento).
Todo maestro debe ser alumno. Esd 7:6; Esd 7:10, «Esdras había preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová y para cumplirla, y para enseñar en Israel sus estatutos y decretos». Esdras era buen ejemplo de un maestro que con diligencia estudiaba la ley de Dios para poder enseñarla a otros 2Ti 2:2, «Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros». Aquí se ve una «cadena» de alumno-maestro. Pablo enseña a Timoteo para que enseñe a hombres fieles para que éstos sean idóneos para enseñar a otros. Las Escrituras nos hacen completamente adecuados para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia (2Ti 3:16-17). No es posible ser obrero eficaz sin ser alumno eficaz.
— es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas. — ¿Habría algo nuevo para judíos? ¿Habría verdades nuevas para los judíos? No creían en «cosas nuevas». Esto fue el grande error de los judíos. Jesús traía «cosas nuevas». El evangelio era nuevo. El reino era nuevo. Estaba llegando una nueva dispensación. Jesús era el mediador de un nuevo testamento. Ahora había nuevas promesas.
Y también traía cosas viejas, cosas guardadas para la ocasión especial. Jesús no vino para menospreciar las cosas viejas (Mat 5:17-20), sino para cumplirlas (Luc 24:44-45). Jesús no quería que sus discípulos olvidaran la ley antigua. Rom 15:4; 1Co 10:6; 1Co 10:11. El Antiguo Testamento — con los eventos, ejemplos y lecciones que contiene — es sumamente valioso para el discípulo del reino de los cielos. Los evangelistas y otros maestros que no utilizan frecuentemente el Antiguo Testamento no son escribas doctos en el reino. Su enseñanza no es adecuada. Para el entendimiento claro del Nuevo Testamento es indispensable estudiar el Antiguo Testamento. Por ejemplo, Mateo contiene muchas citas del Antiguo Testamento. Para entender Hebreos es necesario estudiar Levítico. Romanos, Gálatas y varios otros libros se refieren al Antiguo Testamento. Apocalipsis contiene muchas referencias al Antiguo Testamento.
El error grande y serio de los escribas y fariseos fue que no querían saber nada nuevo. No querían ser escribas doctos que podrían convertirse en discípulos para entrar en el reino de los cielos. La verdad es que no respetaban debidamente al Antiguo Testamento, sino que enseñaban sus propias tradiciones y, por lo tanto, no se preparaban para recibir las cosas nuevas de Cristo.
Nos conviene sacar cosas viejas y nuevas. Lo importante es que nosotros aprovechemos tanto los tesoros viejos como los tesoros nuevos. La Biblia es un solo libro. El mensaje es uno. Jesús dijo que «era necesario que se cumpliese todo lo que está escrito de mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos» (Luc 24:44). Este mismo evangelio de Mateo bien ilustra el tesoro de armonizar las cosas nuevas de Jesús con las cosas viejas del Antiguo Testamento. El apóstol Pablo es un ejemplo excelente de un maestro bien preparado en la cosas viejas que se preparó también para enseñar las cosas nuevas (el evangelio). Los escritos de este apóstol son riquísimos — un verdadero tesoro — porque presentan la armonía entre el mensaje del Antiguo Testamento y el mensaje del evangelio de nuestro Señor Jesucristo.
Fuente: Notas Reeves-Partain
— el reino de los cielos: Ver nota a Mat 3:2.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
NOTAS
(1) O: “toda persona instruida”.
REFERENCIAS CRUZADAS
j 662 1Co 4:1
k 663 Mat 12:35; Luc 6:45
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
escriba. Véase coment. en 2:4.
cosas nuevas y…viejas. Es decir, nuevas verdades acerca del reino reveladas en estas parábolas, y antiguas verdades reveladas en el A.T.
Fuente: La Biblia de las Américas
52 (1) Después de presentar las siete parábolas acerca de los misterios del reino, el Señor comparó al escriba que se ha hecho discípulo, con un dueño de casa que posee un tesoro, un almacén rico en cosas nuevas y cosas viejas, las cuales no sólo representan el conocimiento nuevo y el conocimiento viejo de las Escrituras, sino también las experiencias de vida, tanto nuevas como viejas, en el reino.
52 (a) Mat_2:4
52 (b) Mat_28:19 ; Hch_14:21
52 (c) Cnt_7:13
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
va sacando… El verbo gr. expresa la acción de sacar continuamente.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
R656 Οἰκοδεσπότῃ se usa en oposición con el sustantivo ἀνθρώπῳ (ἀνθρώπῳ se usa como sustituto de τινί; comp. el v. 45 -T195; comp. H433). [Editor. Ἀνθρώπῳ se usa en vez de τινί en aposición con οἰκοδεσπότῃ: un padre de familia.]
H400 Μαθητεύομαι se usa como un verbo defectivo, que significa: ser un discípulo.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
Lit., a un hombre
Fuente: La Biblia de las Américas
El gr. implica ir echando continuamente (el verbo está en presente) de lo que se va sacando: nuevo y viejo g Jer 20:9 g 1Co 9:16.