Biblia

Comentario de Mateo 2:11 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Mateo 2:11 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Cuando entraron en la casa, vieron al niño con María su madre, y postrándose le adoraron. Entonces abrieron sus tesoros y le ofrecieron presentes de oro, incienso y mirra.

2:11 Y al entrar (no en el pesebre, sino) en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; — 2:2; no adoraron a María, sino a Jesús ¡Imagínese el gozo de José y María cuando los magos adoraron al niño Jesús! Mateo habla de otros que le adoraron (8:2; 14:33; 15:25; 28:9, 17), pero no hay ningún texto que afirme que la gente adorara o invocara a María. «Cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios» (Heb 1:6). Jesús dijo, «Escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás» (Mat 4:10); Cristo era adorado porque El es Dios (Mat 1:23; Jua 1:1; Rom 9:5; Tit 2:13; 2Pe 1:1; 1Jn 5:20).

— y abriendo sus tesoros, le ofrecieron (PROSPHERO, esta es la palabra que se usa tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento en el sentido religioso de ofrendas a Dios, JFB) presentes: oro, incienso y mirra. — Los que visitaban a los reyes les llevaban presentes (1Re 10:2; Sal 72:10; Sal 72:15; Isa 60:6). Estos presentes valían mucho dinero. Compárese 26:7; Jua 12:3; Mar 12:44. «El dar es una vital y necesaria parte de la adoración. Los que adoran a Cristo, dan… La adoración verdadera simplemente no existe aparte del sacrificio» (JBC). Véanse 1Co 16:1, 1Co 16:2; 2Co 9:6, 2Co 9:7.

Algunos han sugerido que estos tesoros fueron muy útiles para la familia de José para su viaje a Egipto y su estancia allí. Dicen algunos que esto es ajeno a la narración de Mateo, que no cabe en la interpretación del texto, etc. Es cierto que Mateo no dice nada al respecto, pero los viajes y la vida por algún tiempo en una tierra extranjera cuesta dinero. No es malo observar que Dios siempre provee para sus siervos, y cuanto más por esta familia muy especial. La Biblia enseña mucho acerca del uso de los bienes materiales. En muchos textos Cristo mismo enseña sobre la fiel mayordomía. ¿Qué habrá hecho José, pues, con tantos tesoros? ¿guardarlos como recuerdos o usarlos para los gastos necesarios de la vida?

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

vieron al niño. Luc 2:16, Luc 2:26-32, Luc 2:38.

y postrándose, lo adoraron. Mat 2:2; Mat 4:9, Mat 4:10; Mat 14:33; Sal 2:12; Sal 95:6; Jua 5:22, Jua 5:23; Hch 10:25, Hch 10:26; Apo 19:10; Apo 22:8-10.

le ofrecieron presentes. Gén 43:11; 1Sa 10:27; 1Re 10:2, 1Re 10:10; Sal 72:10, Sal 72:15; Isa 60:6.

incienso. Éxo 30:23, Éxo 30:34; Lev 2:1, Lev 2:2; Lev 6:15; Núm 7:14, Núm 7:86; Sal 45:8; Mal 1:11; Apo 5:8.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Todo en este pasaje se centra en el Señor. María es una espectadora; José ni siquiera se menciona; Cristo es el receptor del homenaje y de los regalos. Él es quien ha de tener la preeminencia en todo (Col 1:18). El oro simbolizaba realeza; el incienso era una fragancia; la mirra era el ungüento para la muerte.

 PERSPECTIVA

¿Qué hay en un nombre?

Jesús era y es Emanuel: «Dios con nosotros» (Mat 1:23). En Jesús, Dios viene a los hombres y vive en su mundo, en vez de que ellos tengan que intentar la imposibilidad de llegar a Él. Jesús no saca al hombre de la confusión y del dolor de la vida diaria, sino que camina con él en medio de esas circunstancias. La salvación no es un escape del mundo, sino el compromiso de Dios con el mundo. Allí es donde está Jesús, como su nombre lo indica, y es donde las personas recibirán poder (Hch 1:8).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

entrar en la casa. Para el momento en el que los magos llegaron, María y José estaban en una casa, no en el establo (cp. Luc 2:7). vieron al niño con su madre María. Aunque Mateo menciona a María en conexión con su hijo, es Cristo quien siempre tiene el primer lugar (cp. los vv. Mat 2:13-14; Mat 2:20-21). oro, incienso y mirra. Regalos propios para un rey (cp. Isa 60:6). El hecho de que gentiles hubieran ofrecido este tipo de alabanza tuvo significado profético también (Sal 72:10).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

2:11 Y al entrar (no en el pesebre, sino) en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; –2:2; no adoraron a María, sino a Jesús ¡Imagínese el gozo de José y María cuando los magos adoraron al niño Jesús! Mateo habla de otros que le adoraron (8:2; 14:33; 15:25; 28:9, 17), pero no hay ningún texto que afirme que la gente adorara o invocara a María. «Cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios» (Heb 1:6). Jesús dijo, «Escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás» (Mat 4:10); Cristo era adorado porque El es Dios (Mat 1:23; Jua 1:1; Rom 9:5; Tit 2:13; 2Pe 1:1; 1Jn 5:20).
— y abriendo sus tesoros, le ofrecieron (PROSPHERO, esta es la palabra que se usa tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento en el sentido religioso de ofrendas a Dios, JFB) presentes: oro, incienso y mirra. — Los que visitaban a los reyes les llevaban presentes (1Re 10:2; Sal 72:10; Sal 72:15; Isa 60:6). Estos presentes valían mucho dinero. Compárese 26:7; Jua 12:3; Mar 12:44. «El dar es una vital y necesaria parte de la adoración. Los que adoran a Cristo, dan… La adoración verdadera simplemente no existe aparte del sacrificio» (JBC). Véanse 1Co 16:1, 1Co 16:2; 2Co 9:6, 2Co 9:7.
Algunos han sugerido que estos tesoros fueron muy útiles para la familia de José para su viaje a Egipto y su estancia allí. Dicen algunos que esto es ajeno a la narración de Mateo, que no cabe en la interpretación del texto, etc. Es cierto que Mateo no dice nada al respecto, pero los viajes y la vida por algún tiempo en una tierra extranjera cuesta dinero. No es malo observar que Dios siempre provee para sus siervos, y cuanto más por esta familia muy especial. La Biblia enseña mucho acerca del uso de los bienes materiales. En muchos textos Cristo mismo enseña sobre la fiel mayordomía. ¿Qué habrá hecho José, pues, con tantos tesoros? ¿guardarlos como recuerdos o usarlos para los gastos necesarios de la vida?

Fuente: Notas Reeves-Partain

— incienso y mirra: Perfumes típicos de Arabia.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

11 (1) Los pastores hallaron al niño Jesús, que todavía estaba en el pesebre ( Luc_2:16); después de esto, los magos del oriente vieron al niño en la casa.

11 (2) Lo adoraron como adorarían a Dios (4:10).

11 (3) Los presentes que los magos ofrecieron a Cristo fueron oro, olíbano y mirra. En figura, el oro es la naturaleza divina; el olíbano, la fragancia de la resurrección; y la mirra, la fragancia de la muerte. Indudablemente los magos ofrecieron estos presentes bajo la inspiración del Espíritu de Dios, para indicar el valor de la naturaleza divina de Cristo y lo preciosas que son Su resurrección y Su muerte. En los cuatro evangelios, los cuales son las biografías de Jesús, se ven en la vida de Jesús las cosas representadas por estos tesoros. Además, es posible que estos preciosos tesoros ofrecidos por los magos hayan provisto lo necesario para los viajes del Señor, de Judea a Egipto y de Egipto a Nazaret.

11 (a) Isa_9:6

11 (b) Mat_1:18 ; Mat_12:46 ; Luc_2:5-7

11 (c) Sal_72:10

11 (d) Sal_72:15 ; Isa_60:6

11 (e) Cnt_3:6 ; Cnt_4:6

11 (f) Éxo_30:23 ; Sal_45:8 ; Jua_19:39

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

en la casa…al niño. Estas palabras no indican necesariamente que los magos hubiesen venido algún tiempo después del nacimiento de Cristo. Naturalmente, la familia se habría mudado a una casa, lo antes posible, después del nacimiento de Jesús, y «niño» puede significar «recién nacido» (Jua 16:21). No sabemos cuántos eran los magos.

oro, incienso y mirra. Estos eran los regalos dignos de un rey. Los escritores («Padres») de la Iglesia primitiva entendían que el oro era símbolo de la deidad de Cristo; el incienso, de Su pureza; y la mirra, de Su muerte (porque se usaba para embalsamar).

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie

M68 El participio con la siguiente frase prepositiva, ἐλθόντες εἰς τὴν οἰκίαν, sencillamente significa: entrando en la casa.

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego

Esto es, María.

Fuente: La Biblia Textual III Edición