Pero yo os digo que todo el que mira a una mujer para codiciarla ya adulteró con ella en su corazón.
mas yo os digo. Mat 5:22, Mat 5:39; Mat 7:28, Mat 7:29.
que cualquiera que mira a una mujer. Gén 34:2; Gén 39:7; Éxo 20:17; 2Sa 11:2; Job 31:1, Job 31:9; Pro 6:25; Stg 1:14, Stg 1:15; 2Pe 2:14; 1Jn 2:16.
ya adulteró con ella. Sal 119:96; Rom 7:7, Rom 7:8, Rom 7:14.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
MIRA… PARA CODICIARLA. Lo que Cristo condena no es el repentino pensamiento que Satanás pudiera poner en la mente de una persona o un deseo impropio que se origina de un momento a otro. Más bien es un mal pensamiento o deseo acompañado de la aprobación de la voluntad humana. Es el tener un deseo inmoral que procuraría satisfacción si se presentara la oportunidad. El deseo interior por el placer sexual ilícito, si se contempla y no se resiste, es pecado (véase el ARTÍCULO NORMAS DE MORALIDAD SEXUAL, P. 1794. [Heb 13:4]).
(1) El creyente debe tener mucho cuidado de abstenerse de contemplar con agrado escenas de inmoralidad tales como las que se muestran en las películas o en la literatura pornográfica (cf. 1Co 6:15; 1Co 6:18; Gál 5:19; Gál 5:21; Efe 5:5; Col 3:5; 2Ti 2:22; Tit 2:12; Heb 13:4; Stg 1:14; 1Pe 2:11; 2Pe 3:3; 1Jn 2:16).
(2) En la esfera de la conservación de la pureza sexual, tanto la mujer como el hombre tienen su responsabilidad. La mujer creyente debe procurar no vestirse de manera que atraiga la atención a su cuerpo, provocando de ese modo la tentación en los hombres y estimulando la lujuria. Vestirse sin modestia es pecado (1Ti 2:9; 1Pe 3:2-3).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
REFERENCIAS CRUZADAS
u 206 Deu 5:21; 2Sa 11:2; Job 31:1; 2Pe 2:14
v 207 1Jn 2:16
w 208 Mar 7:21; Mar 7:23
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
28 (1) La ley de la vieja dispensación confronta el acto exterior de adulterio, mientras que la nueva ley del reino toca el motivo interior del corazón.
28 (a) Job_31:1
28 (b) 1Co_6:9 ; Gál_5:19-21 ; Efe_5:3-5
28 (c) Mat_15:19
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
El deseo en sí es pecaminoso, y un deseo impropio lleva a un acto pecaminoso.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
R1003 Πρὸς τό con el infinitivo puede expresar la idea de propósito o la de resultado (de propósito, a menos que sea un explicativo de βλέπων -R1075; simple acompañamiento, y -T144; con respecto a -BD402[5]; explica a βλέπων -MT218). [Editor. En este contexto, πρὸς τό con el infinitivo se refiere al resultado que surge de un conjunto de circunstancias, con el significado resultante: el que mira a una mujer de tal manera que se le despierte el deseo de tenerla (comp. el uso de πρός con el acusativo en 1Co 14:26 ; Col 2:23 y Jua 4:35). En esta interpretación es un explicativo de βλέπων.]
T73 Ἐμοίχευσεν se usa como un aoristo gnómico, es decir, se refiere a un hecho bien conocido.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
Biblia Peshitta 2006 Notas:
[12] 5.28 Se debe entender que se refiere a una mujer casada, pues de otro modo no sería adulterio sino fornicación. O Bien, un casado deseando a una mujer soltera. Por extensión analógica, es lo mismo respecto a la mujer que desea a un hombre.
Fuente: Peshitta en Español