Comentario de Números 14:11 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Entonces Jehovah dijo a Moisés: —¿Hasta cuándo me ha de menospreciar este pueblo? ¿Hasta cuándo no me ha de creer, a pesar de todas las señales que he hecho en medio de ellos?
¿Hasta cuándo?… Núm 14:27; Éxo 10:3; Éxo 16:28; Pro 1:22; Jer 4:14; Ose 8:5; Zac 8:14; Mat 17:17.
me ha de irritar. Núm 14:23; Deu 9:7, Deu 9:8, Deu 9:22, Deu 9:23; Sal 95:8; Heb 3:8, Heb 3:16.
no me creerán. Deu 1:32; Sal 78:22, Sal 78:32, Sal 78:41, Sal 78:42; Sal 106:24; Mar 9:19; Jua 10:38; Jua 12:37; Jua 15:24; Heb 3:18.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Al igual que los líderes de Israel en los días de Jesús, el pueblo rechazó las señales milagrosas de Dios. Su juicio preliminar fue rechazar por completo a la nación. El pueblo rechazó a Dios y sus señales y en respuesta Él ofreció a Moisés dirigir una nueva nación.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
¿HASTA CUÁNDO NO ME CREERÁN…? En el fondo de la rebeldía de Israel estaba la incredulidad que se originaba en su descuido en recordar la pasada fidelidad de Dios, en confiar en Él como su Señor y en aceptar su palabra. En la opinión de ellos, ya no podían confiar en el Señor bajo todas las circunstancias.
(1) Creer en Dios significa aceptar como verdad todo lo que Él dice y actuar en consecuencia, vivir dependiendo de sus promesas, andar en sus caminos y amarlo con todo el corazón y toda el alma (Deu 10:12; véase el ARTÍCULO LA FE Y LA GRACIA, P. 1582. [Rom 5:21]).
(2) La presencia de la fe lleva a que Dios acepte al alma y la considere justa delante de El (véase Gén 15:6, nota); la ausencia de fe condena al ser humano (Jua 3:36).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
irritar … no me creerán. Habían rehusado confiar en Dios y su poder para darles la tierra de Canaán, a pesar de todas las señales que había realizado en medio de ellos.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
La misericordia y juicio del Señor. Las palabras del Señor comienzan con un análisis exacto del pecado de Israel: su incredulidad. Ellos rehusaron creer en Dios y lo trataron con menosprecio (v. 11). “El que no cree a Dios le ha hecho mentiroso” (1 Jn. 5:10). La verdadera falta de Israel fue pensar que Dios no era capaz de cumplir su palabra. La fe es en esencia la certeza de que Dios cumplirá lo que ha prometido. La incredulidad de Israel en este momento está en contraste con la fe de su antepasado Abraham (Gén. 15:6). La respuesta de Dios es doble: Yo lo heriré con peste y lo desalojaré. “Desalojar” significa desheredar; es decir, no recibirían la herencia de la tierra. Moisés intercedió en base al pacto (v. 16) y a la misericordia de Dios (vv. 18, 19). El se había encontrado en esta misma situación cuando Israel hizo el becerro de oro (Exo. 32:11-14). La verdadera oración tiene esta característica: Descansa en las promesas de Dios y pide que Dios cumpla su palabra. Esto es lo que se quiere decir por oración de fe; se hace de acuerdo con su voluntad (1 Jn. 5:14). La gloria de Dios en toda la tierra está ligada a su pacto y cumplimiento del mismo. La respuesta del Señor nos enseña mucho en cuanto a lo que es el corazón de la teología bíblica. Primero, hay perdón, a causa del cual Dios continuaría con Israel como su pueblo y llevaría a cabo su promesa con la nueva generación (v. 24). Segundo, hay juicio. El perdón nunca es arbitrario, ni a expensas de la gloria de Dios. Su juramento (vv. 21-25) muestra que su misma gloria es su principal interés. Por lo tanto, quienes le han despreciado nunca verán la tierra. Al siguiente día tuvieron que echar marcha atrás en su camino, regresando hacia el mar Rojo. Esto era como anular el progreso que habían logrado.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
REFERENCIAS CRUZADAS
t 746 Éxo 16:28
u 747 Núm 14:23
v 748 Deu 9:23; Sal 78:42; Sal 106:24; Jua 12:37; Heb 3:19
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
señales. Sucesos u objetos físicos que tienen un sentido especial, como evidencia de la presencia de Dios.
Fuente: La Biblia de las Américas
Las señales realizadas en Egipto tenían el propósito de estimular al pueblo a la fe en Dios (cp. Éxo 4:5).
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
[o] DIOS PERDONA La siguiente página y la oración de Moisés son muy semejantes a lo que leímos en Exodo 32,9,13. Encontraremos algo equivalente en Jeremías. Este diálogo es ciertamente una manera de expresar tanto lo que debiera ser la reacción de un Dios justo que castiga la desobediencia como cual será la actitud de Dios que ve más allá del momento presente. El nunca se sentirá disminuido por nuestras faltas, lo perdona todo castigando. Podría pensarse que este «perdón de Dios» muestra solamente la continuidad de su obra a través de las edades: castiga a la generación presente, la que no entrará enm la Tierra, pero no detendrá la obra que ha emprendido al elegirse un pueblo. Esa obra debe continuarse hasta el fin de la historia. Sin embargo la palabra perdonar da a entender algo más. No hay nada en Dios que recuerde las pequeñeces de nuestra psicología; al contrario el ES en el nivel más amplio la capacidad de darse en la comprensión y el amor o el juego mutuo. Y por profundo que sea el misterio de Dios es soberanamente importante para nosotros sostener esta palabra de perdón, que sólo tendrá sentido allí donde haya mirada mutua y deuda verdadera que el amor reconoce. No le pidamos al libro de los Números, pues aquí se trata de tradiciones antiguas, el desarrollo y las finezas que irán apareciendo después. Los profetas, por sobre todo, más que de la paciencia de Dios hablarán de su fidelidad; y posteriormente vendrá la conciencia de una relación mutua entre Dios y la persona humana en un solo Espíritu (1 Cor 6,17). Allí todo es perdonado, y Dios es más que paciente puesto que ya se ha entregado a sí mismo.