Comentario de Proverbios 4:5 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
¡Adquiere sabiduría! ¡Adquiere entendimiento! No te olvides ni te apartes de los dichos de mi boca.
Adquiere sabiduría. Pro 1:22, Pro 1:23; Pro 2:2-4; Pro 3:13-18; Pro 8:5; Pro 17:16; Pro 18:1; Pro 19:8; Pro 23:23; Stg 1:5.
no te olvides ni te apartes. 2Cr 34:2; Job 23:11; Sal 44:18; Sal 119:51, Sal 119:157.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Los versículos del Pro 4:5-9 nos presentan una impresionante plegaria del padre a sus hijos para que adquieran sabiduría de la forma que sea. La presentación de estos primeros capítulos de Proverbios sigue el siguiente esquema: afirmación, reafirmación y embellecimiento. Debido al uso generoso uso de la creatividad en las afirmaciones, las ideas son tremendamente firmes y fuertes. Particularmente notables, son las palabras del v. Pro 4:7 : Sabiduría ante todo. En Pro 1:7, la frase ante todo se traduce como «el principio», pero aquí, lleva consigo una idea de «primera en importancia»
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
ADQUIERE SABIDURÍA, ADQUIERE INTELIGENCIA. La sabiduría de Dios es esencial para una vida significativa y piadosa (vv. Pro 4:20-22; Pro 3:21-22). Por lo tanto, se debe buscar sobre todas las cosas. Sin embargo, no es fácil obtener tal sabiduría, porque se le da sólo a quienes diligentemente pagan el precio por ella. La sabiduría se adquiere por dos vías.
(1) Instrucción. Mediante la instrucción, una persona experimentará la transformación espiritual de apartarse del mal y volverse al conocimiento de Dios. Una relación personal con Dios es el primer paso en la obtención de la verdadera sabiduría. Los creyentes deben temer al Señor y aborrecer el mal (Pro 8:13; Pro 9:10).
(2) Devoción. La sabiduría es para la persona que aprecia su valor y por lo tanto la busca diligentemente (Pro 8:17). La persona sabia aprende de la instrucción (Pro 9:9) y del castigo de Dios (Pro 3:11), acepta los mandamientos de Dios (Pro 10:8), escucha el consejo piadoso de los padres y de los demás (v. Pro 4:1; Pro 13:10), y aprecia la sabiduría como más valiosa que la plata, el oro o las piedras preciosas (Pro 3:14-15; Pro 23:23). Jesucristo es la suprema manifestación de la sabiduría de Dios (1Co 1:30; Col 2:2-3). Así que esta exhortación del AT es equivalente a un llamamiento a la entrega de la vida a Jesucristo. Hay que apartarse del pecado y del yo, y volverse a Él, sacrificando todo lo que sea necesario a fin de seguirlo como su discípulo (Mat 13:44-46; Luc 14:33).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
REFERENCIAS CRUZADAS
k 190 Stg 3:17
l 191 Neh 8:8; Sal 49:3; Pro 9:10
m 192 2Cr 34:2; Sal 44:17; Pro 3:1