Biblia

Comentario de Salmos 56:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Salmos 56:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

(Al músico principal. Sobre “La paloma silenciosa de la lejanía”. Mictam de David compuesto cuando los filisteos lo apresaron en Gat) Ten misericordia de mí, oh Dios, porque me pisotea el hombre; me oprime combatiéndome todo el día.

Año 1062 a.C. (Título) “La paloma silenciosa, en paraje muy distante”. Algunos piensan que se refiere a David, o sus compañeros; y otros consideran este nombre como un tono, o un instrumento musical.

Miktam, o Salmo de oro. Sal 16:1; Sal 57:1; Sal 58:1; Sal 59:1; Sal 60:1.

cuando los filisteos le prendieron. 1Sa 21:11-15; 1Sa 29:4.

Ten misericordia de mí. Sal 31:9; Sal 57:1-3; Sal 59:10; Sal 69:13-16; Sal 136:10, Sal 136:15, Sal 136:17-20; Sal 143:12.

me devoraría el hombre. Sal 21:9; Sal 27:2; Sal 35:25; Sal 57:3; Sal 106:17; Sal 124:3; Pro 1:12; Lam 2:2, Lam 2:5, Lam 2:16; Ose 8:8; 1Co 15:54.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

David, ora a Dios en confianza de su Palabra, se queja de sus enemigos, Sal 56:1-8.

Profesa su confianza en Dios alabándole, Sal 56:9-13.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

es un salmo de lamentación. Este poema de David tiene el mismo escenario que Sal 34:1-22; la huida de David a Aquis, en Gat. En Sal 34:1-22 a Aquis se la llama «Abimelec», su designación real. El hecho que dos salmos de David estén ligados a este acontecimiento demuestra lo devastadora que esta experiencia fue para David. Alejado de todo lo que había conocido, David trató de encontrar refugio entre los filisteos. Cuando estos se volvieron contra él, casi perdió la vida y escapó haciéndose pasar por loco (1Sa 21:10-14). Este salmo se cantaba en la adoración colectiva, porque está dirigido al «músico principal» y se canta con la melodía «La paloma silenciosa en paraje muy distante». La estructura del poema es:

(1) un clamor a Dios que es la única ayuda para David;

(2) una confesión de confianza en Dios (vv. Sal 56:3, Sal 56:4);

(3) una descripción de la obra de los enemigos de David (vv. Sal 56:5-7);

(4) una confesión de por qué David confía en Dios durante su momento de angustia (vv. Sal 56:8-11);

(5) un voto a alabar al Señor (vv. Sal 56:12, Sal 56:13).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Ten misericordia de mí: David clama a Dios a causa de su insoportable sentimiento de pérdida durante su época como fugitivo en tierra extranjera (1Sa 21:10-15).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Salmo 56 (Vg 55): Firme Confianza en Dios.
T ambién este poema tiene el aire de lamentación de un justo perseguido que pone toda su confianza en la protección divina. Bajo este aspecto, este salmo tiene gran similitud con el que sigue, ya que en ambos la confianza en Dios es la nota dominante. A pesar de los peligros graves inminentes, la fe en la liberación permanece en el ánimo del salmista.
Podemos dividir esta composición poética en tres partes: a) lamentación y confianza en Dios (1-5); b) lamentación y plegaria (6-9); c) actitud confiada y promesa de acción de gracias (10-14). Cada parte tiene dos estrofas. El estilo es vigoroso, aunque se repiten muchas frases estereotipadas, predominando el paralelismo sintético.
El título asigna este poema también a David y da como circunstancia histórica su huida a la tierra de los filisteos, en tierra de Gat1. En ese supuesto, el poeta, futuro rey de Jerusalén, se dirigiría desde la tierra extranjera a su Dios, lamentándose de la persecución injusta de que es objeto y pidiendo la victoria y la liberación. Sin embargo, aunque por la lengua y el estilo puede sostenerse que es anterior al exilio, no pocos críticos modernos creen que es abiertamente postexílico 2. Como otros salmos, éste está compuesto después de la liberación de un peligro, y por ficción literaria poética se describe como presente la angustia pasada. Todo esto no es más que un pretexto para cantar la providencia divina en la asamblea litúrgica de los fieles. La experiencia personal del salmista es que Yahvé no abandona a los suyos, y, por eso, en una ceremonia de acción de gracias, lo declara para edificación de los fieles también postergados por su fidelidad a la Ley de Yahvé.

Lamentación y confianza en Yahvé (1-5).
1 Al maestro del coro. Sobre “la paloma muda de las lejanías.” De David, Miktam: cuando los filisteos le prendieron en Gat3. 2Apiádate de mí, ¡oh Dios! porque me persiguen los hombres, me oprimen y combaten constantemente. 3 Sin cesar me persiguen mis enemigos, pues son muchos los que me combaten. 4 Oh Altísimo Cuando yo temo4, en ti confío. 5Con el favor de Dios celebraré su promesa, en Dios me confío y nada temo, ¿Qué podrá hacer un hombre contra mí? 5

Como en otros salmos, el poeta inicia su exposición apelando al poder de Dios para que le libre de la hostilidad de los muchos que le persiguen. Algunos autores pretenden que este poema se ha de entender en sentido colectivo, como si el salmista expresara los sentimientos de Israel como nación cercada de enemigos; pero todo el contexto del salmo insinúa que es un problema personal, y todas las alusiones a combates se han de tomar en sentido metafórico. La hostilidad contra el justo es sistemática y constante, como la de fieras que están al acecho 6; pero, con todo, la confianza en Dios se aumenta en los momentos de peligro, porque está seguro el salmista perseguido que llegará a celebrar el cumplimiento de la promesa de liberación 7. Dios no puede desamparar a los suyos en los momentos críticos, y, en ese supuesto, no hay hombre que pueda oponerse al justo (v.5). Sus maquinaciones humanas están condenadas al fracaso, porque no cuentan con la ayuda del Omnipotente, que está a disposición del justo. El ser humano es sólo “carne” frágil y perecedera y no puede competir con el que es eterno y omnipotente 8.

Lamentación y plegaria (6-9).
6 Todo el día abominan mis palabras 9, contra mí sus maquinaciones van al mal. 7 Se conjuran, están al acecho, espían mis pasos, como esperando (acabar con) mi vida. 8 Pésalos, ¡oh Dios! en la medida de su iniquidad 10, tú que abates a los pueblos en tu cólera. 9 Tú que tienes cuenta de mi vida errante, pon mis lágrimas en tu redoma. ¿No están (escritas) en tu libro?

En torno al salmista hay una conjura organizada. Calumniadores sistemáticos, interpretan mal o abominan de sus palabras 11. Morosamente describe el salmista las tentativas hostiles de sus adversarios, aunque no concreta la causa de esta animadversión sistemática e injusta. Están al acecho como cazadores dispuestos a caer sobre la presa; incluso buscan ocasión para quitarle la vida a traición 12. En un arranque vindicativo, el justo asediado pide a Dios que los castigue según merecen: pésalos en la medida de su iniquidad (v.8). Yahvé es el Juez supremo y está sobre todos los pueblos, a los que abate según sus altos e inescrutables designios, que exigen también la manifestación de su cólera. Parece como si el salmista atribulado apelara al juicio general sobre todos los pueblos y pecadores, conforme a la expectación general de los últimos tiempos del A.T. La justicia de Dios había de manifestarse solemnemente antes de la inauguración mesiánica 13, y las almas justas perseguidas suspiraban por este día de vindicación de la virtud de los fieles yahvistas. Conforme a esta perspectiva, el salmista une su causa a la de los justos perseguidos y apela al Dios del juicio sobre los pueblos y pecadores para que adelante la manifestación de su justicia y castigue a los impíos que le persiguen.
El salmista perseguido lleva una vida errante, y esta situación angustiosa es bien conocida del propio Dios. Por eso pide que sus lágrimas no sean echadas en olvido, sino guardadas cuidadosamente en la redoma en que Dios guarda lo más precioso. El salmista juega con la creencia de que Dios lleva el registro de los actos humanos en el Libro de la Vida 14, y, conforme a ello, supone metafóricamente que tiene también un recipiente para recoger las lágrimas de los justos perseguidos 15, para acordarse de ellos y hacerles justicia. San Bernardo dirá bellísimamente, dentro ya de la perspectiva evangélica: “Lacrimae paenitentium vinum angelorum.” Del mismo modo, las lágrimas de los justos perseguidos del A.T. son guardadas cuidadosamente, porque ellas claman a Dios por la justicia y muestran la fidelidad de los suyos; por eso son cuidadosamente guardadas, de modo que no se pierdan.

Confianza en Dios y promesa de acción de gracias (10-14).
10 Entonces volverán la espalda mis enemigos, en el día en que te invoque; así sabré que Dios está en mi favor 16. 11 Con (el favor) de Dios celebraré su promesa 17, con la ayuda de Yahvé alabaré su palabra. 12 En Dios me confío y nada temo. ¿Qué podrá hacer un hombre contra mí? 13 Yo te debo, ¡oh Dios! mis ofrendas votivas, te ofreceré ofrendas de alabanza, 14 Porque libraste mi vida de la muerte, y mis pies de la caída 18, para que pueda andar en la presencia de Dios, en la luz de los vivientes.

Después de implorar la intervención justiciera de Dios sobre los impíos, el salmista expresa su seguridad en la afrentosa derrota de ellos. Ello será una confirmación de que tiene a Dios a su favor (v.10) 19. Entonces llegará el momento de la acción de gracias por el cumplimiento de su promesa, o “palabra” solemnemente empeñada, de ayudar a los que le son fieles 20. Cumplirá sus ofrendas votivas y sacrificios de alabanza o de acción de gracias: durante sus horas de opresión ha hecho votos a su Dios, y ahora llega el momento de cumplirlos 21. Yahvé le ha otorgado el mayor de los dones, pues le ha librado de la muerte, de forma que pueda continuar en la presencia de Dios, disfrutando de la luz de los vivientes, en contraposición a la región tenebrosa del Seol, adonde hubiera ido si hubiera muerto 22. Aunque los muertos estaban sujetos al dominio de Yahvé 23, sin embargo, no había comunicación afectiva entre ellos y su Dios, y sólo entre los vivos se podía alabar a Dios 24. Por eso habla el salmista de andar en la presencia de Dios, es decir, participar de las intimidades de la vida litúrgica en el templo, donde Yahvé se manifiesta de un modo particular a sus fieles 25. El mejor comentario – dentro de la nueva perspectiva evangélica – son las palabras de Jesús: “Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no anda en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida” 26.

1 Cf. Sam 21:10s. – 2 Así E. Podechard, o.c., I 249. – 3 El título que traducimos “sobre la paloma…” debe aludir a alguna canción que empezara por estas palabras en hebreo. La Vg, siguiendo a los LXX: “Pro populo, qui a sanctis longe factus est.” Sobre las otras indicaciones véase com. a Sal 4:1; Sal 16:1; Sam 21:10-15; 27:23. – 4 La palabra que traducimos por “Altísimo” es marom del verso anterior. Así NP. – 5 Lit. “¿Qué me hará la carne?” Aquí carne es sinónimo de hombre frágil y perecedero. – 6 Cf. Sal 57:4; Sal 9:20; Sal 9:10, Sal 9:19; Sal 42:10. – 7 Cf. Sal 130:6; Sal 44:9. – 8 Cf. Sal 78:40; Gen 6:3; Job 10:4; Isa 40:5-6; Jer 17:5. – 9 Verso oscuro. Nuestra traducción se aproxima a la de los LXX. Lit. el TM: “angustian mis palabras.” – 10 Verso oscuro, muy diversamente traducido. El TM: “Por encima de su iniquidad, ¿salud para ellos?” La Vg, siguiendo a los LXX: “pro nihilo salvos facies illos” (lee ‘ein en vez de ‘awen). Nuestra traducción, muy generalizada entre los críticos, se basa en el cambio de pallet (salvar) en palles (pesar, medir). Así NP. – 11 Cf. Sal 7:45. Btb. de Jer.: “desfiguran mis palabras.” – 12 Cf. Sal 119:96; Sam 23:22; Sal 59:4; Sal 10:9. – 13 Cf. Jl3:1s. – 14 Cf. Exo 32:32; Sal 69:29; Sal 139:17; Mal 3:16. – 15 Cf. Jos 9:34; Sam 16:20; Sal 119:84. – 16 Kirkpatrick: “Cuando clame, mis enemigos se volverán atrás; esto lo sé, pues Dios está a mi favor.” – 17 Lit. “palabra.” La segunda parte del verso es considerada como repetición innecesaria de un glosista que quería mantener el nombre de Yahvé. – 18 Lit el TM: “¿No (has librado) mis pies?” – 19 Cf. Sal 9:4; Sal 118:7. – 20 Cf Pro 13:13; Pro 16:20. – 21 Cf. Sal 66:4; Aet 21:23. – 22 Cf. Job 33:28-30; Ecl 4:15; Ecl 6:5; 1:Ecl 1:7; Ecl 18:18; Lam 3:6. – 23 Cf. Job 26:6; Pro 27:20. – 24 Cf. Sal 88:12. – 25 Cf. Sal 36:10; Sal 16:11. – 26 Jua 8:12.

Fuente: Biblia Comentada

Salmo 56 (55): Salmo de súplica individual que subraya la expresión de confianza en Dios en medio del peligro.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

1Sa 21:10-12.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

— todo el día: Se pone así de relieve la continuidad de la agresión del enemigo, circunstancia que se reitera en Sal 56:2; Sal 56:5.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Salmo 56. Temor y Fe

El día que tengo temor (3) … No temeré (4). Esta paradoja expresa el corazón del Salmo. La situación se relata en 1 Sam. 21:10-15 y es comentada en el Sal. 34 (una meditación subsecuente: que no fue la astucia de 1 Sam. 21:12, 13 sino la oración lo que efectuó la huida) al igual que aquí: una meditación de David cuando estaba bajo arresto domiciliario en Gat, presumiblemente como un importante rehén. El Salmo consiste de seis secciones balanceadas: David, objeto de la hostilidad del hombre (1, 2) es objeto del cuidado de Dios (9-11); la fe que vence el temor (3, 4) es una confianza que emana de la oración (7, 8); y David siendo oprimido por el hombre (5, 6) se convierte en el David que ha hecho su voto a Dios (12, 13).

1, 2 Un breve clamor a Dios concentrado en el peligro que lo rodea. Contrástese 12 con 13, ¡una referencia al peligro en medio de un concentrarse en Dios! Tal es el efecto del que dice confío (3, 4) porque actúa por medio de la oración (9-11). Cuando ponemos los ojos en Cristo “lo terrenal sin valor será”. 3, 4 El día, o sea “en el mismo momento”. Cuya palabra. La fe no es un “sentimiento” de que todo resultará para bien. Es una convicción que brota de lo que Dios mismo ha dicho, una confianza en sus promesas. En el v. 1 hombre es un palabra que subraya la fragilidad humana; aquí, mortal, “carne” implica un contraste con Dios (Isa. 31:3; 2 Crón 32:8), debilidad contrastando con fuerza (cf. 32:8). Así, cuando la fe se vuelve a Dios como él se revelara en su palabra, la perspectiva cambia. 5, 6 ¡Qué bien describe la situación en que se encontraba David! La corte de Saúl tergiversando sus palabras y conspirando contra él; los filisteos observando todos sus movimientos (¡como seguramente han de haberlo hecho cuando el que mató a Goliat tuvo el descaro de presentarse en Gat!). 7, 8 Balanceando los vv. 1, 2: un ruego pidiendo cuidado divino. 7 Quizá debiera leerse: “Al tomar en cuenta su iniquidad, ¿puede haber alguna salida para ellos?” Los pueblos, “estos pueblos”. 8 Cada tristeza que sentimos (lágrimas), cada momento de dolor (el libro) está guardado en los cielos esperando la acción divina). 9-11 Que (9), “el día”: en el v. 3, era el día de la fe; aquí el día de oración, porque la oración es la primera manera en que se expresa la fe auténtica y, a su vez, lleva a una fe más integral: cf. 10, 11 con 3, 4. Hombre (11), es el hombre creado por Dios, por lo tanto totalmente bajo su control soberano. 12, 13 Contra mí son todos sus pensamientos para mal (5) es (lit.) “sobre mí, todos sus pensamientos”; en el v. 12 sobre mí … tus votos expresa que cuanto más nos amenaza el mundo, más grande será nuestro compromiso; no en el sentido de regatear con Dios, sino para mostrar una determinación de avanzar espiritualmente como resultado de una experiencia soportada y una liberación otorgada. En el v. 13 (para que) se nota que éste es justamente el propósito que Dios tenía en mente al otorgar liberación.

Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno

56.1ss Tal vez este salmo se escribió en la misma ocasión que el Salmo 34, cuando David huía de Saúl al territorio filisteo. Tuvo que fingir locura ante Aquis cuando algunos oficiales sospecharon de él (1Sa 21:10-15).56.3, 4 David afirma: «¿Qué puede hacerme el hombre?» ¿Cuánto daño puede hacernos la gente? Puede causarnos dolor, sufrimiento y muerte. Pero nadie nos puede robar nuestras almas ni el futuro más allá de esta vida. ¿Cuánto daño podemos hacernos nosotros? Lo peor que podemos hacer es apartarnos de Dios y perder nuestro futuro eterno. Jesús dijo: «No temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar» (Mat 10:28). En su lugar, debemos temer a Dios.56.8 Aun en nuestra tristeza más profunda, ¡Dios se interesa por nosotros! Jesús nos recordó un poco más acerca de cuánto nos comprende Dios: conoce la cantidad de cabellos que hay en nuestra cabeza (Mat 10:30). A menudo tambaleamos entre la fe y el temor. Cuando se sienta tan desalentado que piense que nadie lo comprende, recuerde que Dios conoce todos los problemas y ve cada una de nuestras lágrimas.

Fuente: Comentarios de la Biblia del Diario Vivir

NOTAS

(1) Enc. Posiblemente: “Paloma del Silencio, los lejanos”. Por una leve corrección: “Paloma de los árboles grandes a lo lejos”.

(2) Enc. Véase Sal 16:1 Enc, n.

REFERENCIAS CRUZADAS

a 1855 1Sa 21:10

b 1856 Sal 57:3; Sal 124:2

c 1857 Sal 27:2; Sal 124:3

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

Salmo 56 Este es un Salmo de lamento. Los enemigos de David son numerosos (vers. 2), implacables (vers. 1-2, 5), poderosos (vers. 1, 2) y astutos (vers. 5-6). Sin embargo son meras criaturas (vers. 1, 4) y no pueden luchar contra Dios. Aunque son astutos, la palabra de Dios es más segura (vers. 6, 11). Por tanto, el rey elegido de Dios confía en El a pesar de grandes dificultades contra él en la tierra, porque reconoce que Dios está a su lado y que lo cuida (vers. 8, 9). Los motivos normales del Salmo de lamento se distribuyen en tres estrofas: 1) La primera (vers. 1-4) contiene sus palabras iniciales (vers. 1), un lamento acerca de sus enemigos implacables que lo atacan (vers. 1, 2), una petición por el favor divino y una expresión de la confianza del salmista en la palabra de Dios (vers. 3, 4); 2) la segunda estrofa (vers. 5-11) comienza con un lamento acerca de las persistentes artimañas contra la vida del rey (vers. 5, 6), una petición para que Dios destruya al impío (vers. 7) y una fuerte expresión de fe en Dios que lo cuida (vers. 8-11); 3) la estrofa final (vers. 12, 13), en la que alaba a Dios por librar sus pies del enemigo que deseaba que el rey cayera. Las dos primeras estrofas están unidas por expresiones directas (vers. 1, 7), el lamento acerca de sus implacables enemigos (vers. 1-2, 5), y expresiones de fe similares (v. vers. 4a y 10b; 4b y 11). La mención de los votos y las ofrendas de gratitud en vers. 12, 13, sugieren que el Salmo era usado en la adoración pública en el templo.

Fuente: La Biblia de las Américas

paloma silenciosa… El significado de esta frase es desconocido. Se sugiere que es una alusión a los años de peregrinación de David.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

paloma silenciosa… El significado de esta frase es desconocido. Se sugiere que es una alusión a los años de peregrinación de David.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

* O, La paloma de los terebintos lejanos

** Posiblemente, Poema epigramático, Salmo de expiación

*** Véase 1Sa 21:10, 1Sa 21:11

O, acosado

O, un combatiente

Fuente: La Biblia de las Américas

Tít. El significado de esta frase es desconocido. Se sugiere que es una alusión a los años de peregrinación de David.

Fuente: La Biblia Textual III Edición

SALMO 56 (55)[1] 1 Sam 21, 12.[12] Alude a los sacrificios pacíficos que la ley prescribía.

Fuente: Notas Torres Amat