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Comentario de Salmos 57:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Salmos 57:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

(Al músico principal. Sobre “No destruyas”. Mictam de David compuesto cuando huyó de Saúl a la cueva) Ten misericordia de mí, oh Dios; ten misericordia de mí, porque en ti ha confiado mi alma. En la sombra de tus alas me ampararé, hasta que pasen las calamidades.

Año 1061 a.C. (Título).

No destruyas. Un Salmo de oro. Se supone que este Salmo fue llamado [al-tashjet,] o “no destruyas,” debido a que David se dirigió a uno de sus compañeros cuando iba a matar a Saúl en la cueva; y [mictam, o “de oro,” por lo que es digno de haber sido escrito en oro. Sal 58:1; Sal 59:1.

cuando huyó de delante de Saúl. Sal 142:1; 1Sa 22:1; 1Sa 24:3, 1Sa 24:8.

Ten misericordia de mí. Sal 56:1; Sal 69:13-16; Sal 119:76, Sal 119:77.

Porque en tí ha confiado mi alma. Sal 9:10; Sal 13:5; Sal 125:1; Isa 50:10.

en la sombra de tus alas. Sal 17:7, Sal 17:8; Sal 36:7; Sal 61:4; Sal 63:7; Sal 91:1, Sal 91:4, Sal 91:9; Rut 2:12; Luc 13:34.

hasta que pasen los quebrantos. Isa 10:25; Isa 26:20; Mat 24:22; Jua 16:20; Stg 5:10, Stg 5:11; Apo 7:14; Apo 21:4.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

David en oración huye hacia Dios, se queja de su peligroso caso, Sal 57:1-6.

Se anima asimismo a confiar en Dios, Sal 57:7-11.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

es otro de los poemas de David en que el título indica el escenario específico del salmo. El relato de la vida de David indica que dos veces se ocultó en cuevas: una vez en Adulam (1Sa 22:1-5), que era el escenario del Sal 142:1-7, y una vez en En-gadi (1Sa 24:1-7), el escenario de este poema. En En-gadi, David le perdonó la vida a Saúl, aunque Saúl se había vuelto un blanco fácil; mientras perseguía a David, el rey había entrado a una cueva a orinar y ocurrió que eligió la misma cueva en que se ocultaba David. En vez de matar a Saúl mientras tuvo la oportunidad, David cortó un pedazo del traje del rey. Más tarde David se arrepintió hasta de ese acto contra Saúl. Este salmo es uno de los cuatro que se hicieron con la melodía «No destruyáis» (Sal 58:1-11; Sal 59:1-17; Sal 75:1-10). La estructura del poema es la siguiente:

(1) un llamado a la misericordia en medio de las calamidades (vv. Sal 57:1-3);

(2) una confesión de confianza en medio de los problemas (vv. Sal 57:4-6);

(3) una determinación de alabar a Dios en medio del pueblo (vv. Sal 57:7-11).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

El clamor inicial Ten misericordia de mí es similar a muchos de los salmos de lamentación, pero aquí está inmediatamente seguido por una confesión de confianza en el Señor.

en la sombra: El cuadro de ocultarse bajo las alas del ave madre es un tema familiar en los Salmos (Sal 91:1-4). Aquí el salmista promete que sólo clamará a su Dios, porque sólo Dios puede librarlo de sus quebrantos. La palabra hebrea que se traduce salvará se traduce «cumplirá su propósito en mí» en Sal 138:8, la cuestión es que Dios actúa en beneficio de su siervo.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

EN LA SOMBRA DE TUS ALAS. La sombra de las alas de Dios representa su amor, protección, fortaleza y presencia misericordiosa. Sus hijos se refugian bajo esas alas cuando acuden a Él en oración y confían en Él con fe (véanse Sal 17:8; Sal 36:7; Sal 91:4). Bajo sus alas los creyentes están protegidos de todo lo que obre contrario a su propósito para la vida de ellos (v. Sal 57:2; véase Sal 17:8, nota).

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

Salmo 57 (Vg 56): Oración Confiada del Justo.
E ste poema es muy semejante al anterior por el argumento y la disposición general de sus partes. En él expansiona sus sentimientos un alma atribulada e incomprendida que, además, es hostigada por feroces enemigos, que se abalanzan como fieras ansiosas de su vida.”Como el salmo anterior, éste también refleja la profunda confianza del justo perseguido, el cual está seguro de que Dios no le ha de abandonar en el peligro en que se halla. El acento tiene un matiz de triunfo que no encontramos en la composición poética anterior. También aquí aparecen sistemáticamente repetidas determinadas palabras, sin duda para recalcar más las ideas, aun a costa de la monotonía. El poema contiene dos estrofas, predominando el ritmo del paralelismo sintético.
Los v.8-12 (acción de gracias) coinciden con los v.2-8 del salmo 108, lo que parece sugerir que este segundo fragmento del salmo tuvo existencia independiente antes de ser juntado a la primera parte (2-7). Con todo, es difícil determinar la época de composición del salmo actual. Según el título, el poema se debe al propio David, perseguido y oculto en la gruta de Adullam 1. Los críticos modernos suponen un origen más tardío de la composición.

Súplica confiada a Dios (1-6).
1 Al maestro del canto. Sobre “No destruyas.” Miktam. De David, cuando huyó delante de Saúl en la caverna 2. 2 Ten piedad de mí, ¡oh Dios! ten piedad de mí, porque a ti he confiado mi alma y me ampararé a la sombra de tus alas mientras pasa la desgracia. 3Yo invocaré al Dios Altísimo, al Dios que me favorece 3. 4 El mandará de los cielos y me salvará, y confundirá a los que me acosan. Seláh 4. Mandará Dios su gracia y verdad. 5 Mi alma está en medio de leones, yazgo entre hombres encendidos (en furor) 5, cuyos dientes son lanzas y saetas, cuya lengua es tajante espada 6 álzate, joh Dios! allá en lo alto de los cielos y haz esplender sobre toda la tierra tu gloria.

Como en el salmo anterior, el poeta pide la ayuda de Dios en los críticos momentos de angustia en que se halla. La súplica tiene un aire marcado de confianza. Siempre ha estado al abrigo de las alas protectoras de Yahvé, que, como sombra bienhechora, le libra de las inclemencias de la vida. El salmista concibe aquí a su Dios como un ave que maternalmente esconde a sus polluelos bajo sus alas. Cuando sobreviene algún peligro, éstos acuden a su refugio seguro. Este símil es muy corriente en la literatura bíblica 6. El salmista, pues, mientras pasa la desgracia, acude al refugio seguro, que es su Dios providente y fiel a sus promesas de protección al que se le confía.
Su poder está garantizado, porque es el Altísimo 7, que habita en la cúspide de los cielos y desde allí gobierna el mundo y controla los acontecimientos de las vidas de los hombres. Desde su atalaya domina la panorámica de la historia, y nada se oculta a sus ojos, que escudriñan lo más secreto de los corazones 8. Particularmente está atento a las vicisitudes de los que son sus íntimos, sus fieles cumplidores de la Ley; a éstos les favorece, y, a pesar de hallarse en la cúspide de la morada celestial – sobre la bóveda celeste, la región empírea de los griegos -, está atento a las necesidades de los suyos. Por eso, en el momento oportuno mandará su ayuda para salvar al justo atribulado (v.4.) y confundir y avergonzar a los enemigos que le acosan. Los emisarios del Dios providente serán su gracía y verdad, que constituyen la garantía de la fidelidad de Dios a las promesas de ayudar al que le sea fiel.
Con toda viveza describe a sus enemigos, que le acechan como leones ávidos de la presa 9. Sus dientes son como mortales saetas; sus calumnias c insolencias hieren y penetran en el corazón del angustiado justo perseguido 10. En medio de tanta hostilidad que le circunda, sus ojos se levantan al Dios que habita en lo más alto de los cielos y desde allí contempla el ataque de sus enemigos; en sus ansias de salvación y de justicia, pide a Dios que se manifieste en su plena majestad y muestre esplendorosamente su gloria, castigando tanta insolencia 11. La manifestación de su justicia redundará en su propia gloria, pues todos serán testigos de su poder y protección a la virtud.

Liberación: acción de gracias (7-12).
7 Tendieron una red a mis pies para que sucumbiera 12; cavaron ante mí una fosa; fueron ellos los que cayeron en ella. Seláh. 8 Pronto está mi corazón, ¡oh Dios! está mi corazón dispuesto a cantar y entonar salmos. 9 ¡Despierta, gloria mía; despierta, salterio y cítara, y despertaré a la aurora! 10 Te alabaré entre los pueblos, ¡oh Señor! te cantaré salmos entre las naciones. 11 Porque sobrepasa a los cielos tu benignidad, y a las nubes tu fidelidad. 12 álzate, ¡oh Dios! en lo alto de los cielos; haz esplender en toda la tierra tu gloria.

Conforme al esquema estereotipado de estos salmos deprecatorios, después de solicitar la ayuda del Omnipotente, el poeta describe la realización de sus esperanzas. Son composiciones hechas “post factum,” y por eso el cambio de situaciones se sucede artificialmente como en un film cinematográfico. La actualización dramática de las escenas pasadas sirve de ocasión para destacar ante las asambleas litúrgicas del pueblo la protección divina sobre sus fieles amigos. En efecto, el salmista destacó cómo se manifestó la justicia divina, haciendo caer a sus enemigos en las redes que le habían tendido y en la fosa que le habían cavado. Antes había declarado que le espiaban y estaban al acecho, y ahora, siguiendo el símil de los cazadores, que preparan emboscadas a la presa, proclama la derrota definitiva de los que han sido burlados en sus planes por la intervención de Dios 13. El corazón del salmista se esponja ante la derrota de sus adversarios, y se dispone a entonar salmos de acción de gracias a su Salvador. Poéticamente invita a su alma – gloria mía – a entonar cantos de júbilo al son del salterio y de la citara (V.9). Poéticamente declara que está dispuesto a despertar a la misma aurora con sus instrumentos musicales. De ordinario, la aurora es la que despierta al poeta para que entone cánticos en honor de Yahvé; aquí es el poeta el que se adelanta a la aurora, porque no puede retener el júbilo que le embarga. El poeta romano llamaba al gallo despertador de la aurora: “Vigilales… evocat auro-ram” 14; el salmista ahora es el despertador del nuevo día que se anuncia de triunfo por haber sido salvado del peligro. Job habla de los “parpadeos de la aurora”15; esta personificación del albor del día es corriente en la literatura poética bíblica 16.
La perspectiva del salmista se ensancha, pues no sólo quiere cantar los portentos de su Dios Salvador en medio de su pueblo, sino que aspira a darlos a conocer a los pueblos y naciones gentílicas (v.10). Aunque en estas frases no hay alusiones claras mesiánicas, sin embargo, su entusiasmo lírico se desborda y empalma con otras tradiciones universalistas de la literatura profética y sapiencial17. En realidad, la concepción monoteísta estricta llevaba lógicamente al universalismo, ya que el Dios de Israel es el Señor de toda la creación y de todos los pueblos; aquí el salmista declara que su benignidad sobrepasa a los cielos, y su fidelidad a las nubes. No sólo llenan la tierra, sino que traspasan el horizonte cósmico del hombre. Esta amplitud de la grandeza divina exige un canto que desborde también todos los ámbitos nacionales. Conforme a esta perspectiva, el salmista repite de nuevo el estribillo, pidiendo que se manifieste en lo alto de los cielos, haciendo esplender su gloria en toda la tierra. En el v.6 era una súplica para manifestar su justicia punitiva sobre sus enemigos que le cercan; ahora, en cambio, la panorámica se ensancha, pues pide que la gloria o manifestación gloriosa y rutilante de Yahvé llene toda la tierra, después de haber manifestado su justicia vengadora sobre los impíos.

1 Cf. Sam 22:1s. – 2 Cf. Sam 22:1s; 24:1-8. El No destruyas debe de ser el principio de una canción conocida. Sobre las demás indicaciones véase com. a Sal 4:1; Sal 4:10.1. – 3 Así según los LXX. El TM lit.: “que cumple sobre mí.” – 4 La Vg y los LXX: “dedit in opprobrium conculcantes me.” El TM lit.: “el que busca atraparme, blasfema.” Bib. de Jér.: “Que Dios confunda al que me hostiga.” NP: “Opprobriis afficiat eos qui me persequuntur.” – 5 Lit. el TM: “Yo estoy echado entre gentes que lanzan llamas…” Bib. de Jér.: “Mi alma está echada entre leones, que devoran los hijos de los hombres.” – 6 Cf. Sal 17:9; Sal 36:8; Sal 41:5; Sal 43:8; Sal 91:5; Rut 2:12; Mat 23:37. – 7 Cf. Sal 7:18; Sal 78:36; Sal 83:19. – 8 Cf. 1Cr 28:9; Jér 17:10. – 9 Cf. Sal 7:3; Sal 10:10; Sal 17:13. – 10 Cf. Sal 42:11; Sal 52:3; Sal 58:7; Sal 64:4; Pro 30:14. – 11 Cf. Sal 11:55; 36:63; 21:14; Isa 2:11s. – 12 Lit. el TM: “se ha encorvado mi alma.” Los LXX y Vg: “incurvaverunt animam meam.” Bib. de Jér.: “Mi alma ha – sido encorvada.” NP: “Depresserunt animam meam.” – 13 Cf. Sal 7:16; Sal 9:163; Sal 35:8; Eze 19:4; Ecl 10:8. – 14 Ovidio, Metamorph. XI 597; el juglar del Mío Cid viene a decir lo mismo: “apriesa cantan los gallos e quieren crebar albores…” (I 14). – 15 Job 3:9. – 16 Cf. Isa 14:12; Job 41:10; Sal 139:9. – 17 Cf. Sal 36:6; Efe 3:18.

Fuente: Biblia Comentada

en la sombra de tus alas. Metafóricamente, Dios cuida de los suyos como una ave madre protege a sus polluelos. Simbólicamente, puede haber aquí una referencia a las alas de los querubines en el arca del pacto donde Dios estaba específicamente presente (cp. Éxo 37:1-16; Sal 17:8; Sal 36:7; Sal 61:4; Sal 63:7; Sal 91:1; Sal 91:4). me ampararé. Cuando la vida se hace extraña, solo la relación de uno con su Dios calma el alma.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

Salmo 57 (56): Salmo mixto que, dividido temáticamente en dos partes por la repetición de un estribillo (Sal 57:5, Sal 57:11), combina una declaración de confianza ante una situación difícil (Sal 57:1-6) con un canto de acción de gracias (Sal 57:7-10). Esta sección final aparece repetida Sal 108:1-5.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

1Sa 24:1-4.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Sal 17:8; Sal 36:7; Sal 61:4; Sal 63:7.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

— bajo tus alas: Ver nota a Sal 17:8.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Salmo 57. ¿bajo Sus Alas en la Noche de la Duda y la Tristeza?

Este Salmo pregunta: “¿Dónde estás?” El título dice que David estaba en la cueva (es más probable que se tratara de 1 Sam. 21 que de 1 Sam. 24) pero David se refugia en ti … en las sombras de tus alas (1). Huyendo de Saúl, y disponiéndose a pasar la noche (4, estoy tendido, “acostado” como un fugitivo solitario), la cueva lo cobija, pero él la ve como las alas extendidas de su Dios. Debido a esto, el clamor inicial de su oración (1) se convierte en un clamor de alabanza (9, 10); su confianza en la oración (2, 3, Clamaré … El enviará) se convierte en una firme alabanza (7, 8); y su sentido del poder de sus enemigos (4) se transforma en una convicción de que sus enemigos están condenados al fracaso (6). Sin embargo, lo importante para David no es que sea librado o que sus enemigos sean atrapados sino que Dios sea exaltado en gloria (5, 11).

1 Misericordia, gracia inmerecida. 2, 3 El sentido de seguridad (clamaré … El enviará) surge de un sentido de Dios: supremamente exaltado, Dios Altísimo; irresistible en su propósito (que me favorece, cf. Fil. 1:6); y de misericordia y verdad que no cambian. 5 ¡Qué real es el hecho de que el espíritu entusiasta de los vv. 2, 3 es desafiado inmediatamente por los peligros de la vida (4)! ¡Qué lección en espiritualidad es que, también inmediatamente, los peligros son desafiados por una exclamación al Dios exaltado! 6 Con el recuerdo de Dios (5) viene la seguridad de que la maldad causará su propia ruina. 7, 8 David se ha visto frente a sus adversarios (4) y luego, por buscar la gloria de Dios (5), ha podido enfrentarlos exitosamente. Ahora se dedica a la alabanza. Alma (lit. “gloria”), probablemente una metáfora significando ofrecer lo mejor de mí a Dios. Despierta. Habiendo tratado de dormir en medio del peligro (4), ahora David se siente listo para encarar el nuevo día con alabanza. 9-11 David toma en serio el hecho de que los propósitos más amplios que su propio éxito personal serán cumplidos, incluyendo una función mundial, porque fue escogido para ser rey sobre una nación que tenía un llamado especial en relación con todas las naciones (Gén. 12:3). Y había hecho frente a sus dificultades de tal manera que tenía ahora un testimonio válido de la misericordia y la verdad de Dios.

Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno

57.1ss Este salmo quizás se escribió cuando David se escondió de Saúl en una cueva (véase 1 Samuel 22-24).57.4 En ocasiones, tal vez nos veamos rodeados de gente que murmura de nosotros y nos critica. La crueldad verbal puede dañarnos de la misma forma que el maltrato físico. En vez de lanzar en respuesta palabras menos aceptables, nosotros, al igual que David, podemos hablar en calma con Dios acerca de nuestro problema.57.7 La fe firme de David en Dios contrastaba fuertemente con las mentiras y los alardes escandalosos de sus enemigos. Cuando enfrente ataques verbales, la mejor defensa es quedarse en silencio y alabar a Dios, recordando que nuestra confianza está en su bondad, amor y fidelidad (57.10). En momentos de gran sufrimiento, no se encierre en la autocompasión ni explote en venganza, sino mire hacia arriba, hacia Dios.

Fuente: Comentarios de la Biblia del Diario Vivir

NOTAS

(1) Enc. Véase Sal 16:1 Enc, n.

REFERENCIAS CRUZADAS

a 1884 1Sa 22:1; 1Sa 24:3; Sal 142:0

b 1885 Sal 119:77

c 1886 Sal 18:2

d 1887 Rut 2:12; Sal 17:8; Sal 63:7

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

Salmo 57 Este es un Salmo de lamento de David que está en peligro. Describe su lucha en forma amplia. Sus enemigos son los hijos de los hombres (vers. 4); él se refiere a Dios como Dios Altísimo (vers. 2), un epíteto para quien es el soberano del mundo, y canta alabanzas a Dios entre las naciones (vers. 9). El salmista está cerca de Dios y se refugia bajo sus alas (vers. 1). El Altísimo envía sobre David su verdad y su misericordia para ayudarle (vers. 3). Como resultado, Dios es exaltado sobre los cielos (vers. 5, 11). Este estribillo divide el Salmo en dos mitades casi iguales (vers. 1-5, 6-11). La primera mitad es una oración de petición (1-2), y compara a sus enemigos como leones (vers. 4). La segunda, es un canto de alabanza (7-9), y compara a sus enemigos como cazadores (vers. 6). Las mitades se unen por el estribillo que Dios sea exaltado (vers. 5, 11), por las descriptivas referencias a sus enemigos (vers. 4, 6), y por la referencia a la misericordia de Dios y su verdad asociada con los cielos (vers. 3, 10). Los estribillos tienen significados diferentes. En el vers. 5, Dios manifiesta su gloria librando al salmista; en el vers. 11, Dios es exaltado a los ojos de las naciones por medio de la alabanza de David.

Fuente: La Biblia de las Américas

Al-Tashjet… Esto es, no destruyas.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

* Posiblemente, Poema epigramático, Salmo de expiación

** Véase 1Sa 22:1; 1Sa 24:3

Fuente: La Biblia de las Américas

Tit. Esto es, no destruyas.

Fuente: La Biblia Textual III Edición

SALMO 57 (56)[1] Sal 108 (107).[1] Este salmo es una lamentación individual, que concluye con una acción de gracias. 1 Sam 22, 1; 24, 4.

Fuente: Notas Torres Amat