LEON MAGNO

Papa (440-461). Vida: Poseemos pocos datos sobre la vida de León antes de ascender al pontificado. Nació seguramente en Roma a finales del s. IV, si bien se ha apuntado asimismo un posible origen toscano. Estando en las Galias en misión de reconciliación de Ecio y Albino le llegó la noticia de su elección. Combatió con firmeza el maniqueí­smo y el pelagianismo, a la vez que reestructuraba el funcionamiento de las iglesias de Roma y resto de Italia. Apoyó la condena del priscilianismo en España y confinó a Hilario de Arles a su diócesis cuando éste intentó actuar en su sede como patriarcado independiente de Roma. Este deseo de mantener el control sobre las diversas diócesis le llevó a pedir — y obtener — de Valentiniano III un rescripto en el que se reconocí­a su jurisdicción sobre las mismas. Las relaciones con Oriente fueron tensas. Envió (449) una carta a Flaviano, el Tomo, en la que le advertí­a del peligro de la herejí­a de Eutiques, pero en el concilio de Efeso de aquel mismo año — el denominado latrocinio de Efeso — no sólo no fue leí­da aquélla sino que Eutiques fue rehabilitado. León se colocó inmediatamente a la cabeza de la oposición a Eutiques, reacción que cristalizó en el concilio de Calcedonia (451) donde se revirtió el efecto del latrocinio de Efeso y se confirmó la doctrina de las dos naturalezas de Cristo. Con ello se lograba una victoria de la ortodoxia aunque los legados de León no fueron sentados en la presidencia ni el concilio se celebró en Italia. El canon 28 de este concilio concedí­a a Constantinopla el mismo rango que a Roma, lo que fue considerado inaceptable por León provocando que retrasara su adhesión a las decisiones finales del concilio y que negara legitimidad al mencionado canon. En el 452 se enfrentó en Mantua con Atila consiguiendo la retirada del mismo. En el 455 logró que los vándalos no arrasaran Roma aunque no pudo impedir su toma por los mismos.

Obras: Nos han llegado 96 sermones y 143 cartas.

Teologí­a: León fue más un pragmático que un teórico, y en época de especial turbulencia optó por una polí­tica de unión de la Iglesia universal a cualquier costo. Indudablemente su enfrentamiento con el eutiquianismo presente en el Tomo a Flaviano reviste una importancia cristológica notable pero, sin duda, su mayor aportación va ligada a los intentos de establecer de manera indiscutida la supremací­a de la sede de Roma. Esta se basa en dos columnas. La primera es la vinculación especial de Cristo con Pedro y la segunda, la sucesión de Pedro en los obispos romanos. Esta tesis se sustenta en los pasajes bí­blicos de la primací­a petrina (Mt 16:16-19; Lc 22:3lss. y Juan 21:15-19). Con todo, León ha ligado a los conceptos bí­blicos categorí­as de tipo jurí­dico.

VIDAL MANZANARES, César, Diccionario de Patrí­stica, Verbo Divino, Madrid, 1992

Fuente: Diccionario de Patrística