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AL ESTE DEL JORDAN, EL MAR MUERTO Y EL VALLE CENTRAL.

AL ESTE DEL JORDAN, EL MAR MUERTO Y EL VALLE CENTRAL.

Galaad.
Golán.
Ramot de Galaad.
Beser.
Jacob.
Peniel.
Amón.
Moab.
Edom.
Madián.

El valle este del Jordán y el mar Muerto, que corre al extremo norte de Palestina al sur del golfo de Acaba y hasta la pení­nsula sinaí­tica es un territorio de importancia y particularmente en vista de que cuatro naciones emparentadas con Israel viven allí­.

Comenzando al norte y moviéndose hacia el sur el interés principal está en los distritos que siguen, muy pocos de los cuales son visitados por turistas, solamente ocasionalmente.

Se entiende que mucho de este territorio no está en la propia Palestina.

Galaad.

El nombre a veces es usado para designar todo el paí­s al este del Jordán (Gen 37:25; Jos 22:9; 2Sa 2:9). También se usa para designar la tierra al este del Jordán distinguiéndola de la meseta de Moab (Deu 3:10; Jos 13:11; 2Re 10:33). La mayor parte del territorio le correspondió a la tribu de Gad (Jue 5:17). Se extiende del Jordán al oeste hasta el desierto en el este. La mayor parte es una meseta grande que está a unos 914 metros sobre el valle del Jordán. Casi cada valle tiene un arroyuelo perenne o rí­o y en sus márgenes hay adelfas, en los terrenos más bajos hay muchas flores y cañaverales. Se dice que es la porción más pintoresca y bella de Palestina. Por siglos ha sido un lugar de pastos para el ganado de los nómadas.

Jefté, el galadita rechazó y derrotó a los amonitas, Jueces 11.

Vino bajo el poder de David, 2Sa 5:1; 2Sa 12:26 y siguientes.

Los sirios la derrotaron, 2Re 10:32-33.

Acab, rey de Israel, fue herido mortalmente allí­, 1Re 22:29-40.

Tiglat-pileser, rey de Asiria, la conquistó, 2Re 15:29-31.

Golán.

Ahora puede ser Sahem el-Jolán que está en la ribera oriental del rí­o el-Allán.

Era una ciudad de Basán, del territorio asignado a Manasés, y de las tres ciudades de refugio era la que estaba más al norte. Seguramente fue una ciudad de gran importancia en su dí­a, pero el sitio donde estaba no se puede determinar ahora.

Era una ciudad de refugio, Deu 4:43; Jos 20:8.

Fue asignada a los levitas, Jos 21:27; 1Cr 6:71.

Ramot de Galaad.

Esta era una gran ciudad en el lado oriental del Jordán y jugó un papel importante en las guerras de Israel. Quizá sea la misma Mizpa o Ramat-Mizpa, y si es así­, serí­a el lugar donde Jacob y Labán se separaron. Su sitio exacto no ha sido determinado, pero probablemente estaba como a la mitad de Palestina en el lado oriental del Jordán, y como a 19 ó 24 kms. del rí­o. Era una de las ciudades de refugio y estaba situada en la tierra de Gad. Los arqueólogos creen que la ciudad estaba situada donde está Tell- er-Ramit en el vadi Shomer.

Primeramente mencionada como una ciudad de refugio, Deu 4:43; Jos 20:8.

Fue asignada a los levitas, Jos 21:38; 1Cr 6:80.

Era la cabeza de uno de los distritos administrativos de Salomón, 1Re 4:13.

Donde Acab y su hijo Joram fueron heridos, 1Re 22:1-40; 2 Crónicas 18; 2Re 8:28 y siguientes; 2Cr 22:5 y siguientes.

Jehú fue ungido aquí­ como rey de Israel por Eliseo, 2Re 9:1 y siguientes.

Beser.

Una ciudad de refugio en la meseta al este del mar Muerto en el territorio de Rubén.

Parece que era una ciudad fortificada y quizá era la misma Bosra (Jer 48:24). Otros piensan que hoy se llama Beheir. Pero parece que es el sitio que ahora es el moderno Umm el-Amad, como a 13 km. al noreste de Medeba.

Estaba en la tierra de Rubén, Deu 4:43, Jos 20:8.

Era el lugar de residencia de los hijos de Merari de la tribu de Leví­, Jos 21:36; 1Cr 6:63, 1Cr 6:78.

Jaboc.

El rí­o Jaboc es una corriente en Palestina oriental cruzando el territorio de Galaad y ahora se llama el †œrí­o de azul† por el color tan claro de sus aguas. Tiene la desembocadura más ancha que cualquiera otra corriente al este del Jordán menos Yarmuk. Su lecho está en una cañada profunda, con riberas muy escarpadas. Es una gran hendidura, que divide la tierra de Galaad en dos partes. En las márgenes hay frondosa vegetación de adelfas que hacen brillar al valle con su hermoso color. Sin tomar en cuenta las curvas que hace el rí­o, tiene como unos 96 kms. de largo. La embocadura ha cambiado su posición de tiempo en tiempo. En los lugares más bajos la vegetación es tropical. El rí­o puede ser vadeado en varios lugares excepto cuando va crecido, pero el vado por donde Jacob pasó aquella noche extraña de conflicto al volver él de Padan-aram no puede ser identificado ahora.

Se menciona en conexión con Jacob, Gen 32:22-32.

Estaba en la frontera norteña del territorio de Sehón, rey de los amorreos, Num 21:24.

Es mencionado como el lí­mite de Amón, Deu 2:37; Deu 3:16; Jos 12:2; Jue 11:22.

Peniel.

El nombre significa †œCara de Dios† y designa un lugar al lado este del Jordán cerca del rí­o Jaboc. Esta forma ocurre solamente en Gen 32:30, y en otros lugares es llamado Penuel. El nombre fue dado a este lugar por Jacob después de la noche en que luchó cerca del Jaboc, porque †œVi a Dios cara a cara, y fue librada mi alma†.

Era un lugar alto evidentemente cerca del Jaboc sobre el cual él anduvo. Algunos han pensado que puede haber sido un barranco prominente cuyo contorno se parecí­a a una cara humana. Más tarde aquí­ fue edificada una ciudad con una torre.

Estaba entre los lugares donde el ejército de Gedeón persiguió a los madianitas. Fue uno de los pueblos que Jeroboam edificó y fortificó (1 Reyes 12.25).

Aunque no se conoce el lugar exacto, generalmente lo identifican con Tubulet Drahab, las ruinas de la cual denotan que fue un lugar muy fuerte. Muchas veces los enemigos fueron rechazados aquí­ debido a sus riberas tan escarpadas y el lugar era de una importancia muy estratégica.

Aquí­ fue donde Jacob luchó toda la noche con un varón, Gen 32:22-32.

Fue vencido por Gedeón, Jue 8:8-17.

Fue fortificada por Jeroboam, 1Re 12:25.

Amón.

Por su posición y por la relación que tienen con Israel y las peregrinaciones en el desierto parece necesario aquí­ estudiar cuatro naciones que eran parientes de Israel.

La primera es Amón. Los amonitas eran descendientes de Lot, de modo que eran parientes de los israelitas. Ocupaban el territorio al este del Jordán y el mar Muerto entre los rí­os Arnón y Jaboc, pero antes de que los hebreos llegasen, parte de las tierras de ellos les habí­an sido quitadas por los amorreos, y los heteos también los estaban molestando mucho. Al colonizar Palestina, Israel les ayudó a destruir sus antiguos enemigos. La religión de ellos era muy común entre muchas tribus y consistí­a de supersticiones muy crueles y degradantes. Su dios principal era Moloc a quien ofrecí­an sacrificios humanos. 2Re 3:26-27.

Israel fue advertido en contra de su religión, Lev 20:2-5 y debí­a evitar conflicto con ellos, Deu 2:19.

Oprimieron a Israel y fueron vencidos por Jefté, Jue 11:1-28 y trataron cruelmente a Israel (en el tiempo de Saúl y David), 1 Samuel 11; 2 Samuel 10.

Ellos fueron cruelmente tratados, 2Sa 12:26-31.

El pueblo mostró bondad hacia David (un fugitivo), 2Sa 17:27-29.

Tení­an mucha hostilidad hacia Israel, y la mostraron en diferentes maneras y en numerosas ocasiones; atacaron a Israel, 2 Crónicas 20; pagaron tributo a Jotam, 2Cr 27:5; se unieron con los caldeos en contra de Judá, 2Re 24:2.

Se unieron con Sanbalat para oponerse a los judí­os, Nehemí­as 4; mataron a Gedalí­as 2Re 25:22-26; Jer 40:13—Jer 41:4.

Su crueldad fue denunciada por los profetas, Jer 49:1-6; Eze 21:28-32; Amo 1:13; Sof 2:8-9.

Moab.

Moab era un distrito al este del mar Muerto, se extendí­a de la parte del sur del mar Muerto hasta un poco más arriba de su lí­mite septentrional. La frontera oriental era el desierto, por lo tanto bastante irregular. Toda la región era de unos 64 kms. por 80 kms. Es una aldea meseta de 912 metros sobre el nivel del mar y 1.217 metros sobre el nivel del mar Muerto. La meseta está dividida por profundas cañadas o abismos de modo que el canal del rí­o Arnón mide cerca de 520 metros de profundidad, y como 3 kms. de ancho antes de entrar al mar Muerto. Las riberas están tan empinadas que es casi imposible pasar a menos que vaya uno muy arriba hacia el desierto donde esta meseta es fértil, pero le falta agua, de modo que es casi destituido. Habí­a numerosos pueblos y muchas cisternas todaví­a se ven. También todaví­a hay buena pastura, pero frecuentes incursiones repentinas por las tribus convecinas estorban a que haya un crecimiento en la agricultura. El lado occidental de la meseta, visto del otro lado del mar Muerto, parece como una cordillera.

Aquí­ están los montes Nebo y Pisga que parecen ser iguales (Deu 34:1). Uno puede ser la cordillera mientras que el otro es un picacho de las montañas. Ve hacia abajo en el desierto y marca una etapa en la jornada de Israel a Canaán, Num 21:20.

Los moabitas son descendientes de Lot, el sobrino de Abraham, de modo que eran parientes de los hebreos. En un tiempo no muy bien conocido a nosotros ellos consiguieron posesión de su paí­s por vencer una raza gigante llamada el emim (Deu 2:8-11). Después de este relato de los moabitas muy poco se sabe de su origen hasta el tiempo de éxodo, excepto que su paí­s parece haber sido invadido por los amorreos, cuyo rey Sehón conquistó la parte norteña de Moab (Num 21:21-31). En un perí­odo después de las conexiones y eventos mencionados en el Antiguo Testamento, fueron subyugados por los árabes que conquistaron todo el territorio al este del Jordán, hasta Damasco. Después de esto los moabitas perdieron su identidad como nación, confundiéndose o mezclándose con los árabes.

El dios principal de los moabitas era Quemos, a quien se menciona frecuentemente en el Antiguo Testamento. Era el dios nacional para ellos, así­ como Moloc lo fue para los amonitas, y parece haber sido adorado por medio de sacrificios humanos (2Re 3:27). Su idolátrica adoración estaba muy corrompida y las muchas veces que se la combinó con Baal, hizo claro el que como otras naciones, ellos también tuvieron sus baales.

El relato de su origen, Gen 19:30-38.

Balac quiso conseguir que Balaam maldijera a Israel, Números 22-24.

Israel sufrió desastre por causa de relaciones ilí­citas con los moabitas, Números 25.

Israel pasó su frontera, Deu 2:8-9.

Los moabitas fueron excluidos de la asamblea, Deu 23:26.

A Moisés le fueron dadas más revelaciones allí­, Deu 29:1 sig.; Lev 26:46; Lev 27:34.

Pisga fue de donde Moisés vio Canaán y murió, Deu 32:48-52; Deu 34:1-8.

Aod libró a Israel de su opresión, Jue 3:12-30.

Saúl hiere a Moab, 1Sa 14:47.

Los padres de David fueron protegidos allí­ mientras Saúl lo perseguí­a, 1Sa 22:3-4.

Moab se unió con Amón en guerra contra Josafat, 2 Crónicas 20.

Fue derrotado por Josafat, 2 Reyes 3.

Los lugares más importantes (45 nombrados) Num 21:2, Num 21:15; Num 23:3-4; Deu 3:29; Jer 48:22, Jer 48:24; Isa 15:1-5; Isa 16:11; Jos 13:19.

Discutida en la profecí­a, Isa 11:14; caps. 15-16; Isa 25:10 sig.; Jeremí­as 48; Eze 25:8-11; Dan 11:41; Amo 2:1-3.

Edom.

El territorio de Edom no es grande como el de los madianitas (o ismaelitas). Se extendí­a del mar Muerto al golfo de Akaba y, principalmente, al lado este del rí­o Arabah, aunque, sin duda, algo de él estaba en el lado oeste del rí­o. Es una región montañosa, pero hay gran variación en carácter y aspectos, desde altas montañas que alcanzan 1.798 ms. hasta valles bajos y fértiles, donde se sembraba una gran variedad de productos. Por siglos el comercio entre el norte y el sur —entre Babilonia y Siria por un lado y Egipto e India en el otro— pasaba por Edom. Y la nación, debido en parte a este hecho, ganó considerable prominencia.

Los habitantes eran descendientes de Esaú, de quienes se dice que destruyeron a los horeos, quienes moraban allí­ antes que ellos (Gen 14:6; Deu 2:22). Por algún tiempo, antes que Israel dejara el desierto, su forma de gobierno se habí­a cambiado de un reino de duques a una monarquí­a por elección. El rey no dejó que Israel pasase por su paí­s (Num 20:14 sig.; Num 21:4), pero porque eran hermanos, a Israel le estaba prohibido aborrecerlos, y la tercera generación de ellos serí­a admitida a la asamblea del Señor (Deu 23:7 sig.). Durante largos años en la historia subsecuente, ellos fueron los enemigos más crueles de Israel.

Saúl, David y Amasí­as, cada uno a su vez, los derrotó en guerra, y David puso tropas armadas en el paí­s, 1Sa 14:47; 2Sa 8:13-14.

Hadad, quien escapó de la matanza hecha por Joab, se fue a Egipto, y después causó trastornos a Salomón, 1Re 11:14-25.

Edom reconoció la supremací­a de Judá, 2Re 3:9; 2Re 8:20-22.

Se rebelaron y fueron derrotados, 2Re 3:20 sig.

Diez mil fueron matados, 2Re 14:7.

Fueron fuertemente criticados por los profetas, Lam 4:21; Eze 25:12; Eze 35:3 sig. Abdí­as vers. 10 sig.

Madián.

La tierra de Madián tomó su nombre de uno de los hijos de Abraham y su esposa Cetura. Con sus hermanos y las familias de ellos y con regalos de Abraham se alejaron de Isaac, hacia la †œtierra oriental†, Gen 25:6. no es posible señalar los linderos exactos del paí­s, pero estaba entre Edom y Parán (1Re 11:18), y en el tiempo de los jueces parece haberse extendido al norte, hacia Galaad (Jue 8:11; Num 32:42). En vista de que Moisés bajo la dirección divina, fue de allí­ a Egipto para librar a Israel (Exo 3:1—Exo 4:19) concluimos en que se incluí­a no solo el distrito al este del golfo de Akaba, sino también algo de la parte sur de la pení­nsula sinaí­tica, al oeste de ese golfo.

Los habitantes, como se ha dicho, eran descendientes de Abraham y Cetura (Gen 25:2). Los nombres madianitas e ismaelitas a veces se usan indistintamente (Gen 37:25, Gen 37:28, Gen 37:36; Jue 8:22, Jue 8:24), lo cual apunta a una relación estrecha entre ellos y los descendientes del hijo de Agar. Los hechos relacionados con la circuncisión de los hijos de Moisés (Exo 4:25) es una indicación de que no practicaban ese rito, tal como es verdad casi universalmente entre los árabes de hoy dí­a. La adoración de Jetro a Jehová, cuando llegó a Moisés en el desierto (éxodo 18), muestra que mientras ellos adoraban a otros dioses creí­an también en Jehová. Las referencias bí­blicas sobre ellos los presentan ahora como comerciantes o mercaderes (Gen 37:25 sig., aun listos para entrar en el negocio de esclavos); otra vez como ganaderos y pastores, y también como ladrones y salteadores, todo lo cual está en completa armoní­a con lo que sabemos que han practicado por muchos siglos las tribus nómadas de árabes. Los hombres usaban adornos al igual que muchos de los nómadas modernos.

La importancia de Madián para nosotros principia con el hecho que Moisés huyó de Egipto hacia allí­, se casó con la hija del sacerdote de Madián, y fue enviado de allí­ a Egipto para hacer su trabajo de liberación (Exo 2:15—Exo 4:19).

Los madianitas fueron vencidos por los edomitas bajo Hadad en Moab, Gen 36:35.

Algunas de las peregrinaciones de Israel allí­ pudieron haber sido dirigidas por Hobab, un madianita, Num 10:29-36.

Los madianitas se unieron con Balac para que se pronunciara una maldición sobre Israel, Números 22-24 (especialmente 22:47).

Israel pecó por casarse con ellos, Números 25; 31:2 sig.

Gedeón los derrotó y salvó a Israel después de siete años de opresión, Jueces 6-8; 9:17; Sal 83:9; Isa 9:4; Isa 10:26; Hab 3:7.

Hadad el edomita y muchos de Israel moraron en Madián, 1Re 11:14-22.

Fuente: La Geografía Bíblica