EL VALLE DEL CEDRON
Discurre entre la colina oriental de Jerusalén y el monte de los Olivos. Desde la pendiente del monte de los Olivos se ve, por encima del tajo profundo del valle, a la izquierda, en el extremo meridional de la colina escarpada, la loma de la ciudad de David, continuando por la derecha (el norte) los abruptos cimientos que refuerzan la roca — o monte del templo —, sobre la que hoy se alzan las mezquitas árabes. El Cedrón, un arroyo de invierno, por lo general con escasa agua, fluye a través del wadi en-Nar hasta el mar Muerto.
Al pie de la antigua ciudad yebusea (más tarde ciudad de David) vierte sus aguas al valle del Cedrón, un tanto sobreelevado, la fuente de Guijón (que probablemente significa †œEl surtidor†). Era la única fuente viva que surtía a la ciudad de Jerusalén. Ya los yebuseos habían construido desde su ciudad un túnel hasta la vía de agua de esta fuente, a fin de asegurarse el suministro de agua en tiempo de guerra.
El rey Ezequías de Judá (721-693 a.C.) hizo excavar más tarde un canal bajo la colina de la ciudad de David, el llamado †œtúnel de Siloé† (véase después), que conducía las aguas de la fuente de Guijón hasta el estanque construido dentro de las murallas que rodeaban la ciudad nueva y que enlazaban con el muro de la ciudad davídica. De este modo, la piscina de Siloé vino a constituir algo así como la nueva fuente de Guijón. La fuente antigua se cegó, aunque hoy vuelve a estar abierta.
En la confluencia del valle del Cedrón con el valle de Gehinnom por el oeste (véase después) estaba la †œfuente de Roguel† (probablemente el actual pozo de Job), un manantial subterráneo que en Jos 18:16 se menciona como uno de los puntos fronterizos entre las tribus de Judá y Benjamín. El punto de intersección de los valles en la fuente Roguel era un lugar preferido de reunión, como se desprende de 2Sa 17:17 y de 1Re 1:9.
Fuente: Diccionario de Geografía de la Biblia