ASIARCA

Asiarca (gr. asiárj’s, “jefe de Asia”). Categorí­a de cierto oficial de la provincia de Asia. Aunque este tí­tulo se encuentra con frecuencia en las inscripciones del oeste del Asia Menor (sobre monedas y en la literatura antigua), la verdadera función de quien ocupaba ese cargo no es bien clara. Prevalecen 2 puntos de vista: 1. Era el sumo sacerdote del Asia, quien presidí­a las fiestas religiosas, los juegos y las asambleas del gobierno provincial. Se lo nombraba por un año pero retení­a el tí­tulo sin ocupar el cargo, de modo que podí­a haber varios asiarcas al mismo tiempo. 2. Eran delegados municipales de las ciudades del Asia a la asamblea provincial; hombres muy ricos y respetados. Cualquiera fuera el significado del término asiarca, sorprende que Pablo tuviera amigos entre esas personas influyentes (Act 19:31, BJ); oficiales que, si se acepta la primera definición, eran lí­deres de ritos paganos, abominables tanto para los judí­os como para los cristianos. En la RVR dice “autoridades de Asia”. Bib.: RRAM 449,450,1298-1301.

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

Funcionarios de la provincia romana de †¢Asia. Eran electos anualmente y se encargaban de asuntos de gobierno, así­ como también de la celebración de los juegos en honor del emperador. Algunos de ellos oficiaban como sacerdotes del culto local al emperador. En Hch 19:31, RV60 traduce esta palabra como †œautoridades de Asia†, algunos de los cuales eran amigos de Pablo y le rogaron que no se presentase en el teatro. Como encargados de los juegos y representaciones, sabí­an muy bien lo difí­cil que es controlar multitudes alborotadas.

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, FUNC = “Jefes de Asia” (gr.). Eran cargos elegidos anualmente por las ciudades en la provincia romana de Asia. Se encargaban de los juegos públicos y de las celebraciones religiosas (Hch. 19:31). Los habí­a similares en las otras provincias, como siriarcas para Siria, etc. Algunos de los asiarcas eran amigos de Pablo, y le rogaron que no se expusiera al peligro en el teatro: no siempre se podí­an controlar las multitudes.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado