ASUAN

Ciudad egipcia, identificada con la Asuán de la actualidad, situada en la primera catarata del Nilo, sobre la ribera oriental del rí­o, frente a la isla Elefantina. El nombre Asuán aparece sólo dos veces en el AT (Eze 29:10; Eze 30:6), ambas en profecí­as contra Egipto, definiendo geográficamente la extensión del territorio egipcio desde Migdol en el norte hasta Asuán en el sur.

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

El antiguo Asuán marcaba la frontera entre Egipto y Nubia. Estaba ubicado en la primera catarata del rí­o Nilo, donde el granito rojo, la sienita y otras piedras duras formaban el lí­mite natural entre estos dos pueblos. Pronto llegó a ser el centro de intercambio, comerico y guerra. Los prí­ncipes de Elefantina ostentaban los tí­tulos de †œConductor de Caravana† y †œGuardador de la Puerta del Sur† y conducí­an las expediciones desde Egipto hasta las regiones desconocidas del sur para elevar la gloria y confort de Egipto. Asuán, ubicado en el lado oriental del Nilo, era mayormente una ciudad comercial. La isla Elefantina era el centro religioso y militar de su distrito y se presume que habí­a sido la colonización más antigua.
El origen del nombre Elefantina es en sí­ mismo desconocido. Algunos eruditos relatan el hecho de que los egipcios vieron por primera vez a un elefante allí­. Otros siguen la sugerencia de Arthur Weigall de que el nombre viene del totem de la tribu que se estableció en Elefantina. Hay numerosos dibujos de elefantes en las rocas cercanas a Elefantina, muchos de los cuales datan de los tiempos prehistóricos. La palabra egipcia para elefante es Yeb o Yebu y este fue el nombre que ostentó la ciudad en tiempos antiguos.
Como la isla estaba probablemente demasiado poblada, los mercaderes nubios trajeron sus mercancí­as al mercado de la ciudad, fuera de la isla, el cual vino a llamarse Swn o †œMercado†. Los egipcios pronunciaban la palabra †œSwani† y los griegos dieron su aproximación Svene. En el cóptico se llamó Swan.
El área alrededor de Asuán es rica en piedra dura: el granito rojo y el gris y la diorita son abundantes. Los egipcios fueron los grandes constructores de la antigüedad y no fueron lerdos en aprender a extraer la piedra de Asuán y transportarla hacia el norte en lanchones a través del Nilo. Desde la primera dinastí­a, la tumba de Den Semti en Abidos estaba provista con un piso de granito rojo. Este granto rojo llegó a ser la más conocida de las piedras duras para los artesanos del reion egipcio medio y del perí­odo del imperio.
Los constuctores de las pirámides hicieron uso de la piedra caliza y de la grava, las que eran extrí­das localmente. Sin embargo, ellos apreciaron el valor del granito más duro y lo usaron para revestimiento. Micerino intentó cubrir la totalidad de la pirámide con granito, pero este proyecto nunca fue completado.
Durante la era de la pirámide, Asuán fue evidentemente una importante comunidad cantera. Los trabajadores locales eran aumentados al crecer la necesidad cuando grupo especiales llegaban enviados por el faraón reinante quien tení­a algún proyecto especial que cumplir.
Durante los últimos dí­as del Antiguo Imperio Asuán y Elefantina llegaron a ser centros importantes de expediciones militares. Desde Asuán los soldados egipcios fueron conducidos por los amos fronterizos hasta el interior de Nubia y hay algunas evidencias de que las expediciones alcanzaron aun hasta el Africa central.
El faraón Pepi I usó mercenarios nubios como cabeza de lanza de las fuerzas que envió al campo de tiempo en tiempo.
Uni, un oficial de Pepi, viajó al sur de Elefantina para organizar una fuerza que repeliera a †œlos asiáticos moradores del desierto†. Finalmente, su ejército incluí­a †œlos negros lrtet, los negros Mazoi, los negros Yam, los negros Wawat, los negros Kau† y los Temeh de Libia. Además de los libios, todos estos guerreros fueron reclutados de las tribus negras del sur de Asuán.
En toda la historia posterior, los mercenarios nubios tuvieron un importante papel en las campañas militares egipcias.
BIBLIOGRAFIA: James H. Breasted, Ancient Records of Egypt, I, pág. 142, University of Chicago Press, Chicago,1906.

Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico