CREACIONISMO

[222]

Teorí­a sobre el origen del mundo que sugiere un acto de Dios, Ser Supremo, por el que hizo las cosas de la nada. En unas interpretaciones se considera la creación en forma instantánea. En otras argumentaciones se admite un proceso generador más o menos programado con actos creadores sucesivos.

El creacionismo como doctrina filosófica se opone a otras interpretaciones: emanatismo, evolucionismo, transformismo o a la eternidad del mundo.

La mayor parte de las religiones tienen que ver con la actitud creacionista al otorgar a la divinidad en la que se apoyan la acción originante del mundo. En este sentido se mueve la Biblia, que es explí­cita y directamente creacionista, por lo que el cristianismo lo es también.

Con todo, en nada se opone a la fe cristiana la defensa de un creacionismo evolucionista al estilo agustiniano (razones seminales iniciales que luego se desarrollan) o al estilo tomista: creación de la nada y organización del mundo según leyes dadas a las cosas.

Bien interpretado el creacionismo bí­blico es totalmente compatible con las teorí­as cientí­ficas más variadas sobre el origen del mundo: evolucionismo providencialista, big-bang querido por el Ser Supremo, origen de la materia, de la vida y del hombre en acciones creadoras diferentes, etc. En el contexto cientí­fico actual, es lo que se debe promover y explicar en una buena y adaptada formación religiosa.

Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogí­a Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006

Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa

El creacionismo es una de las tres teorías que se encuentran en la tradición cristiana por la que se explica el origen del alma del hombre. Las otras dos son el traducianismo (véase) y la preexistencia (véase). De acuerdo con la teoría creacionista, Dios hace el alma de novo en el momento de la concepción o nacimiento, e inmediatamente el alma se une con el cuerpo. El feto o el niño recién nacido es contaminado y, por lo tanto, culpable (imputación mediata) o culpable y luego contaminado (imputación inmediata) a causa del primer pecado de los padres del género humano. Así, el alma es pecaminosa no a causa del algún defecto de fabricación, sino por su inmediato contacto con la culpa y la contaminación heredadas. Algunos de los principales pasajes de la Escritura en los que los creacionistas se basan son: Zac. 12:1; Is. 42:5; Nm. 16:22; Heb. 12:9. Este punto de vista es común entre los protestantes, especialmente los reformados; el traducianismo se asocia especialmente con la Iglesia Católica Romana.

BIBLIOGRAFÍA

  1. Heppe. Reformed Dogmatics; Heinrich Denzinger; Enchiridion Symbolorum, 26 ed., 1946; Charles Hodge, Systematic Theology.

John H. Gerstner

Harrison, E. F., Bromiley, G. W., & Henry, C. F. H. (2006). Diccionario de Teología (133). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.

Fuente: Diccionario de Teología