DECAPOLIS

Mat 4:25 le siguió mucha gente de Galilea, de D
Mar 5:20 comenzó a publicar en D cuán grandes
Mar 7:31 vino por .. pasando por la región de D


Decápolis (gr. Dekápolis,”diez ciudades”). Grupo de 10 ciudades helení­sticas, localizadas todas en Transjordania, excepto una, Escitópolis (la Bet-sán del AT), que estaba en el extremo oriental de la llanura de Esdraelón sobre una importante encrucijada al oeste del Jordán. Como su población era mayormente helení­stica, Pompeyo las transformó en ciudades libres subordinadas al legado de Siria (63 a.C.). Probablemente querí­a impulsar su proceso de helenización, e impedir que fueran tomadas nuevamente por los judí­os. Las ciudades administraban sus propios asuntos y acuñaban sus propias monedas (que databan según una era propia). Están enumeradas por Plinio: Damasco, Filadelfia (la Rabá de Amón del AT), Rafana, Escitópolis, Gadara, Hipo, Dión, Pella, Gerasa y Canatá. De tanto en tanto se eliminaba alguna de la lista, mientras se agregaban otras. En la lista de Ptolomeo del s II (vs 15, 22) falta Rafana, pero se añaden otras nueve (Abila, Abila Lisantie, Capitolias, Saana, Ina, Samulis, Heliópolis, Adra y Gadora), lo que hace un total de 18. Durante el tiempo de Herodes el Grande, Hipo y Gadara pertenecí­an a su reino por habérselas dado Augusto. Más tarde Nerón le dio Abila a Agripa II. La independencia de estas ciudades terminó en el s III d.C., cuando fueron agregadas a la provincia de Arabia. Los Evangelios mencionan varias veces la Decápolis. Multitudes de Decápolis siguieron a Jesús (Mat 4:25), los endemoniados sanados contaron la historia de su liberación en Decápolis (Mar 5:20), y Cristo pasó una vez por la región (7:31). Mapa XVI, C-4. Bib.: S. T. Parker, JBL 94 (1975):437-441; P-NH, v. 1 8. 158. Excavaciones en Jerash, la Gerasa antigua, una de las grande ciudades de

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

griego deka, diez, polis, ciudad. Liga de diez ciudades de Transjordania esparcidas principalmente al este y al nordeste del rí­o Jordán, agrupación que surgió después de la conquista de Alejandro Magno, de cultura helení­stica, entre ellas, Escitópolis, la misma Betsán, Gadara, Hipo, Pela, Abilá, Gerasa, Filadelfia, Dión, Canatá, Rafaná y Damasco.

Jesús predicó e hizo milagros en la D. Mt 4, 25; en Gadara, que pertenecí­a a la D., expulsó una legión de malos espí­ritus de un hombre, los cuales pasaron a unos puercos, que luego se ahogaron en el mar; la piara que se menciona habí­a en esta ciudad, es muestra de las costumbres helénicas de allí­, Mt 8, 28-34; en Mc 5, 1-20 y Lc 8, 26-39; este episodio de la vida de Jesús se sitúa en la también ciudad de D., Gerasa. Atravesando la D., Jesús llegó al mar de Galilea, donde curó a un sordo tartamudo, Mc 7, 31-37.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

(gr., deka, diez y polis, ciudad). Una región al este del Jordán que se le habí­a dado a la tribu de Manasés (Num 32:33-42). Después de que los romanos ocuparon la zona (65 a. de J.C.), se estableció una liga de 10 ciudades compuesta por griegos que habí­an ido tras de la conquista de Alejandro. Según Ptolomeo, después se aumentó el número a 18. Tení­an moneda, cortes y ejércitos propios. Jesús dejó a los demonios entrar en los cerdos en Gadara, una de estas ciudades (Mar 5:1-20) y se hizo famoso en todo Decápolis (Mat 4:24-25; Mar 7:31-37).

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

El territorio de las diez ciudades, la †œdecápolis† (del griego deka — diez, y polis = ciudad), se remonta a Pompeyo como una federación de ciudades. Las primitivas fundaciones helení­sticas o antiguas ciudades helenizadas (por ejemplo, Bet-San) fueron ocupadas en su mayorí­a bajo el rey Hasmoneo Alejandro Yanneo, que además intentó judaizarí­as. Cuando Pompeyo sometió Palestina y Transjordania (el año 63 a.C.), asoció aquellas ciudades helení­sticas para que fuesen un fermento de la polí­tica romana en Siria-Palestina. Más tarde Heredes el Grande consiguió incorporar a su reino algunas de aquellas ciudades. Pero en tiempo de Jesús el territorio de la decápolis volvió a formar una gran unidad.
Las ciudades miembros de aquella federación fueron cambiando, y en ocasiones fueron más de diez. Bet-San (Escitópolis) fue siempre la única ciudad de la federación que quedaba al oeste del Jordán.
En todas las ciudades de la decápolis la población era predominantemente helenista, aunque en casi todas hubo una minorí­a judí­a, que por lo general pertenecí­a a la clase inferior. Cuando la fama de Jesús se extendió también por la decápolis (Mat 4:25), debió de ser precisamente ese estrato judí­o inferior de la población urbana el que se interesó por él.

Fuente: Diccionario de Geografía de la Biblia

El término Decápolis (†œdiez ciudades†), se usa para referirse a una confederación de ciudades, todas ellas, con excepción de Bet-sán (Escitópolis), ubicadas al oriente del Jordán. Mientras que podrí­an haber estado habitadas por colonos griegos ya para el 200 a. de J.C. , durante el perí­odo de lucha de los Macabeos estuvieron bajo el gobierno judí­o. Pompeyo liberó tres de las ciudades —Hipos, Escitópolis y Pella— y las anexó a la provincia de Siria con garantí­as de libertad municipal. Al principio de la era cristiana las ciudades de Decápolis formaron una liga para defensa mutua. Plinio dice que los miembros originales incluí­an Escitópolis, Pella, Dion, *Gerasa, Filadelfia, Gadara, Rafón, Canata, Hipos y Damasco. Filadelfia era la antigua Rabat-amón (moderna *Amán) la ciudad principal de los amonitas. Pella fue probablemente fundada por los griegos y nombrada por Pella en Macedonia, el lugar de nacimiento de Alejandro el Grande. Los cristianos judí­os huyeron a Pella antes de la destrucción de Jerusalén (70 d. de J.C. ).

Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico

(diez ciudades).

Liga de diez ciudades griegas al este del Jordán, establecida después de la dominación romana en el 65 A.C.

Mat 4:25, Mar 5:25, Mar 7:31.

Diccionario Bí­blico Cristiano
Dr. J. Dominguez

http://biblia.com/diccionario/

Fuente: Diccionario Bíblico Cristiano

(Las diez ciudades). Región al SE del mar de Galilea en la cual se formó una confederación de ciudades con el propósito de defenderse de los merodeadores del desierto. Eran ciudades sirias y otras fundadas por los griegos de la época de †¢Alejandro Magno. Algunos sostienen que la confederación fue formada después por el general romano Pompeyo. Aunque el nombre alude a número diez, la cantidad de ciudades afiliadas variaba, llegando en una ocasión a ser catorce, pero se seguí­a usando el nombre D. El historiador Plinio da los siguientes nombres: †¢Damasco, †¢Filadelfia, Rafaná, Escitópolis, †¢Gadara, Hipo, Dión, Pela, Gerasa y Canatá. En el NT se dice que al Señor Jesús †œle siguió mucha gente de Galilea, de D.† (Mat 4:25). El endemoniado de Gadara, al ser sanado, †œse fue, y comenzó a publicar en D. cuán grandes cosas habí­a hecho Jesús con él† (Mar 5:20). Allí­ también fue sanado un sordo y tartamudo (Mar 7:31-37).

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, LUGA

sit, a1, 521, 439

vet, Distrito que abarcaba diez ciudades (como lo implica su nombre). Después de la conquista de Palestina por parte de los romanos, estas ciudades fueron reconstruidas y parcialmente colonizadas, poseyendo privilegios particulares. Es generalmente aceptado que las diez ciudades eran Hipos, Gadara, Pella, Filadelfia, Gerasa, Dion, Canata, Damasco, Rafana y Escitópolis. Todas se hallaban al este del Jordán excepto Escitópolis, pero parece que el nombre Decápolis designaba también un distrito al oeste del Jordán además del oriental (Mt. 4:25; Mr. 5:20; 7:31). Fue a Pella que huyeron los cristianos justo antes de la destrucción de Jerusalén.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

[016]

Federación de diez ciudades al Oriente del Jordán de población griega, que el año 63 fueron declaradas por Pompeyo zona administrativa personal del Gobernador romano de Siria. Eran Damasco, Filadelfia, Abila, Escitópolis, Gádara, Hipo, Dion, Pela, Gerasa y Canatá
.

En tiempos de Jesús pertenecí­a a Herodes, pero conservaban ciertos privilegios como el calendario o el tipo de tributos. Jesús las visitó y actuó en ocasiones en alguna de ellas, en la Decápolis (Mt 4. 25 y Mc. 7. 31), en Gádara (Mt. 8. 28) y en Gerasa (Lc. 8. 26)

Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogí­a Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006

Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa

Se trata de diez ciudades helénicas, que se confederaron en el año 63 a. de C. para debilitar el poder de las regiones vecinas y robustecer la influencia helénica. Son las siguientes: Damasco, Rofana, Kanata, Escitópolis, Dión, Gerasa, Filadelfia, Pella, Hippos y Gadara; todas, menos Escitópolis, al este del Jordán y en terreno judí­o. Una gran muchedumbre de la Decápolis siguió a Jesús en los inicios de su vida pública (Mt 4,25). Un endemoniado, a quien Jesucristo curó, se hizo entusiasta predicador de Jesús en la Decápolis (Mc 5,2-20), donde Jesús curó también a un sordomudo (Mc 7,31-37). -> .

E. M. N.

FERNANDEZ RAMOS, Felipe (Dir.), Diccionario de Jesús de Nazaret, Editorial Monte Carmelo, Burbos, 2001

Fuente: Diccionario de Jesús de Nazaret

Liga o confederación de diez ciudades (del griego dé·ka, †œdiez†, y pó·lis, †œciudad†). El nombre también aplicaba a la región en la que estaban concentradas la mayorí­a de estas ciudades. (Mt 4:25.)
Después de la victoriosa campaña de Alejandro Magno de alrededor de 332 a. E.C., se fundaron colonias griegas en Siria y Palestina, al parecer por iniciativa de veteranos del ejército de Alejandro, que, a su vez, atrajeron a inmigrantes de habla griega. Muchas de estas colonias se asentaron en lugares donde ya habí­an existido poblados judí­os, aunque hubo otras que se fundaron en territorio virgen, particularmente al E. del Jordán. Florecieron durante el dominio seléucida en Siria y el tolemaico en Egipto, pero la aparición del Estado judeo-macabeo (c. 168 a. E.C.) comprometió en gran manera su posición de relativa independencia. Si bien es cierto que en esas ciudades abundaban los judí­os, no dejaban de ser centros de cultura y organización helénicas, por lo que estaban muy lejos del concepto social macabeo. Cuando en 63 a. E.C. Pompeyo conquistó y reestructuró Palestina, se otorgó a estas ciudades protección romana y se les dio un trato de favor. Aunque seguí­an debiéndole obediencia a Roma y al gobierno provincial sirio, se les permitió acuñar sus propias monedas y se les concedió un amplio margen de autogobierno, si bien no se les eximió del pago de impuestos ni de la participación en el servicio militar.

Cómo se constituyó la liga. Probablemente durante el perí­odo comprendido entre la conquista de Pompeyo y la muerte de Herodes el Grande (c. 1 a. E.C.), diez de esas ciudades helénicas se agruparon en una especie de federación conocida como la Decápolis. Parece que el motivo de esta unión fue un interés mutuo por estrechar las relaciones comerciales y defenderse o de las fuerzas antihelénicas de Palestina o de las agresivas tribus nómadas procedentes de las regiones desérticas orientales. El término †œDecápolis† aparece primero en las Escrituras Griegas Cristianas y en los escritos de Josefo y Plinio el Viejo (ambos del siglo I E.C.). Aunque Plinio reconocí­a que ya existí­an algunas diferencias de opinión, mencionó que las siguientes ciudades eran las diez originales: Damasco, Filadelfia, Rafana, Escitópolis, Gadara, Hipos (Hipo), Dión, Pela (Pella), Gerasa y Canata. (Historia Natural, V, XVI, 74.) De estas, tan solo Escitópolis (Bet-seán) estaba al O. del Jordán. Esta ciudad daba acceso al valle de Esdrelón, cuya posición estratégica hizo de ella un importante enlace con la costa mediterránea y sus puertos marí­timos. Damasco, muy al N., en Siria, debió incluirse por su importancia como centro comercial. Filadelfia (antigua Rabá, moderna `Amman) era la más meridional, pues se hallaba a solo unos 40 Km. al NE. del mar Muerto. Las ciudades restantes estaban en la región fértil de Galaad o en la región colindante de Basán. Se cree que la mayor parte de ellas se encontraban en las rutas principales de aquella región o en sus proximidades. Es probable que Canata sea la Quenat de Números 32:42.
En el siglo II E.C., Tolomeo menciona dieciocho ciudades pertenecientes a la Decápolis, lo que puede indicar que el nombre llegó a usarse de manera general y la cantidad de las ciudades variaba. Algunos eruditos creen que Abila, mencionada por Tolomeo, figuraba en lugar de Rafana entre las diez ciudades originales. De todas formas, parece claro que la región de la Decápolis no tení­a lí­mites precisos y que la autoridad de las ciudades de la liga no abarcaba todo el territorio intermedio, sino que se circunscribí­a al distrito de cada ciudad en particular.

El ministerio de Jesús y la Decápolis. A pesar de que hubo personas de la Decápolis entre las muchedumbres que se congregaron para oí­r la enseñanza de Jesús en Galilea (Mt 4:25), no hay mención especí­fica de que dedicara tiempo a ninguna de estas ciudades helénicas, aunque estuvo en la región de la Decápolis durante su ministerio galileo, cuando cruzó el mar de Galilea y entró en el paí­s de los gerasenos (o gadarenos, según Mt 8:28). (Mr 5:1.) Pero en esta ocasión, después de expulsar demonios y permitirles entrar en una piara de puercos, lo que resultó en que muriera toda la piara, la gente de la ciudad cercana y de aquella zona instó a Jesús a que †˜saliese de sus distritos†™. El accedió, pero el hombre al que habí­a liberado de posesión demoniaca obedeció la instrucción de Jesús de ir a dar testimonio a sus familiares y proclamó las obras curativas de Jesús en la Decápolis. (Mr 5:2-20.) Hay eruditos que opinan que la presencia de una piara de puercos en ese distrito es una prueba más de la influencia no judí­a que predominaba en aquella región.
Después de la Pascua del año 32 y a su regreso de un viaje a las regiones de Tiro y Sidón (Fenicia), Jesús llegó hasta el †œmar de Galilea y subió por en medio de las regiones de Decápolis†. (Mr 7:31.) En algún lugar de esta región sanó a un hombre sordo que tení­a un impedimento en el habla y, poco después, alimentó milagrosamente a una muchedumbre de 4.000 personas. (Mr 7:32–8:9.)

Historia posterior. Según Eusebio, antes de la destrucción de Jerusalén en el año 70, los cristianos de Judea huyeron a una ciudad de la Decápolis, Pela (Pella), en la región montañosa de Galaad, lo que indica que prestaron atención a la advertencia profética que Jesús habí­a dado. (Lu 21:20, 21; Historia Eclesiástica, III, V, 3.)
No cabe duda de que, de todas las ciudades de Palestina, las de la Decápolis fueron, por sus tendencias helénicas, las que mejor reflejaron la cultura griega. Se cree que alcanzaron su máximo apogeo durante el siglo II E.C. y que hacia el siglo III la liga comenzó a escindirse. Las impresionantes ruinas de los teatros, anfiteatros, templos, baños, acueductos y otras construcciones, como las que hay en Gerasa (la actual Jerash) y en otras ciudades, dejan constancia hoy de la fuerte impronta de la cultura griega, así­ como de la gran riqueza que tuvieron las ciudades de la Decápolis.

[Mapa en la página 643]
(Véase la publicación para ver el texto completo)
DECíPOLIS—Rutas

Mar Grande
Damasco
Rafana (?)
Hipos

Mar de Galilea
Dión
Canata
Abila (?)
Gadara
Escitópolis (Bet-seán)
Pela
Gerasa
Filadelfia (Rabá)

Mar Salado

Fuente: Diccionario de la Biblia

Extenso territorio al S del mar de Galilea, mayormente al E del Jordán, pero incluyendo Bet-seán al O. Ya en el año 200 a.C. los griegos habían ocupado ciudades como Gadara y Filadelfia. En el año 63 a.C. Pompeyo liberó Hipo, Escitópolis y Pela de los judíos, anexando dichas ciudades a la provincia de Siria, pero otorgándoles libertad municipal. Alrededor del año 1 d.C. formaron una liga para promover el comercio, y para la defensa mutua contra las tribus semíticas. Según Plinio los diez miembros originales eran Escitópolis, Pela, Dión, Gerasa, Filadelfia, Gadara, Rafaná, Canatá, Hipo y Damasco. Tolomeo incluyó otras ciudades al S de Damasco en una lista de 18 ciudades en el ss. II d.C.

Hubo habitantes de Decápolis entre los que se unieron a las grandes multitudes que siguieron a Cristo en Mt. 4.25. Desembarcó en esta región en la ciudad de Gerasa (Mr. 5.1; °vrv2 “Gadara”; Orígenes escribe Gergesa, lugar ubicado en el acantilado). La presencia de tantos cerdos sugiere que la población era predominantemente gentil, la que, al sufrir pérdidas económicas a raíz del milagro, rogó a Cristo que se alejara del lugar, a pesar del testimonio del endemoniado. Cristo volvió a visitar la Decápolis cuando hizo un rodeo inusual por la zona de Hipo, en un viaje desde Sidón hasta la ribera oriental de Galilea (Mr. 7.31). La iglesia judía se refugió en Pela antes de la guerra del año 70 d.C.

Bibliografía. °°GHTS.

DCG; G. A. Smith, Historical Geography of the Holy Land, 1931, pp. 595–608; H. Bietenhard, ”Die Dekapolis von Pompeius bis Traian”, ZDPV 79, 1963, pp. 24–58; Plinio, HN 5. 18. 74.

D.H.T.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico