Biblia

H5030

H5030

Diccionario Strong

נָבִיא

nabí

de H5012; profeta o (generalmente) hombre inspirado: profecía, profeta.

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Diccionario Chávez

נָבִיא Profeta (Gén 20:7). — Fem. נְבִיאָה; Suf. נְבִיאֶךָ, Pl. נְבִיאִים; Const. נְבִיאֵי; Suf. נְבִיאָיו, נְבִיאֵיכֶם.

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Diccionario Vine AT

nabî’ (נָבִיא, H5030), «profeta». El vocablo tiene un posible cognado en acádico. Se encuentra unas 309 veces en hebreo bíblico, en todos los períodos.

Nabî’ quiere decir «profeta», ya sea verdadero o falso (cf. Deu 13:1-5). Los verdaderos profetas eran portavoces del Dios verdadero. En 1Cr 29:29 se encuentran tres vocablos que significan «profeta»: «Los hechos del rey David, primeros y postreros, están escritos en el libro de las crónicas de Samuel vidente [ro’eh], en las crónicas del profeta [nabî’ ] Natán, y en las crónicas de Gad vidente [jozeh]». Los términos que se traducen «vidente» subrayan el medio por el que el «profeta» se comunicaba con Dios, pero no nos explican en qué se diferenciaban a otros profetas (cf. 1Sa 9:9). El primer caso de nabî’ tampoco contribuye a aclarar este punto: «Ahora pues, devuelve la mujer a su marido [Abraham], porque él es profeta y orará por ti, y tú vivirás» (Gén 20:7 RVA).

El segundo caso de nabî’ sí aclara el significado del término: «Entonces Jehová dijo a Moisés: Mira, yo te he constituido dios para Faraón, y tu hermano Aarón será tu profeta» (Éxo 7:1). El antecedente de esta declaración se encuentra en Éxo 4:10-16, donde Moisés alega su incapacidad de hablar claramente, por lo que no estaba en condición de entrar en la presencia del faraón como portavoz de Dios. El Señor prometió designar a Aarón (hermano de Moisés) como portavoz suyo: «él hablará por ti al pueblo y será para ti como boca, y tú serás para él como Dios» (Éxo 4:16 RVA). En Éxo 7:1 encontramos la misma idea con palabras diferentes. Queda bien claro que un «profeta» equivale a uno que habla en nombre de otro, que actúa como su «boca».

Este significado básico de nabî’ encuentra apoyo en otras citas. En el pasaje clásico de Deu 18:14-22, Dios promete levantar otro «profeta» como Moisés para ser portavoz de Dios (v. 18). El pueblo debía obedecer y rendiría cuentas por lo que él les dijera (v. 19). Sin embargo, si las palabras del «profeta» resultaban falsas, este debía morir (v. 20). En primer lugar, estas palabras constituyen una promesa y definición de la larga sucesión de profetas de Israel. Al fin y al cabo es una promesa acerca del Gran Profeta, Jesucristo (cf. Hch 3:22-23). Por último, aunque el «profeta» o vidente hiciera milagros en demostración de ser hombre de Dios, el pueblo, sin embargo, debía prestar atención primero al mensaje y después fijarse en el milagro, en lugar de lo contrario (Deu 13:1-5).

En su forma plural nabî’ se usa con referencia a personas que no fungían precisamente como portavoces de Dios. Samuel tuvo en sus tiempos su grupo de seguidores. Alababan a Dios (a menudo con canciones) e intentaban instar al pueblo a volver a Dios (1Sa 10:5, 1Sa 10:10; 1Sa 19:20). Los seguidores de Elías y Eliseo se organizaron en grupos a fin de ayudar a estos maestros y aprender de ellos. Se les llamaba «hijos de los profetas» (1Re 20:35). Cuando se usa de esta manera, nabî’ significa un compañero y/o seguidor de un profeta.

También se usa el término en cuanto a «profetas paganos»: «Envía, pues, ahora y congrégame a todo Israel en el monte Carmelo, y los cuatrocientos cincuenta profetas de ba’al, y los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la mesa de Jezabel» (1Re 18:19).

Finalmente, el término tiene su forma femenina, «profetisa» (nebî’ah), que aparece 6 veces. En Éxo 15:20 se denomina «profetisa» a María (hermana de Moisés y Aarón). Lo mismo se dice de la mujer de Isaías (Isa 8:3). No está claro si fungían propiamente como «profetizas» o si este uso tiene alguna relación con la acepción «compañero o seguidor» de un profeta.

Fuente: Varios Autores