LOIDA

2Ti 1:5


Loida (gr. Lí‡í­s, “mejor [agradable]”). Abuela (probablemente materna) de Timoteo. Por el contexto de las palabras de Pablo al referirse a ella, parece seguro que era judí­a por nacimiento o por conversión, y que, tal vez como Eunice, era cristiana (2 Tit 1:5; cÆ’ Act 16:1).

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

abuela de Timoteo de quien Pablo hace elogios por su fe, 2 Tm 1, 5. Lot, hijo de Harán, sobrino de Abraham, Gn 11, 27; 14, 12. Al morir su padre, emigró a Canaán con su tí­o, Gn 13, 1, estableciéndose en la meseta del Jordán tras una disputa entre ambos porque su rebaño era tan grande que no habí­a pastaje para ambos y se separaron, Gn 13, 5-11. Se fue hacia el este del Jordán hasta llegar a Sodoma, Gn 14, 12, fue hecho prisionero por el rey de Elam, Kedorlaomer y los demás monarcas con los que se habí­a aliado, siendo liberado más tarde por Abraham, Gn 14, 13-16.

Encontrándose L. en Sodoma dos ángeles le aconsejaron que abandonase la ciudad con todos sus familiares, ya que iba a ser destruida por Yahvéh. A la mañana siguiente se puso en camino con su mujer y sus dos hijas; los demás parientes se habí­an quedado en Sodoma creyendo que L.

Bromeaba Gn 19, 14. Mientras que L., su mujer y sus hijas se poní­an a salvo al rayar el alba, Yahvéh hizo llover azufre y fuego sobre Sodoma y Gomorra, arrasando ambas ciudades, Gn 19, 25. La mujer de L. no escuchó el consejo de que no mirase atrás durante la catástrofe y quedó convertida en una estatua de sal. Al llegar al monte se instaló, solo, en una cueva con sus dos hijas, quienes al verse solas, sin descendencia, acordaron propinarle vino a L. y acostarse con él y así­ engendrar descendencia. Las dos hijas quedaron encinta de su padre. La mayor dio a luz a Moab, padre de los moabitas.

La pequeña también dio a luz un hijo y le llamó Ben Ammí­, padre de los ammonitas, Gn 19, 31, 38.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

(gr., Lois). La abuela maternal de Timoteo. Reconocida por Pablo por su fe (2Ti 1:5), aparentemente junto con Eunice fue responsable por el entrenamiento religioso de Timoteo.

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

Abuela de Timoteo, 2Ti 1:5.

Diccionario Bí­blico Cristiano
Dr. J. Dominguez

http://biblia.com/diccionario/

Fuente: Diccionario Bíblico Cristiano

Abuela de †¢Timoteo. Madre de †¢Eunice. Pablo le dice a su discí­pulo que traí­a †œa la memoria la fe no fingida … la cual habitó primero en tu abuela L. y en tu madre Eunice† (2Ti 1:5).

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

Piadosa mujer judí­a, abuela de Timoteo (2 Ti. 1:5).

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

Trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro en ti también. (2a Timoteo 1:5)
Loida tiene el honroso papel de la “abuela” en las Escrituras. En ella se nos revela la gran importancia de una abuela en la familia. Representa, entre las mujeres de la Biblia, la influencia espiritual única que resulta de su peculiar posición.

Es indudable que Loida habí­a sido creyente. Parece que cuando a lo envió su segunda carta a Timoteo ya habí­a fallecido. Se nos habla de la fe no fingida que “habitó primero en tu abuela Loida”. Lo que nos interesa hacer resaltar aquí­ es que esta fe no habí­a sido enterrada con ella, sino que habí­a pasado a su hija Eunice, y después, al nieto, Timoteo. Vemos pues, tres eslabones de una cadena espiritual. Una relación espiritual paralela a la relación de la sangre. A los lazos de la sangre se añaden los lazos de la fe. Es Dios quien da la fe, pero como vemos frecuentemente, este hecho ocurre con frecuencia como resultado del Pacto de gracia. Aunque hay excepciones, es más corriente que aparezca en el seno de una familia cristiana que en una familia pagana.

La regla, y no la excepción, es que los elegidos aparezcan en las familias en que hay una tradición cristiana, especialmente cuando la madre y la abuela han pertenecido al Señor. La gracia, reflejada en el bautismo, satura toda la educación en un ambiente cristiano. Tiende a hacerse una tradición familiar. De ahí­ vemos que Pablo recuerde con amor a Loida y a Eunice.

Los servicios que una madre puede ejercer para que el nieto nazca y crezca en la gracia son más destacados cuando falta el eslabón intermedio: cuando la madre no es creyente. Pero, incluso cuando lo es la abuela tiene abundantes oportunidades, tanto cuando los hijos están todaví­a en la casa, como cuando han salido de ella. La madre está muchas veces más ocupada y fatigada. La vida de la abuela transcurre de modo más pací­fico; su cara revela su mayor calma y paz. Y cuando los nietos entran en su esfera e influencia puede estampar en ellos la fe a través de su ejemplo y admonición. En este sentido la abuela puede ser, en algunos casos más eficiente aún que la madre, más activa y con menos experiencia. La abuela no debe ser dominadora de los nietos. Al contrario puede dar a nietos e hijos la bendición única que una persona madura y con experiencia espiritual puede proporcionar.

Preguntas Sugeridas Para Estudio Y Discusión
1. ¿Contribuyó la influencia de la vida de Loida a la salvación de Timoteo?
2. ¿Recibió Timoteo su fe de Eunice?
3. ¿ Qué lección aprendemos de la relación entre Loida, Eunice y Timoteo?

Fuente: Mujeres de la Biblia

Abuela de Timoteo, probablemente por parte de su madre Eunice. Las versiones siriacas dicen †œla madre de su madre†, de donde se desprende que no era su abuela paterna. Pablo elogió a Loida, y dice que era una mujer cristiana que tení­a †˜fe sin hipocresí­a†™. (2Ti 1:5.) Parece ser que la familia residí­a en Listra. (Hch 16:1, 2.) Cuando se compara 2 Timoteo 1:5 con 2 Timoteo 3:15, se infiere que tanto Loida como Eunice tomaron parte en enseñar las Escrituras a Timoteo.

Fuente: Diccionario de la Biblia

Abuela de Timoteo, presumiblemente madre de *Eunice (2 Ti. 1.5). Sin duda Pablo se refiere a su fe cristiana: si hubiera sido simplemente una mujer judía piadosa, es menos posible que el apóstol se hubiera enterado de su devoción. Es difícil encontrar paralelos para este nombre en la época correspondiente.

A.F.W.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico