NAVIOS

(heb., †™oniyah, naví­o, tsi, nave, sephinah, buque; gr. ploion, barco, ploiárion, navecilla, naus, nave, skaphe, esquife). Existe una referencia crí­ptica a algunas experiencias de naves en el caso de dos tribus (Aser y Dan, Jdg 5:17), mas la marinerí­a hebrea en general era de segunda mano. Los fenicios fueron movidos por la geografí­a a explotar el mar y se convirtieron, en el proceso, en grandes navegantes del mundo antiguo (Eze 27:4-11). La flota de Salomón en Ezión-geber (1 Reyes 9—10) consistí­a de naví­os fenicios tripulados por fenicios. El intento posterior de Josafat de revivir el comercio finalizó con un naufragio, debido, sin duda, a la inexperiencia de los hebreos en el manejo de los barcos. Las naves de Tarsis mencionadas en relación con esto y en otras partes (p. ej., Isa 2:16 BJ, DHH, NC, RVA, RVR-1960, RV-1909, naví­os del océano BAD) fueron probablemente sólidos barcos construidos al principio para el comercio con Tartessus en España; el término luego fue aplicado, como el †œClí­per Chino† y el †œIndiamen Oriental†, a barcos generalmente usados para viajes largos. La flota sureña de Salomón, por ejemplo, comerciaban con Ofir, y, si los cargamentos son una indicación, hacia la India del sur también (1Ki 10:22).El Psa 107:23-27 habla de los terrores de una tormenta en el mar, y el Psa 104:26 menciona brevemente naví­os. Isa 18:2 habla de los botes o balsas construidas de haces atados de papiros. Dan 11:30 se refiere a barcos de guerra de las costas de paí­ses occidentales o Chipre (Quitim o Kitim).

El pasaje clásico sobre naví­os es Hechos 27, que contiene el relato brillante de Lucas del viaje y naufragio de la nave alejandrina para el transporte de granos.

Estos barcos eran de tamaño considerable. Habí­a 276 personas a bordo de la nave en la que Pablo y Lucas viajaron (Act 27:37). Josefo dice que él viajó a Roma en un barco con no menos de 600 a bordo (Vida 3). El barco de Pablo pudo haber estado en una ruta norteña por causa de lo avanzado de la estación (Act 27:6).

La nave en el que Pablo continuó su viaje desde Malta al puerto de granos de Puteoli tení­a la insignia de Cástor y Pólux (Act 28:11). En la mitologí­a griega, los grandes hermanos gemelos eran patrones de los navegantes y tení­an el encargo especial de inmovilizar las naves por el mal tiempo (Horacio, Odes 1:Act 12:27-32). La narrativa en Hechos 27 también dice del sondeo de profundidad (Act 27:28) y el medir la braza del barco por un sistema de anclas compensatorias (Act 27:29). Este es el significado de la metáfora en Heb 6:19. Jam 3:4 se refiere a un timón de paletas.

Los barcos del mar de Galilea, mencionados en los Evangelios, eran sólidas embarcaciones de pescadores o barcazas para comercio local de los lados del lago. Dichos barcos cómodamente tení­an capacidad para una docena de hombres, pero ni aun dos de ellos pudieron contener todo lo que produjo el milagro de Jesús (Luk 5:7).

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano