v. Maravilla, Milagro, Señal
Exo 15:11 ¿quién como tú, oh .. hacedor de p?
Psa 71:7 p he sido a muchos, y tú mi refugio
Joe 2:30; Act 2:19 p en el cielo y en la tierra
Act 7:36 los sacó, habiendo hecho p y señales
2Co 12:12 las señales de apóstol .. p y milagros
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Hecho sorprendente que no se explica fácilmente por leyes naturales, pero que no debe confundirse con el milagro. La corriente racionalista nacida en el siglo XIX intentó explicar todos los milagros por leyes naturales desconocidas y convertirlos en prodigios.
Por regla general los prodigios tienen un significado natural. En la Historia se dio siempre especial significación religiosa a los prodigios naturales: eclipses, tormentas, terremotos, torbellinos. Y es normal que tal interpretación existiera al no conocer las causas ni hallar defensa ante tales fenómenos.
Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006
Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa
(ver MILAGRO)
PACOMIO, Luciano [et al.], Diccionario Teológico Enciclopédico, Verbo Divino, Navarra, 1995
Fuente: Diccionario Teológico Enciclopédico
teras (tevra», 5059), algo extraño, provocando asombro en el observador. Se utiliza siempre en plural, y, con dos excepciones, se traduce en la RVR siempre como «prodigios» («maravillas» en Act 2:43; 15.12), siguiendo generalmente al término semeia, «señales»; en Act 2:22, 43; 6.8; 7.36 se da el orden opuesto; en Act 2:19, «prodigios» aparece a solas. Una señal es dada para apelar al entendimiento, en tanto que un prodigio apela a la imaginación, y una maravilla (dunamis) indica que su origen es sobrenatural. Los «prodigios» se manifiestan como operaciones divinas en trece casos (9 de ellos en Hechos); tres veces son adscritos a la operación de Satanás a través de agentes humanos (Mat 24:24; Mc 13.22 y 2Th 2:9).
Fuente: Diccionario Vine Nuevo testamento